I love your heart [Gavin x Rk900]

[21] La hora de jugar

Pasión de Manuel Maria Flores
Últimos dos versos

Mas no soy para ti... ¡Si entre tus brazos
la suerte loca me arrojara un día,
al terrible contacto de tus labios
tal vez mi corazón... se rompería!

Nunca será... para mi negra vida
la inmensa dicha del amor no existe...
sólo nací para llevar en mi alma
todo lo que hay de tempestuoso y triste.

Y quisiera morir... ¡pero en tus brazos,
con la embriaguez de la pasión más loca,
y que mi ardiente vida se apagara
al soplo de los besos de tu boca!

Hermosas palabras las de este fragmento de esta poesía, díganme mis lectores ¿están listos para el final?, se acerca y es inminente.

1-¿Les gusta la historia?
2-¿La han visto interesante?
3-¿Ha perdido esencia o algo por el estilo?

Por fiis respondan las preguntas!!

12 de febrero del 2040
Playa del hotel
14:30 pm

Un joven de ojos grises, levemente bronceado por el fuerte sol del medio día, juega con una niña pequeña de nueve años, las sonrisas de ambos es tierna y duradera, la pequeña es enseñada por el moreno a dar brazadas cortas de pecho y de espalda, sus pequeñas y torpes pataletas le dan al moreno gracia, a lo lejos de aquella tierna escena dos hombres lo observan anonadados con la imagen de Gavin sonriendo, sus ojos brillando con ese resplandor de felicidad y esa sonrisa tan coqueta que expresa divertida.

Tu observado por unos ojos verdes aceitunados, es seguido por un chico de tes más morena que la de Gavin, de pelo rizado, esbelto cuerpo y voz suave, junto a el su prometido lo ve con curiosidad, esa mirada perdida en horizonte y los suspiros pesados de fastidio le llamaron la atención al de ojos azules, miró en dirección a su hermano, esa sonrisa de felicidad y esos ojos grises iluminados por el agua cristalina hacían ver una bella escena para sus ojos, había visto sufrir a su hermano, estar en el fondo del piso sin que nadie lo ayudará a subir, ni siquiera el mismo. Después de pasar unos 10 minutos mirando como el moreno de ojos grises jugaba con los pequeños hermanos que se habían unido a la cruzada de querer nadar dio una leve risilla y miró a su prometido.

-¿Que tanto lo miras?-preguntó en tono celoso-¿Acaso te llama tanto la atención ahora?.

-¿Que?- salió de sus pensamientos el mas bajo quedando confundido-No nada de eso, es solo que nunca vi a Gavin con esa sonrisa, siempre era oscuro y posesivo, a parte de los problemas que tenía con las drogas y el alcohol.

-Si lo se, en su época fue un grave problema para todos nosotros-hablo un poco más relajado-El la verdad siempre fue extraño, pero no todo el tiempo era sombrío, oscuro y un imbécil-señalo su regazo para que el más bajo se acostara en su pecho, el cual acepto gustoso-antes cuando era pequeño parecía un pimpollo con las mejillas rosadas, sus ojos grises eran grandes y de paso era más oscuro de piel que Elijah y Yo. Mi padre pensaba que mi madre lo había engañado por sus rasgos físicos ya sabes que mi padre tiene los ojos azules y mi madre color avellana, siempre lo trato mal de pequeño, hasta que un día vimos una foto de un abuelo de mi madre y Gavin era la copia, la cagada de ese ser en esa foto, fue impresionante lo parecido que era-sonrió un poco para si mismo.-Pero aún así mi padre no cambió

-No sabía eso, Gavin nunca se abrió conmigo para contarme las cosas y eso que era mi mejor amigo, en aquel entonces-agregó mirando al moreno de ojos grises jugar con los niños en la arena, revolcándose en la arena quedando como pollo empanisado, seguido de los niños que hacían lo mismo, corrían al agua se quitaban la arena y hacían lo mismo varias veces-el siempre estaba metido en lo suyo, después de lo que pasó con mi hermana en aquella fiesta, decidí terminar con Gavin, la verdad es que no era para mí.