— ¿Y luego? —Yu Na bebía de su malteada con plena atención a lo que Jimin decía.
—Y Jungkook le dijo que no quería lastimarla, que no se lo perdonaría hasta que Eun Bi le da una bofetada así bien dramática, —imitó la acción de golpear a alguien— luego le dijo que eso era por no decirle las cosas, y luego se besaron apasionadamenre para decirle que eso fue por todo lo bueno que le dió, luego la llevó a casa y Jungkook vino a mi casa a contarme todo emocionado porque ya no tenía remordimiento en su mente.
— ¿Entonces fue a la casa anoche?, no inventes y yo en calzones. —Yu Na cubrió su boca haciendo reír a Jimin.
—No, mi amor, tu estábas en la cama como en el quinto sueño. —Jimin cubrió su boca riendo.
Una de las chicas que estaba en la fila tocó el hombro de Jimin, ambos voltearon para saber la razón de la acción de la chica. Habían perdido la noción del tiempo y espacio en el que estaban. Yu Na pasó su lengua por dentro de su mejilla aguantándose las ganas de arrancarle las uñas falsas a la chica atrevida.
— ¿Van a estar chismeando de sus amigos o van a avanzar la fila? —La chica se cruzó de brazos, y notaron que era un chico por su voz grave.
—Oh, lo siento linda, —Yu Na le regaló una sonrisa— por cierto, lindo bolso, ¿chanel cierto?
—Ay chica, —se sonrojó— tú si sabes de bolsos finos, ¿te tomas una selca conmigo?
Jimin observaba confundido a ambos mientras tomaban la foto. Yu Na admiraba a quienes tenían la valentía de demostrarle al mundo quienes eran como lo hacía ese chico transexual. Intercambiaron teléfonos y avanzaron en la fila mientras seguían hablando de marcas.
La mirada de Jimin viajó hasta el área de dulces en aquel cine, su boca se abrió frunciendo su entrecejo al ver a Eunha, Eun Bi y Jungkook salir del pasillo de las salas. Pero que mierda, sus palabras se quedaron en su lengua al ver que ellos reían alegres mientras Eunha hablaba.
— ¿Y a estos que les picó? —Comentó en son de burla, porque le parecía extraño ver a un chico con su exnovia-mejor amiga y su nueva amiga juntos.
Lo que le contó a Yu Na apenas había pasado hace casi una semana, no entendía como cambiaron drásticamente de actitud. Rodó los ojos sin querer entender la forma en que ahora estaban. Jimin tomó la mano de Yuna luego de comprar los boletos de cine, llegaron al puesto de palomitas no sin antes ponerse lentes oscuros para evitar que los chicos les reconocieran.
Jungkook sintió la presencia de Jimin, casi como una alma gemela siente la llegada de su amado, pero decidió ignorarlo al tener una plática muy interesante de libros en donde opinar.
— ¡Ay, mira, yo quiero uno! —Eun Bi corrió a la maquina de peluches.
Apenas iba a tocar el control de la maquina cuando cuando otro chico puso su mano sobre este, la mano de Eun Bi quedó cubriendo la de él. Ambos levantaron la mirada casi lanzando chispas por saber quien sería el primero en usarla, Eun Bi apretó más su mano casi encajándole las uñas, su actitud se describía en un verso de una canción popular: "lo veo, me gusta, lo quiero, lo tengo".
Hoseok estaba decidido a no soltar el control de la maquina, su mirada estaba fija en su mano, le importaba una mierda si se trataba de la reina Isabel o una deidad, no iba a soltar el mando. Bajó su cubrebocas cuando la chica enterró sus uñas en sus nudillos.
— ¡Agh! —Exclamó con dolor. Eun Bi lo sujetó con ambas manos quedando frente a él— Hey, no se vale con las dos manos.
Hoseok puso su palma sobre la mano de ella. El olor en su cuello le parecía familiar, supo que era Eun Bi cuando vio en sus orejas aquellos pendientes que le había regalado anteriormente. Sonrió acercando su cuerpo al de ella, sabía que Eun Bi era virgen y que se asustaba cuando alguien se acercaba mucho a ella. Jodida mierda, ahora no, dijo en su mente cuando sintió sus pantalones apretarse sobre su miembro.
Eun Bi sintió un bulto en su trasero, sabía que Hoseok la estaba intimidando para que se rindiera, pero ella era más lista que él. Quitó una de sus manos, por un momento Hoseok pensó que ganaría, pero sus ilusiones se derrumbaron al sentir como Eun Bi acariciaba su miembro sobre su pantalón. No te dejes vencer, muéstrale que eres más fuerte que ella, se automotivó.
—Eun Bi no seas infaltil, —Jungkook habló al ver que ninguno de los dos estaba dispuesto a ceder— deja eso, compraremos otro, hay muchos peluches en las tiendas de adelante.
—Yo quiero este peluche. —Eun Bi reforzó su agarre.
Eunha rodó los ojos, ella misma sabía que cuando Eun Bi quería algo lo tenía de una u otra forma. Jaló el borde de la chaqueta de Jungkook para hacerle una seña para que siguieran caminando, al principio no estaba muy seguro, pero al ver como ambos seguían en la misma posición asintió a Eunha.
—Bueno, nos adelantamos. —Eunha se despidió a pesar de que la otra ni siquiera volteó a verla.
Hoseok quitó una de sus manos del control para posarla sobre uno de los pechos de Eun Bi, ahora estaba seguro de que se avergonzaría, pero Eun Bi simplemente se acomodó sobre sus pies decidida a no soltar el mando. La mano de Eun Bi se adentró al pantalón de él, estaba a punto de tocar su falo cuando este se alejó soltando el control. ¡Bingo, gané!, saltó de la emoción celebrando.
— ¿Estás demente? —Hoseok acomodó su crubrebocas— Casi me violas por un peluche.
—Te también me tocaste. —Dijo en su defensa mientras movía el control con precisión.
—Pero fue sobre la ropa, no desnuda, por tu culpa tendré que ir a casa con esta incomodidad. —Abrochó su gran chaqueta cubriendo su entrepierna.
—Ten, —le entregó un peluche— es la pareja del mío y no quería dejarlo solo ahí.
—Ay, gracias, —Hoseok sonrió abrazando el peluche— ¿quieres que te lleve a cenar?
—Ya deberías saberlo. —Sonrió golpeando levemente su pecho.
——¿se puede
shipear ahora? uwuun saludo a
adam (mi bb uwu)te amo como toda
la gente ama el pollo 🍗
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mean girls ⬅ bangchin 🌠
DiversosSowon, Eunha, Umji, Eun Bi y Yerin. Cinco chicas que pasaron de ser nada, a las mejores amigas, a quienes todos conocían en la escuela como "chicas pesadas", no porque fueran unas perras bully, más bien simplemente por su gran popularidad y belleza...