I love your heart [Gavin x Rk900]

[33] Especial Connor: Pesadilla

15 de abril del 2040
Casa de Hank
12:38 am
Hank

Esa noche era tranquila, todos dormían plácidamente en sus camas excepto un hombre grueso que se revolvía en su cama, trato de abrazar a su pareja pero no estaba en la cama, incómodo y solitario se revolvió sobre sí mismo, levantó la cabeza de golpe al escuchar un sonido extraño a las afueras de su habitación.

Hank se levantó de su cama tropezando un poco con el desorden del piso, se rasco los ojos para retirar las lagañas y luego se acerco a la puerta abriéndola, todo estaba oscuro.

Camino por el pasillo y se asomo en el cuarto de la niña, no había nadie, todo estaba revuelto, no había juguetes, no estaba su cama, estaba decorado de otra forma, paredes azules con aviones, una cama sin tender y un baúl al final.

La habitación de su Cole estaba decorada así antes de que falleciera el día del accidente, todo estaba como si nada hubiera pasado, se tomó de la barbilla y con su intensa mirada azul observo todo a su alrededor.

Se dio cuenta de que algo andaba mal, encendió la luz y observo a la niña sentada en el sofá,se acerco con cuidado para verla, pero era solo un maniquí.

Las luces volvieron ha apagarse, se escucho un fuerte ruido, como si algo se cayera, se dio la vuelta, por el pasillo iluminaba una intensa luz roja, Hank empezó a ver como la realidad alrededor de el se distorsionaba, crédulo de todo aquello chasqueo la lengua fastidiado y prendió la luz de nuevo.

Sumo estaba sentado al frente de él, el perro miraba a su dueño de forma perdida, atontada y extraña, se pasó la lengua por la nariz para empezar a gruñir de forma descontrolada, se acerco a Hank que intentó darle una orden pero no podía hablar, asustado se tomó de la garganta observando como el gran San Bernardo le caía encima con su gran cuerpo, de repente cuando iba a ser mordido las luces se apagaron.

Hank estaba asustado, podía ver el reflejo de sus manos, se tomó de la garganta he intento gesticular alguna palabra pero nada salía de esta, trato de buscar al para defenderse, pero todo estaba vacío, la casa parecía de juguete, corrió a la TV y la intentó prender, esta tenía interferencias.

La luz se volvió a encender, la TV se apago, detrás se encontraba la figura de una persona que no era clara, tenía un Led en rojo sangre, brillaba con intensidad al igual que su mirada, Hank para encarar aquella persona decidió girarse, pero las luces se apagaron, escucho pasos detrás de él, luego un empujón que lo hizo caer, una lámpara se encendió en el piso, estaba lleno de sangre, miró al frente y estaba la cabeza de sumo, su cuerpo no estaba.

Hank confundido empezó a correr, no sabía que ocurría en su casa, todo era muy extraño, no podía pedir ayuda, todo estaba oscuro, desesperado corrió sin rumbo en aquella oscuridad, al estar cansado se detuvo y cayó de rodillas, miró sus manos, estaban limpias, no tenían la sangre de su San Bernardo.

El teniente se levantó del piso, estaba en un lugar que no era su casa, era un jardín hermoso, grande y único, en el medio nacía la cabeza será de una cascada que llegaba hasta una fosa sin fondo, el lugar iluminado por la luna era mágico.

Los pasos se escucharon otra vez, el mayor de ojos azules se volteo para encarar a quien lo perseguía, sus ojos se abrieron observando aquella pequeña silueta, alma tenía en sus manos un cuchillo, su mirada estaba fija en un solo punto, sus ojos perdidos en la nada se dirigieron al teniente, esta empezó a expulsar espuma por la boca, hizo unos sonido guturales entre gemidos y jadeos, se estaba ahogando así misma, alzó el cuchillo en dirección al teniente, empezó a correr y antes de llegar hasta el desapareció.

Hank observo todo el lugar, no encontraba sentido a lo que estaba pasando, su linda Alma se veía espeluznante, le daba miedo volver tan solo a recordar el horroroso sonido que hizo, era como si estuviera en una pesadilla de la que no podía despertar.