¡ diez !

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Parte 3

i like it when we get closer, when it gets risky

Han Jisung no podía creer la situación en la que se encontraba. Nunca, ni en sus mejores sueños, algo así había pasado. El ambiente en el que se encontraba era lindo, acogedor. Había un suave barullo de fondo, las voces de las personas se combinaban con la música que sonaba a un nivel considerablemente bajo. Las paredes color crema y las mesas color madera eran lindas, y resaltaban bien con los detalles en hierro negro y las plantas verdes. 

Jisung se sentía extrañamente feliz allí. Y Minho también.

Todo había comenzado unas horas atrás, cuando Minho apareció en la puerta del dormitorio del menor y, prácticamente, lo obligó a salir con él. Jisung había aceptado un tanto dudoso, pero cuando llegaron al café, no se arrepintió de nada. 

Estaban saliendo, como amigos. Más allá de todo lo que había pasado entre ellos las últimas semanas, estaban sentados enfrentados en una linda y pequeña tienda de la ciudad, mientras tomaban café y comían torta como si nada más pasase; como si la situación en la que se encontraban no los atormentase cada vez que intentaban dormir. 

Minho sonreía cada vez que alguna broma estúpida salía de su boca y Jisung se sentía bien. Los ojitos en forma de media luna del rubio al reír, el lunar en la punta de su nariz, y sus risitas tímidas le arrebataban el aire. 

—Gracias por aceptar salir conmigo —dijo Minho de un momento a otro, sorprendiendo al peliazul.

—¿Por qué no iba a venir? Digo, somos mejores amigos —Jisung rió nervioso, buscando cualquier cosa a su alcance para tomarla entre sus manos y distraerse.

—No somos mejores amigos, Sungie —Minho rió al decirlo, una risa tímida y tierna, de esas a las que Han apenas podía resistirse.

Jisung no contestó, sino que se dedicó a terminar el poco café que le quedaba en la taza para irse lo antes posible. Repentinamente, se sentía incómodo y nervioso. Pidió la cuenta notando los ojos de Minho sobre él, pero el rubio no dijo nada. Conocía a Jisung más de lo que el chico pensaba. 

Ambos salieron del café después de un rato, y para sorpresa de Jisung —lo que le faltaba, otra sorpresa más—, Minho lo tomó de la mano; entrelazó sus dedos y le sonrió antes de empezar a caminar. El peliazul no supo que hacer, así que dejó que el mayor lo llevase por la ciudad de la mano, como si entre ellos hubiese algo que una extraña pero dulce amistad. 

Minho se detuvo al llegar a un parque, donde soltó la mano de Jisung que con tanto amor sostuvo. Separó frente a Han y se acercó a él, sus cuerpos quedaron separados por un pequeño espacio.

—Voy a dejar a Yuna.

Jisung se quedó pasmado en el lugar, sin saber que responder.

—No podés hacer eso —dijo finalmente—. No podés dejarla.

—Si puedo, y lo voy a hacer. 

Jisung negó.

—No. Está mal. Después vas a arrepentirte. No la dejes por mí.

La verdad, era que Jisung adoraba la vida que llevaba. Más allá de tenerle un enorme aprecio a Minho, y haber estado enamorado de él durante mucho tiempo, Jisung disfrutaba salir los fines de semana con Changbin a buscar alguien con quien estar esa noche. Le gustaba romper corazones luego de que lo hayan follado; pero no quería lastimar a Minho con sus juegos. Así que no tuvo mejor idea que seguir con aquella relación extraña que tenían.

—No la dejes, vamos a esconderlo mejor.

Minho suspiró pesado y tomó el rostro de Jisung con cuidado entre sus manos. Lo acercó al suyo y miró con todo el amor del mundo sus ojiitos oscuros.

Unió sus labios en un beso suave y tierno, de esos que no solían compartir porque Minho prefería demostrar el amor que le tenía con acciones bruscas, y a Jisung le encantaba eso, pero la forma en que lo besaba en ese momento, con tanto cuidado como si fuese a partirse en miles de pedazos, lo hacía sentir especial. 

Jisung era muy especial para Minho. 

—Si vos querés que las cosas sean así, entonces van a ser así —dijo cuando se separaron—. Pero quiero que sepas que estoy dispuesto a dejarla para estar con vos. 

BABY DON'T LIKE IT  ━ MINSUNGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora