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Yuqi buscaba a Miyeon por todo el jardín pero tropezó con una rama y tuvo que detener su búsqueda.
- Eso... dolió -el pequeño querubín se levantó y limpió la parte baja de su vestido blanco.
Caminó un poco mientras se quejaba de un dolor en su muñeca derecha, al parecer su mano no soportó su peso en la caída, mas se quedó callada al ver como Minnie salía corriendo de la nada mientras reía como una niñita.
- ¿Minnie? -Yuqi al decir esto asustó a la contraria, quien se acercó a ella aún con una gran sonrisa en el rostro.
- ¡Oh, Yuqi, estoy tan feliz! -se abalanzó hacia la susodicha abrazándola por el cuello.
- ¿Por qué rayos hablas así? -deshizo el agarre de su mayor y a la vez se quejaba de su euforia.
- No te puedo decir aún, pero pronto te enterarás, no sé va a poder ocultar mi nuevo rango.
Yuqi abrió los ojos de una manera exagerada- ¿Acaso se convertiría en  Serafín como Shuhua?
- Yuqi, estoy tan feliz- dijo Minnie saltando al rededor de Yuqi
- ¿A qué se debe tanta felicidad, mis querubines? -Miyeon preguntó, cortando la atmósfera de felicidad de Minnie para convertirla en cierta tensión que no pudo notar.
Minnie solo negó cabizbaja y se fue lo más rápido que podía.
- Esa unnie cada vez está más rayada -dijo Yuqi volteando hacia Miyeon, quién se había inclinado hacia ella, dejando sus narices casi juntas.
- ¿Me buscabas, Yuqi? -Miyeon miraba los ojos de la rizada mientras sonreía al hacer esa pregunta y Yuqi solo pudo desviar la mirada con un ligero rubor- ¿Tienes frío? ¿Quieres entrar? -inquirió y Yuqi solo asintió.
Ambas empezaron a caminar pero Yuqi se quedaba atrás a propósito y así evitar que Miyeon notará su sonrojo, pero esto no sirvió ya que Cho tomó su mano.
- Te estás retrasando demasiado -Miyeon intentó avanzar con sus manos entrelazadas pero un quejido de parte de Yuqi la detuvo- ¿Estás bien?
- Me caí y creo que me lastime la mano -retiró su mano y empezó a sobarla.
- ¿Crees? -Miyeon se cruzó de brazos y alzó una ceja.
La castaña tomo la pequeña mano de Yuqi y la examinó, cerró sus ojos y depósito un corto y casto  beso en el dorso de su mano, y así alivió  el dolor gradualmente.
- ¿Era necesario el beso? -Yuqi evitó mirarla al preguntarle esto.
- No, no lo era -Miyeon se levantó y continuó su caminata hasta el interior del palacio, dejando una Yuqi perpleja ante esa respuesta.
☁️
Estaba muriendo del aburrimiento, Miyeon no las había dejado salir desde que llegaron y Yuqi empezaba a hartarse de ese aislamiento, Minnie se desaparecía todas las mañanas y reaparecía en las tardes y Shuhua... Ahora que recordaba, no había visto a Shuhua desde la mañana, así que decidió ir a buscarla.
Recorrió todos los pasillos posibles hasta que un olor dulce la guío a la cocina como si estuviera en una caricatura donde un olor la guiaba volando.
Llegó a la cocina y se recostó en el marco de la entrada y se dió cuenta que era el pequeño Serafín la responsable de ese exquisito olor.
- ¿Qué estás haciendo, Shuhua? -la voz de Yuqi salió más grave de lo que le hubiera gustado, asustando así a su menor.
- ¡Unnie! ¿Tenías que asustarme? -Shuhua volteó hacia ella dejando en evidencia su rostro cubierto con chocolate y harina.
La rizada no pudo aguantar la risa ante la desastrosa apariencia de Shuhua, aunque debía admitir que se veía un poco tierna.
- Siga riéndose de mí y verá como no le doy ninguno de mis postres -amenazó con un cucharón.
- Está bien -Yuqi no pudo evitar una última carcajada y se acercó a ver los pequeños quequitos rojos cubiertos de chocolate que la pálida había hecho- Shuhua, se ven hermosos -los ojos de Yuqi brillaron al verlos detenidamente y su estómago sonó al ver como el chocolate cubría la superficie de los pastelitos.
- Claro que están hermosos, los hice yo -alardeó Shuhua mientras se limpiaba las manos con un trapo- Si quieres puedes darle uno a Miyeon.
- ¿Por-por que debería darle yo un pastelito al altísimo? -tartamudeó mientras ocultaba su rostro con su cabello de una manera discreta.
- ¿Por qué te pones tan nerviosa, unnie? Sólo te dije que si querías podías llevarle uno, además, ¿Qué podría salir mal?
Es cierto ¿que podía salir mal? era solo compartir un pastelito con Miyeon, siempre compartían la mesa, ya que era una especie de tradición el comer todas juntas. Iría a buscar a Miyeon y le entregaría la magdalena con chocolate.
☁️
Yuqi caminaba con una precaución extrema para que no se cayera el dulce de sus manos y se detuvo al reconocer la silueta de Miyeon en el balcón, vestía una especie de kimono blanco con destellos azules en la parte de abajo, tenía el cabello pulcramente liso y caía por toda su espalda.
Tomó aire y se acercó  a ella, escondiendo el cupcake pdetrás suyo.
- Yuqi, ¿Qué haces aquí, pequeña? -Miyeon se dirigió hacia su contraria intentando ver que traía detrás.
- Nada en especial, solo vine a ver las estrellas -Yuqi se acercó a ella y miró como un cometa pasaba en ese preciso instante.
- Está bien, supongo que es relajante verlas de vez en cuando -Miyeon al decir esto sintió una especie de decepción pero no supo a qué se debía.
- Yo te traje esto -Yuqi le mostró el pequeño postre rojizo con chocolate y Miyeon solo pudo sonreír con cierto rubor en los cachetes.
- Gracia, Yuqi, es demasiado lindo -Miyeon tomó el quequito en sus manos con mucho cuidado, no quería arruinar nada, especialmente porque uno de sus ángeles favoritos lo había traído exclusivamente para ella .
Miyeon le dio una mordida al cupcake y la verdad, no estaba tan delicioso como aparentaba, la parte del centro de la masa aún no estaba cocida y la parte inferior estaba muy tostada para su gusto.
- ¿Te gustó? Shuhua preparó algunos y te traje uno lo más rápido posible para que no se enfriara -los ojos de Yuqi brillaron al decir todo esto y la miraba expectante por algún comentario- Deberías probar el chocolate, sólo comiste el queque.
Miyeon le hizo caso y al probar el chocolate sintió una explosión de sabores exquisitos dentro de su boca, la masa pudo haber tenido ciertos problemas en la cocción pero el chocolate estaba delicioso.
- Esto está demasiado rico, prueba -la castaña le extendió el cupcake a la altura de su boca y Yuqi con cierta vergüenza probó un pedazo del fudge.
Yuqi abrió los ojos sorprendida ante el sabor y decidió probar un poco más, manchando así la comisura de sus labios.
- Tienes... Mmm... Tienes un poco de chocolate aquí -Miyeon señaló su propia comisura pero Yuqi no logró limpiarse totalmente por la vergüenza- Déjame, yo lo hago -la castaña se acercó demasiado al rostro de la contraria y posó su pulgar en el cachete de Yuqi, mas no se movió, se quedó en una especie de pausa y se preguntó  ¿por qué se acercó tanto? ¿y por qué le intrigaba probar específicamente el chocolate que estaba cerca a los labios de la contraria?
Ante este pensamiento Miyeon retiró su pulgar y se alejó considerablemente.
- ¿Pasa algo? -preguntó un poco asusta Yuqi
- Debería ir a ver si la cocina está a salvo de Shuhua -y sin más se retiró, dejando a Yuqi un poco confundida y triste. Siempre era así, se acercaba demasiado y luego huía.
☁️
Shuhua estaba limpiando todo el desastre que había hecho en la cocina y se dió cuenta que Yuqi se había llevado uno de los postres que tenía que botar junto a los demás cupcakes fallidos.

HONEY ~Oh My God~ (G) I-DLEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora