Stockholm syndrome

La habitación

Tomura llevó a Kai a una habitación, había una cama de dos plazas, con dos veladores a cada lado, un clóset y un escritorio.

Desde ahora dormirás aquí, Kai- dijo Tomura al oído de Chisaki- buscaré la ropa que te compré, quedó en el living.

Kai se horrorizó, ¿Qué planeaba hacer con él? ¿Tendría razón el otro sujeto? ¿Cómo debería huir?, Entonces Kai fue hacia la ventana, estaba tapada por fuera con tablones de madera, pero de entremedio podía pasar la luz y podía ver lo que estaba afuera escasamente.

La ventana estaba con llave al parecer, aunque la rompiera, el ruido alertaría a los asesinos, y además tendría que sacar esos tablones.

Kai se sentó en la cama, mirando a la nada, se abrió la puerta y entró Tomura, abrió el clóset y sacó un gancho de ropa y de la bolsa extrajo un abrigo verde oscuro con un cuello peludo de color morado, lo colgó en el clóset, había otras prendas colgadas, pero Kai no se fijó bien en ello, también sacó una camisa negra elegante, una corbata blanca y unos pantalones negros, esos los dejó en la cómoda.

Si quieres puedes cambiarte de ropa, siempre te he visto con corbata y camisa, así que te compré de eso, pero si quieres después te puedo traer algo más informal- dijo Tomura con una sonrisa- ah creo que debo de conseguirte algunos guantes ¿verdad? Y quizás una mascarilla.

Tomura se fué del dormitorio.

Chisaki miró dentro del clóset, el abrigo verde oscuro se veía cómodo y calentito, era simple, realmente encajaba con sus gustos, en eso pudo escuchar un sonido proveniente de afuera, el motor de un auto, trató de ver a través de las tablas de madera, pero no pudo ver nada claro.

Pasó un rato ahí, cómo 15 minutos antes de escuchar a alguien llamar a la puerta, la voz de una chica se escuchó atrás de la puerta.

¿Puedo pasar?

Kai tuvo miedo, no sabía que hacer exactamente, si le decía que no, seguro entraba igual, no quería decir que si, además que querría, de todas las maneras Kai creía que entraría y que demonios podía hacer.

¡Voy a entrar! Con permiso.

La chica era Himiko Toga.

Sabes creo que debes de estar aburrido, traje un juego de mesa y unas películas, podemos jugar o ver una película- dijo Himiko sonriendo.

Kai no supo que decir, así que sólo dijo que ella escogiera.

Himiko eligió ver una película, entre las películas que trajo, eligió una sangrienta y brutal.

Kai se estremeció con las escenas más explícitas, pero no dijo nada, temía más a la chica que tenía al lado.

La película terminó, una hora y media de estrés por fin acabó.

¡¡Ahora juguemos a “Asesinato en Hong Kong”!!- dijo emocionada Himiko- aunque realmente no se si sea bueno, pero se ve interesante.

Chisaki sólo asentío, se sentó en un cojín en el suelo y Himiko puso el juego de mesa en el piso.

¿Por qué la mascarilla y los guantes?- preguntó curiosa Himiko.

Soy sensible al polvo, la suciedad- dijo Kai en lo bajo.

Ahhh- dijo Himiko con una sonrisa- entiendo, eres de esos sujetos, creo que se les llaman misofóbicos ¿No?

Si, hay más nombres para eso, pero si- dijo Chisaki de forma cautelosa y tratando de sonar amable.

Oh, realmente me preguntaba si tú y Tomura eran algo- dijo de repente Toga- y...¿SON NOVIOS?

¿Eh?, no, no lo somos- contestó inmediatamente Chisaki.

Ya veo- dijo Himiko con una sonrisa en sus labios- ¿Puedo llamarte Kai?

¿Eh? Si quieres- dijo Chisaki nervioso.

Ok, ¡Kai seamos amigos! ¿Si?- dijo Toga con la mirada ilusionada, y las manos juntas.

Es demasiado pronto, ¿No lo crees?- dijo Chisaki con la esperanza de no tener que dar una respuesta.

Está bien, quizás con el tiempo nos hagamos amigos ¿Verdad?- dijo Himiko con una aterradora sonrisa- llámame Himiko ¿Ok?

Si tú quieres- dijo Kai serenamente o tratando de verse sereno, por dentro estaba más que estresado.

Continuaron con el juego, hasta que llegó Tomura, abrió la puerta no más y pudo ver a Himiko y Kai sentados en unos cojines en el piso jugando algún juego de mesa.

Oh se estaban divirtiendo sin mí- dijo Tomura.

Nada de eso Tomura, me pareció que se aburriría, así que quise pasar el rato con él- dijo Himiko con una sonrisa- realmente espero poder ser su amiga un día.

Tomura miró a Himiko y le dijo “Ahora me gustaría estar a solas con Kai, ¿me dejas? Puedes volver más rato”

“Está bien”, fue la respuesta de Himiko Toga, se despidió de Kai con una sonrisa alegre y se fue cerrando la puerta tras ella.