𝑺𝒕𝒆𝒗𝒆𝒏 𝑼𝒏𝒊𝒗𝒆𝒓𝒔𝒆 | 𝑶𝒏𝒆-𝒔𝒉𝒐𝒕𝒔

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𝔉𝔩𝔬𝔴𝔢𝔯𝔰

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Steven se encontraba regando sus flores, hace mucho que no lo hacía ya que estaba ocupado con Little HomeSchool.

—Todas se ven preciosas.—Dijo pasando la regadera por cada flor.—Tu también te ves hermosa, mamá.—Paso su dedo por el pétalo mientras sonreía.

El era consciente de que ponerle nombres de sus amigos a plantas no era para nada sano, pero últimamente todos se están alejando de él , desde que sus ojos no volvieron a la normalidad siente que todo el mundo lo ve raro y que nadie se quiere acercar a él.

—Ustedes son las únicas que me quieren ¿verdad? Lars, Connie, papá—Una risa retorcida salió de Steven quien pasó su mano por su cabeza. Una lágrima cayó en una de las flores haciendo que esta floreciera al instante.—¿Porque todos se fueron?

Con una mano sacó la pequeña lágrima, pero no fue suficiente, más y más salieron de sus ojos hasta que por fin se permitió llorar.

Se sobresaltó al sentir algo suave chocar contra sus manos, con temor miró de donde provenía  encontrándose con la melena de León, últimamente han pasado más tiempo juntos, hasta se podría decir que se entendían mutuamente.

—¿Que estoy haciendo mal?—Miro con clara tristeza a su mascota.—¿Acaso no les quedo claro que soy Steven Universe?—Su tono cambio a uno de enojo.—¡No soy Rose Quartz o la estúpida de Pink Diamond! ¡Soy Steven, mierda!—Enojado tumbo las macetas con las plantas destruyendo todo.—¡Esto es tu culpa!—Sus pupilas se volvieron brillantes al apuntar a la rosa que crecía lentamente.—¡Maldita!.—La aplastó, en Steven ya no había ningún rastro de tristeza, solo había enojo, mucho.—Maldita, maldita, maldita, todo esto es tu culpa.—Repetida mientras seguía pisando la flor.

Cuando había terminado con la flor pensó que su hambre de destruir todo había terminado, pero siguió. El lugar estaba lleno de tierra y un poco de sangre ya que los puños de Steven se cortaban al romper las macetas.—¡Te odio!—León quien había salido cuando su amo comenzó a tener un ataque de ira, volvió y se sentó en la puerta mirándolo a los ojos.

Otra vez la tristeza invadió a Steven y corrió a abrazar a su mascota.—Lo siento tanto...—Abrazo al animal con más fuerza, no quería soltarse de ese abrazo. El tubo la esperanza de que León pudiera hacerlo de la misma manera, pero eso era imposible.

《 ojalá alguien me abrazara así 》

En sus puños ya no se encontraba ningún rastro de sangre, sus heridas ya estaban completamente curadas.

—Últimamente no se que me pasa—Se confeso—Siento que pierdo el control de mis emociones, y esta apariencia me hace recordar a las diamantes...no es para nada divertido.—El de rizos se separo de León viéndolo a los ojos.—Supongo que tu tampoco te sientes comprendido, eres el único León  aquí.—Steven soltó una carcajada tratando de olvidar todo lo que acababa de pasar.

Paso las dos manos por su cabeza, masajeandose. León reposo su cabeza en el hombro de este y nuevamente lo miro a los ojos.

—Como que nos parecemos—Steven lanzo otra gran carcajada ante su propio comentario.—Oh~ esto es muy patético.—Una pequeña sonrisa salió del híbrido.

Con mucho cuidado de no hacer más ruido se adentró a su habitación junto con León, quien de inmediato se acostó a un lado de la cama. Steven se sacó su camiseta y desabrocho sus pantalones para acostarse en su cama.

—Buenas noches.—En respuesta, la mascota rosa gruño.

Tengo ganas de hacer una historia sobre este cap.