Solo fui por un cafe

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Solo quería un café con poca azúcar,

quizá un croissant...

No iba por la tertulia o el flirteo.

No habia servido de nada poner continentes de por medio. Ni siquiera la distancia entre la jungla de Indonesia y el desierto de Afganistan era suficiente tierra y mar de por medio como para que ella pudiera pasar una sola noche sin recordarlo y que el la tuviera presente en su dia a dia.

No ayudaron los meses sin verse, ni el silencio, ni la distancia. Es mas, esos factores habian ayudado a recrudecer la añoranza y el recuerdo. La memoria eidetica de ella esta vez era una maldicion que la hacia recordar cada gesto, cada sonrisa, cada mirada. La memoria sensorial de el la hacia revivir trozos de sus interacciones. Soñaba despierto en momentos en los que mas le valia estar alerta para seguir vivo mientras, al otro lado del mundo, ella se confundia de nombre con el arqueologo en jefe que por casualidades del destino o carcajada de la vida se llamaba Antony Scalion.

Tampoco fue algo bueno que tuvieran amigos en comun por los cuales podian saber y averiguar acerca de sus vidas. Cam informaba a Booth a regañadientes lo poco que podia enterarse del itinerario isleño de la Dra. Brennan y Angela hackeaba la ubicacion de Booth desde el Angelatron cada vez que la casi inexistente red de internet de Afganistan se lo permitia.

Al final todo se reducia a este momento.

Ellos, frente a frente, de una manera casual y hasta risible en su punto de encuentro no acordado. El querido Royal Dinner.

Todo por un cafe... malditas ganas de cafeina por la mañana.

- Booth...

- Bones...

Solo quería un café.

Quizá echarle algún vistazo

A las malas nuevas de los diarios o sacudirme

Esa pereza crónica de mis amaneceres...

El se paso la mano por el cabello y evito tanto como pudo el contacto visual.

Ella, por el contrario, lo miro descaradamente como analizandolo.

El habia bajado de peso y estaba vestido con su uniforme militar... maldita sea que estaba tan guapo y viril en ese traje camuflado... Enfocate Temperance, no vale de nada que te le quedes viendo como si fuera el ultimo ejemplar de macho alfa del planeta. Entabla una conversacion antes de que piense que no tienes interes...

Ella tenia ojeras de mapache por las noches de insomnio y estaba con su ropa desvencijada de excavacion pues acababa de llegar de una en Indonesia... Cristo, se le ve tan bien con esa camiseta ajustada y esos pantalones cargo... Por Dios Booth, deja de babear como un San Bernardo y hablale...

El habia hecho su ultima gira en Afganistan y ahora era libre de asesinatos por encargo del gobierno de los EEUU. Booth levanto los ojos hacia ella y por un instante todo a su alrededor se difumino... todo menos un par de iris turquesa que miraban directamente a sus ojos castaños como si penetraran directamente a los lugares mas reconditos de su mente y descubrieran que el jamas pudo sacarsela de la memoria y mucho menos del corazon.

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