10

732 112 74
                                    

—Mi nombre es Sticks, Sticks the badger, y dudo mucho que estemos hablando de la misma persona.

El par se quedó incrédulo ante las palabras de la chica tejón, ¿todo esto lo hicieron para nada? No, era imposible. Simplemente se negaban a la idea de que su aventura acabara tan pronto. Al fin y al cabo, todos merecemos la oportunidad de un final feliz, ¿no?

—¿Esto es una broma? Por que si es así entonces déjame decirte que no eres buena en ellas.

—No es una broma.—esta vez habló seca, con algo de frustración y disgusto en sus labios.—Lo conozco, pero no es para nada como el que ustedes dicen. Robotnik vino aquí hace unos meses y nos enseñó muchas cosas, en gratitud nosotros lo coronamos como nuestro líder, así de simple, y si no tienen otra pregunta se pueden ir aho—

—¿¡Líder!?

—Sí, ¿por qué tanto sorpresa? No es para tanto.

—¡Intentó destruirme!

—Sonic.—El menor se acercó al mencionado, pronunciando suavemente para que pensara muy bien lo que iba a escuchar.—Se que suena algo hipócrita que yo te lo diga pero, ¿no has pensado que de verdad él pudo... Haber cambiado?

—Tu también estás haciendo bromas de mal gusto.—mencionó de forma infantil, con cuidado de que él fuera el único que lo escuchara.

Ambos se miraron por un tiempo, manteniendo una débil pelea de miradas tristes para saber quien tendría razón, Sonic se fijó en algunos detalles que no había visto antes en él, pero realmente no estaba muy atento en eso, ¿Robotnik cambiar? ¿Era eso tan siquiera posible? ¿Acaso todo lo que sufrió era meramente insignificante? Todas esas preguntas pasaban por su mente y se hacían nudos hasta formar un estambre sin solución.

Era imposible cuantas vueltas le diera, no llegaba a ningún lugar.

Pero más que eso, le dolió el hecho de que Tails no estuvo esa vez de su lado, aunque en el fondo de su alma sabía que el menor tenía razón. No siempre iba a ganar en todo.

No siempre los planetas girarían en torno a él.

—Vengan conmigo.—Stick interrumpió en sus pensamientos, estando en la entrada de su madriguera.—¡Vamos! no muerdo... Al menos que muerdan primero.

Esa última frase hizo dudar a ambos de si seguir o no, pero después de una buena pasada de saliva pudieron pararse y continuar con su caminar, teniendo esta vez más cuidado de no enredarse entre los abalorios.

¿Era posible reírse debajo de una imparable tormenta? El Tails del pasado no hubiera dudado ni siquiera en decir "no", pero ahora esa pregunta era una incógnita para él.

Sonic era lo único que lo detenía en responder con una negación, pues comenzó a hacer de sus días tan solitarios y aburridos a una caja llena de chocolates sin probar.

Sonic era lo único que lo detenía en responder con una negación, pues comenzó a hacer de sus días tan solitarios y aburridos a una caja llena de chocolates sin probar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Speed me up IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora