Yoohyeon estaba bailando al lado de su crush. Lo que la hacia pensar demasiado. Por un lado no podía creer que Kim Minji estuviera en la fiesta de los de último año. Se suponía que ella ya había terminado la secundaria. Aunque por otro lado ¿qué importaba? No quería desabrovechar la oportunidad de tener algo con ella. Solo hacia falta una excusa para comenzar a hablar.
Y el cuerpo de Yoohyeon se encargaría de darle esa razón. Un choque, un empujo entre sus codos, o un manotazo en medio de la cara. Y con la izquierda, donde tenía un anillo. Bingo. La castaña no pudo sentirse peor al escuchar a Minji maldecir mientras tocaba su nariz. No la habìa hecho sangrar ¿o si?
Para la mayor solo era un poco de exageración para mirar disimuladamente a la otra chica. Alta, cintura pequeña y una pronunciada cadera. Busto normal, unas piernas hermosas para tocar. Bonita, de buen cuerpo y seguro excelentes movimientos. Pero con un toque muy tierno al verse tan preocupada. Como su ceño se fruncia levemente y sus ojos se esforzaban por ver en detalle. Como sus labios se apretaba... Tal vez era demasiado para la rubia.
—No te preocupes. Creo que no tengo nada.
—De todas formas lo siento Unnie...
—Hey ¿me acompañas al baño? Quiero que veas que estoy bien. —terminó con una risita y un asentimiento por parte de la menor.
Y una vez adentro no perdió la oportunidad de besarla, de tocarla. Sentir su piel bajo la ropa, recorrer sus cuervas y deleitarse por las manos ajenas que recorrian su cuerpo. Cómo habían perdido la ropa, cómo se aceleraban... Por momentos Yoohyeon sentía que Minji iba muy rápido. Quería seguirle el paso, quería sentirla y recordar con detalle sus alaridos, sus suspiros y la sensación que tenía al tocarla. Pero llego un punto en que sus manos fueron apresadas tras su espalda. Minji se separo tan solo unos 2 o 3 cm. de ella y la miró. Clavó sus ojos en los de Yoohyeon, haciendola sentir aún más pequeña.
—¿Te molesta si te ato?
—No... Hazlo.
—Date la vuelta y ponte de rodillas.—La rubia sonrío de lado y Yoohyeon hizo exactamente lo que le pidió. En el orden en el que lo pidió. Luego sus muñecas se rodearon con algo gruezo y rasposo. Estaba segura que era el jean de Minji. Mordió su labio inferior con el último nudo.—Buena chica...
Yoohyeon quería seguir escuchando eso, quería que Minji le dijera que era SU buena chica y no podía creer que una de sus fantasías se cumpliera. Y vaya que tenía muchas de ese tipo, donde incluía a su crush. Sentirla acariciar su cuerpo, hacerle cosquillas al pasar sus manos por su abdomen, por sus muslos. Seguir el camino entre sus piernas hasta entrar en ella.
Quería gemir su nombre.
Aunque si había algo que la mayor disfrutaba mucho era atacar sus cuellos. Besarlos, dejarles notorios chupones. Quería marcarlas como suyas. Aunque lo fueran por una noche, por unas horas o minutos. ¿qué importaba el día siguiente? Podrían seguir con ella como también podían irse y no volver. Pero sin importar cuál fuera la opción, la naturaleza posesiva de Minji se hacía presente.
—Vamos... Dilo.
—S-soy... Tu perra... ¡Mhg!... T-tu perra m-mommy~
—Buena chica... Repitelo.
Y si eso significaba escucharla decir "buena chica" Yoohyeon lo repetiría cada vez que su unnie lo quisiera; haría todo lo que dijera. Y si significaba volverse loca intentando no correrse también lo haría. Tenía que exprimir al máximo esa vez.
Pero al terminar quería más. Más que una noche, en una fiesta, en un baño. ¿Qué le diría al respecto? ¿aceptaría?
—Mommy, quiero... No. Olvidalo.—pero ¿y significaba ser una más en su lista? Tenía miedo de arruinarlo. Que simplemente le dijera que no era lo que queria, que se levantara y se fuera.
—Vamos. ¿qué quieres? Puedes decírmelo.
—¿Puedo preguntarte algo?
—Supongo. ¿Qué es?
—¿Por qué estás en está fiesta? Digo-
—Porque repetí el año. ¿Puedo preguntarte algo yo?
—Lo que quieras unnie
—¿Me darías tú número?—Minji tenía miedo de volver a arruinar todo, como siempre lo hacía. Pero Subin ya era feliz con Ahyoung. Era exitosa, buena persona y estaba con alguien a quién amaba, alguien que también la amaba. Y Minji quería ser como Subin... Quería encontrar a esa persona con que ser feliz. Por que en el fondo seguía siendo la princesa que quería un final feliz. Aunque eso no existiera realmente.
—Claro. Dame tú celular.—Sonrió Yoohyeon, extendiendo su mano hacía la mayor.
—¿"Yoohyeonnie"? Con un corazón incluido. Que linda.—La menor se sentó sobre las piernas de Minji con entusiasmo, exactamente el mismo que reflejaba su sonrisa.
—¿De verdad crees que soy linda?
—Claro que sí... Y me gustaría conocerte.
—Yo tam-
Un fuerte estruendo la interrumpió, llamando la atención de ambas al escuchar un grito llamando a Siyeon. Se levantaron del suelo y acomodaron su ropa sin mucho cuidado. En especial Minji que apenas vio a una desconocida golpear a su amiga se metió sin dudarlo. Sabía la castaña prefería las peleas verbales y por eso era obvio que no había comenzado la pelea. Solo se la quería sacar de encima, literalmente. Mas Yoohyeon solo vió a la ex de su mejor amiga golpeando a Lee Siyeon... Y se imaginaba la razón.
La rubia caminó hasta donde estaban ambas y clavó la punta de su bota en el estomago de la desconocida. Consiguió que se hicera bolita un momento y aprovechó para empujarla. Más Siyeon impidió que siguiera
—Gracias pero... No vale la pena.—Minji siguió los ojos de la vocalista y los vió fijos en una chica. Bajita y pelinegra. Con una linda remera de "Boy". Mientras que Siyeon esperaba que Bora entendiera a que se refería con "No vale la pena".
—Entonces busquemos a Joon y vamos.
Y así lo hicieron, dejó a Siyeon en su casa con su preocupada y chillona hermana y se dedicó a conducir hasta su hogar. Maldiciendo a su amigo en todos los idiomas que conocía por perder sus llaves. Casi eran las 6a.m. y eso significaba que mamá estaba despierta. Suspiró antes de entrar con Joon colgando de los hombros.
—Minji.—Se escuchó en un severo tono.
—Sí, soy yo... Buenos días por cierto.
—¿Qué haces llegando tan tarde? Mañana empiezan las clases. Y encima traes a alguien. No es un motel Minji.
—Primer lugar, es Joon. No es "alguien". Dos, está totalmente borracho, no cogería con alguien así y tres... Soy lesbiana. ¿Cuántas veces tengo que decirlo?—Terminó mordiendo su lengua para para no sonar molesta. Odiaba llegar y que solo discutieran. Solo escuchaba reclamos.
—Deja de levantarme la voz, Minji ¿cuántos años crees que tienes para hablarme así? Encima apestas ¿estuviste bebiendo?—Otra vez, reclamos y provocaciones.
—Apesta Joon, yo no bebo casi. Y mejor ve a trabajar. Si quieres discutimos cuando vuelvas. Pero estoy cansada y- Adios.
Rodó los ojos y volvió a arrastrar a su amigo hasta el baño, se encerró y abrió la ducha para luego meterlo a bañarse. Obviamente mientras esperaba que su madre se fuera. Luego tendría tiempo de bañarlo y dormir... Eso esperaba.