Choice number twelve

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El sonido de las olas me despierta, unas manos están jugando con mi pecho así que sin mediar palabra me coloco sobre ella

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El sonido de las olas me despierta, unas manos están jugando con mi pecho así que sin mediar palabra me coloco sobre ella.

Comienzo a besar su abdomen mientras ella enreda sus dedos en mi enmarañado cabello. Anoche fue intenso, pero aun no tengo suficiente, con ella nunca es suficiente.

La punta de mi lengua recorre un camino hermoso hasta arriba encontrando a su paso un pezón duro y rosado, mi estómago se contrae de felicidad, comienzo a succionarlo haciendo que los sonidos provenientes de la boca de mi víctima me motiven a continuar con mi trabajo.

El sabor de su piel es un delirio para mí, nunca puedo tener suficiente.

Un rato después de jugar, sigo besando su cuello hasta llegar al encuentro de su boca. Sus labios son tan hermosos, son una adicción de la cual no pienso curarme nunca, con los dedos comienzo a recórrelos, entonces para mi sorpresa, con agilidad atrapa con sus dientes mi dedo índice. Mis ojos se abren en par ante la anticipación.

Ella envuelve mi dedo con su caliente lengua haciendo que esté al borde de la muerte, lo chupa con suavidad calentándome como si fuera el mismo infierno. Saco mi dedo de su boca y la beso con todo lo que tengo, muerdo sus labios, exploro todo a mi alcance. Es todo tan mágico que temo que sea un sueño nuevamente.

- ¡Oppa! – exclama con un gemido al liberarla del beso.

Con un movimiento rápido me coloco en posición y comienzo a entrar en ella, sus quejidos me preocupan, pero a la vez me excita de una forma un poco perversa.

Una vez acostumbrada, comienzo a moverme con lentitud disfrutando de la sensación apretada y envolvente.

En un punto pierdo todo y comienzo a besarla nuevamente mientras le hago amor como un condenado. Ella gime y clama por mi nombre, una y otra vez, con sus uñas clavadas a mi espalda llegamos juntos al paraíso prometido.

...

- ¡Oppa! – Jeongyeon me llama desde el agua.

Ha insistido en venir a la playa y la consentí, yo podría darle todo lo que me pida. Pero me hubiera gustado seguir en la cama, juntos y abrazados sin levantarnos jamás.

- ¡En un rato voy!

Saco mi teléfono y tomo una foto de ella desprevenida. Esta tan feliz jugando en el agua que parece una niña pequeña.

Han pasado casi tres años que decidimos volvernos novios y desde eso todo ha sido un viaje de montaña rusa, pero lo hemos sobrellevado juntos porque ella se apoya en mí como yo lo hago con ella.

Hubo momentos muy difíciles en los que me debatí las opciones de renunciar a todo por Jeongyeon o renunciar a ella por seguir mi carrera de idol. Lo bueno fue que me armé de valor y decidí por los dos, decidí seguir siendo un idol pero con Jeongyeon a mí lado.

Hemos vivido tanto que a este punto ya no dudo de su amor por mí, y yo me encargo de hacerle notar lo mismo.

La amo. La amo tanto que no sé cómo explicarlo.

Amo su manera de reír, amo cuando se enoja, amo cuando es atenta y comprensiva, amo cuando es ridículamente divertida, amo su torpeza y sus destrezas.

Amo lo increíble y maravillosa persona que es.

Nunca quiero dejarla ir.

Me levanto y corro para entrar al agua, antes de llegar ella comienza una avalancha de agua y me moja por completo.

- Oppa, ¿por qué no se ha quitado su camisa?

- Alguien me ha dejado marcas en mi espalda – mis manos nadan bajo el agua y la envuelvo en un abrazo – no quiero que piensen que mi novia es una salvaje.

- Y yo que pensé que oppa iba a lucir esas marcas con orgullo – ella ya no se avergüenza con mis bromas sino que las elabora, me encanta que sea pícara – entonces las personas sabran cual salvaje es en la cama.

- Me puedo quitar – hago un movimiento de quitar mi camiseta y ella me detiene.

- Mejor no, se va a quemar porque no se puso protector – dice.

- Jeongyeon iba a pedirte que seas mi esposa el día que viniéramos a Tailandia y ahora estamos en Tailandia – saco una caja mojada del bolsillo - ¿Quieres ser mi esposa? Me arrodillaría, pero entonces me hundiré y no podré escuchar tu respuesta.

- ¡Sí oppa, quiero casarme con usted!

- ¡SI! – grito de júbilo y le coloco el anillo en el dedo.

Siempre tuve opciones en la vida y todas ellas me llevaron a éste lugar a éste preciso momento. Lo mejor es que desde ahora cuando se presente una serie de opciones en la vida ya no tendré que decidir solo porque encontré a mi otra mitad.

A mi alma gemela.

- ¡Te amo Taehyung!

- ¡Te amo Jeongyeon!

Y vivimos felices para siempre...

FIN

Nota de autor:

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Nota de autor:

¡Gracias por seguir Choices! Honestamente cuando empecé a escribir solamente tenía pensado unos 5 capítulos pero las cosas se dieron y aquí estamos. 

¡Espero que lo hayas disfrutado! ¿Nos veremos nuevamente en un nuevo JeongTae? Solo el tiempo lo dirá. Por ahora, esto ha sido todo.


Con amor, Chiqui

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