Noche de Baile

22.- COMPLICACIONES.

POV MAYTE:

Mis cachorritos están creciendo muy cómodos dentro de mí. Ya no me siento tan alterada con Vincent, se me fue pasando de apoco. Pero los primeros meses fue terrible. Cada vez que lo tenía cerca me daba rabia. Casi no podía verlo. Pero ni pensar en dormir lejos de él, me ponía a llorar si llegaba tarde a dormir.

Hormonas.

Son insoportables.

Hoy cumplí 8 meses de embarazo, decidimos que me iba a quedar en casa y Vin está conmigo en caso de que rompa la fuente.

-¡¡Amor, tráeme helado!!

-¿Y la dieta?

-A la mierda. ¡Dame helado, Vincent!

Hago un puchero infantil y todos mis arrebatos de bebé solo hacen reír a Vincent y termina consintiéndome igual.

-Te amo, bebita. – me besa la frente y va por el helado. Lo amo.

-Hey, dejen de pelear ahí dentro. No pateen a mamá. – les reprocho a mis hijos. Hoy están más inquietos que nunca.

-Ya princesa. Tu helado.

-Gracias amor. ¿Qué hora es?

-Las 3 y media de la tarde.

-Eddie ya debería haber llegado. Llámalo. Te dije que no estaba listo para venirse solo. Debiste ir por él. Los cachorritos y yo estamos bien.

-Lo voy a llamar, tranquila.

Lo veo marcando en su teléfono, pero mi pecho duele de pronto. Algo va mal.

-Algo va mal, Vincent. Habla con Eddie.

-Tranquila, estoy llamando.

-Vamos a buscarlo. Vamos. Maneja.

-Mayte.

-No, Vincent. Mi hijo, le pasa algo. Lo sé. Conduce.

-Bien, pero tranquila, no puedes alterarte.

-Entonces conduce.

Vincent toma las llaves del auto y me ayuda a ponerme de pie. Nos subimos al auto y vamos a la secundaria de Eddie. Vincent se baja y me ayuda a bajar.

-¿Tía Mayte? ¿Tío Vin?

-Hola princesa, has visto a Eddie, debió llegar a casa hace media hora.

-No lo he visto, pero debe haberse ido con los chicos de su grupo, seguro se entretuvieron conversando. ¿Pasa algo?

-Tu tía está alterada.

-¡Emi! – un chico alto y guapo se acerca a mi princesa.

-Dime.

-¿Ya te vas? Pensé que podíamos ir por un helado y te acompaño a tu casa. – Emily sonrojada. Veo a mi hermano muy celoso.

-Puede ser. Te presento a mi tía Mayte y su esposo, Vincent.

-Mucho gusto, soy Steve Anderson.

-¿Son novios?

-Somos amigos. Ayúdanos a buscar a mi primo. ¿Lo has visto?

-¿Eddie?

-Sí. No tengo más primos en secundaria, genio.

-Ah sí, lo vi irse con un hombre. Estaba en mi práctica de fútbol y lo vi. Pensé que era su papá.

-¿Se fue con un hombre? ¿Qué hombre?

-Steve, ¿estás seguro?

-Sí, seguro, era tu primo.

Comienzo a llorar, no sé qué pensar ni qué decir, solo me pongo a llorar. Vincent comienza a llamar a la policía y Emily comienza a llamar a su papá y al mío. Yo solo consigo caminar dentro del establecimiento.