IX.

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Explosión.

Honestamente su humor no era el mejor, aún así se hallaba repartiendo directrices a los pasantes con su rostro afable y les corregía ciertas cosas sin perder su paciencia, Griss sabía que su amiga no era de las más tolerantes pero ahí estaba, siendo la versión dorada de sí misma y eso le hacía admirarla, aunque también se le escapó un grito de sorpresa —el cual apostó que fue escuchado por todo el personal de la agencia— cuando leyó el llamativo enunciado del periódico esa mañana. Incluso derramó su delicioso té de frutos rojos sobre las planillas que llenaba.

—¡Quítate de mi camino, pollo mutante! —ladró, arrebatándole la página que presentaba tan explosiva noticia.

Hawks torció el gesto en una sonrisa de lado, de esas que hacían suspirar a las fanáticas y derretía los corazones de cualquier mujer. Le divertía muchísimo la escena, así que no podría darse el lujo de perderse la reacción que tendría el héroe número uno al enterarse que era la comidilla de la farándula.

(Nombre) analizaba con sus afilados iris el bonito ramo de flores que yacía sobre su escritorio, no le gustaban demasiado las rosas rojas pero las apreciaba, a pesar de que desconocía el remitente. No era como si una pequeña y elegante "N" fuera un ingenioso apodo para mantenerse en el anonimato, lo que le hizo pensar que tal vez se trataba del Todoroki albino al no saber como expresar su arrepentimiento y culpabilidad. Sin embargo, chasqueó la lengua al leer las disculpas en la notita beige.

—¿Quién te envió eso? —preguntó Enji, entrando a la oficina. Su semblante parecía arder en molestia.

Ella se encogió de hombros, ni siquiera había considerado la idea de contarle a su pareja lo que sucedió anoche mientras se suponía que él dormía un poco. Tampoco deseaba causarle más problemas y tensiones con su familia, que ya de por sí eran bastantes.

—No lo sé, no tiene nombre del destinatario —dijo, acercándose a la imponente figura del pelirrojo y le rodeaba con sus brazos—. Quizás solo sean de agradecimiento...

—No puede ser —bramó Endeavor, sujetándole el mentón para que no rompiera el contacto visual y no escapara de su mirada inquisidora—, esas flores son las que mandan los enamorados.

(Nombre) se sonrojó, mordiéndose el labio. No se le ocurrió que el Todoroki podía estar enterado del especial lenguaje de los retoños, por eso se asombró y también imaginó lo maravilloso que sería si él un día, en un ataque de ternura, le obsequiaba un ramo de margaritas.

—Pues, no me importa quien las haya mandado o con qué intención lo hizo, ¿y sabes por qué? —habló en un suave murmullo, a Enji le fascinaba que le tratara así, como si estuviera revelándole un secreto inverosímil— Porque mis ojos están puestos en ti, mi corazón te lo di, mis manos solo quieren sostener tu linda carita y mi cuerpo anhela el calorado e intenso toque de tus rústicas palmas.

Una vez más, le había dejado sin palabras y sin aliento. Era una encantadora sensación que se ligaba con el placer de jurarse ese amor que crecía y recibía la luz del sol, como si le regalara su juventud, avivando las brasas de su pecho. El varón sentía que regresaba a la vida, todo por esa dulce joven que llamaba su adorable niña de coloridos cabellos, anatomía esbelta y facciones de muñeca.

—Y me ocuparé de que siga siendo de esa manera, porque no te soltaré tan fácilmente...

Un estruendo hizo que los personajes se separaran, aun cuando estaban a centímetros de compartir un apasionado y apresurado beso. Algunos cuadros de las paredes se cayeron, generando que la intrusa exclamara frases inteligibles por la prisa con la que soltaba los argumentos. En la portada salía de forma explícita, una foto de ambos tomados de la mano y aparentemente muy acaramelados con un encabezado tan exagerado que le dio asco a la fémina, donde se planteaba el posible romance de los héroes.

—Yo les dije que no pasaría mucho tiempo para que la bomba estallara —participó el rubio, ingresando al lugar para comprobar sus hipótesis.

Las flamas del traje de Enji habían ardido con tanta premura que casi incendiaron la estancia. Ya se avecinaba la explosión de un volcán que no tardaría en quemar todo a su paso.

Capítulos cortos para que solo engloben un sentimiento, el próximo estará bien romanticón

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Capítulos cortos para que solo engloben un sentimiento, el próximo estará bien romanticón.

Mírame ↳ Enji Todoroki Donde viven las historias. Descúbrelo ahora