Extra

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—El punto aquí es... ¿Tiene dinero?


Jimin miró fijamente a su prometido, tratando de perforarle el juicio con una mirada seria y asertiva; lamentablemente, el hombre se mantuvo sereno y sonriente, como si su amenaza silenciosa de "no follaremos hasta el viernes" no lo estuviera afectando en nada.


—Sé lo que estás pensando, Jiminnie—dijo repentinamente el ex militar, echando sus brazos hacia atrás para usarlos como almohada y relajando el resto del cuerpo sobre el sillón—. Y sí, sabes que no podrás resistir hasta el viernes.


"Maldito sabelotodo".


—Está bien, estoy de acuerdo—Jimin sólo le daba la razón porque acababa de salir de su celo y aún sentía los estragos, pero, que diablos, aunque no fuera así, él siempre caía ante los encantos de Yoongi—. Pero no has respondido a mi pregunta, ¿el susodicho tiene dinero?


Yoongi abrió la boca con la intención de responder, pero el repentino ruido de la puerta abriéndose hizo que ambos giraran la cabeza hacia atrás sólo para ver como Seokjin entraba por ella seguido de Namjoon.


— ¿Quién tiene dinero? —preguntó quitándose la gorra del uniforme y echándose en el enorme sillón rojo junto a Jimin, quien se apartó apenas un poco para que también se acomodara Namjoon a su lado. Los dos se veían realmente cansados, pero con el gesto de felicidad que mantenían siempre desde su boda unos años atrás. 

—Nadie importante—respondió el omega anfitrión y apretó la rodilla de su hermano a modo de saludo—. ¿Cómo les fue en el consejo?

—De maravilla, aceptaron nuestra propuesta para ampliar el presupuesto planteado para el grupo de Hoseok—Namjoon, quien continuaba trabajando al lado de Seokjin, el todavía general del ejército coreano, miró con orgullo el rostro de Jimin. Ambos, siendo omegas, habían trabajado arduamente para ser reconocidos como iguales frente a los soldados alfas.

—No, en serio, quiero saber de quién hablaban—los interrumpió Jin y se tronó el cuello para liberar tanto estrés acumulado. Ya que se fijaba bien, podía notar que sus amigos habían cambiado el librero por uno más grande y que, de hecho, había un auto nuevo aparcado en la entrada—. ¿En serio ser profesor deja tanto dinero?

—No, en lo absoluto—Yoongi sonrió ampliamente, recordando a sus revoltosos e impertinentes estudiantes y anotando mentalmente que en su siguiente clase les haría un examen sorpresa—. Jimin es el rico aquí.


Era verdad. Si bien él tenía una generosa cantidad en su cuenta bancaria, Jimin era quien más ganaba de los dos. Para nadie era un secreto lo bien pagados que eran los militares en su ejército, especialmente tratándose de él. Su omega había decidido regresar a su vida militar  y, después de un extenuante trabajo junto a Hoseok, se encargó de levantar la imagen de los omegas frente a la sociedad, reclutando a cualquiera que quisiera alistarse en sus filas y entrenando a cada uno de ellos.


—Me siguen cambiando el tema—Jin pasó su brazo por la espalda de Namjoon y recargó la cabeza sobre su hombro—. ¿Quién tiene que ser rico?

Muéstrame la pancita [Yoonmin- Omegaverse].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora