Residuos de Amor

Capítulo 13

Ambar:

Cuanto más lo pensaba, todo se volvía más problemático.

No solo estaba casada, el hombre con el que mantenía ese compromiso vigente era un moustro.

Y si se enteraba de esto de algún modo podría causar daño.

No solo a mí.

Sino también a Logan.

¿Era justo que lo hiciera pasar por so?

No lo era.

Y es por eso que el siguiente día no trate de cruzarme con él mientras hallaba maneras de salir de esto.

—Estas ignorándolo. —Me dice Cathy.

—¿Qué?

—No solo lo he notado yo, creo que hasta todos.

Dios mío.

—Y obviamente él.

Aprieto los labios.

—¿Discutieron?

—No.

—¿Y por qué estas ignorando a Davis?

Davis se acerca a nosotros y nos avisa que ya vamos a empezar, cada uno se ubica en su sitio correspondiente, las cortinas se abren y resulta ser un día tan grandioso como todos.

Pero nada grandioso para nosotros dos.

(*)

—¡Bébelo! ¡Bébelo!¡Bébelo!. —Gritan los chicos después de haberle ganado una apuesta a otro de ellos.

Estamos sobre la terraza del hotel, nos permitieron estar al menos 40 minutos y celebrar lo bien que nos iba.

Aun nos quedaba unos tres días más de conciertos y ya que todo iba bien, Logan les permitió celebrar, aunque no emborracharse más de la cuenta para mañana.

Todos necesitábamos estar sobrios y por eso mismo solo ordeno unas tres botellas para brindar.

Aparte la mirada de los chicos y observe a Logan, estaba de pie observando la vista de la ciudad y cuando aparte la mirada me di cuenta que Cathy estaba observándome.

Me hizo una señal con la cabeza hacia él y me sonroje, ella insistió y termine por ponerme de pie.

Cathy me ayudo y facilito el hecho de que más de uno ya empezaba a verse borracho, los ayudaron a bajar y yo me acerque a Logan.

Finalmente estábamos solos.

—Tiene una bonita vista ¿No?.. —Me pregunta. —Creo que lo extrañare cuando regresemos el domingo.

—Yo también.

Él se vuelve hacia mí. —¿Por qué estas ignorándome?

De frente al grano.

—Después de lo de anoche o anoche.. ¿Paso algo que hiciera y te disgustara?

Nada que ver.

—No.

—¿Y puedo saber porque..? —Me pregunta confundido. —No lo entiendo.

—Estoy casada, Logan.

Sus ojos se abren y regresan a la normalidad.

—Creí que estabas separada de él.

—Sí, ahora mismo lo estoy..

—¿Entonces qué?. —Me pregunta confundido y veo un rastro de temor en sus ojos. —¿Vas a volver con él?

—¿Qué? No.

Niego rápidamente.

Suspiro.

—El hombre con el que estoy casada no es normal.

El me escucha atento.

—Es un maltratador. —Sigo. —Alguien que esta dispuesto a llegar donde sea por los celos y créeme que lo se bien, se hasta donde puede llegar Kellan.

—¿Ese so entonces?. —Me pregunta con los ojos abiertos. —¿Estas preocupada por mi?

Lo estoy.

Logan sonríe. —Ambar, soy una persona adulta... tu esposo no va a intimidarme.

—Logan..

—Y si quiere buscarme, que lo haga. —Me asegura. —Así me cobrare todo lo que te ha hecho pasar.

—Ya no.. —Hablo despacio. —Ya no más violencia.

Él se me queda viendo, se me acerca.

—Lo que intento decir es que no temas. —Pronuncia. —No temas por mi, se me cuidar solo.

—Logan..

—Y por eso no necesitas alejarte de mí.. si piensas que por eso debes hacerlo, no lo hagas.

No respondo.

—¿Por qué es por so no?. —Me pregunta y niega. —Por favor dime que no soy el único que está sintiendo lo que tenemos.

Miro sus ojos.

—Ambar..

—No.

Sus cejas se alzan.

—Siento lo mismo.

Mis manos se forman puños.

—Me gustas, Logan.

La sorpresa dura poco en su rostro y el sonríe.

—¿Qué sucede?

—Pensé que yo iba a terminar diciéndotelo y tú..

Se acerca a mí, me coge de las mejillas y presiona los labios sobre los míos.

Le devuelvo el beso, corto pero se lo devuelvo.

Nos miramos y él me acaricia la mejilla mientras yo lo miro.

—También me gustas, Ambar. —Me confiesa sacándome una sonrisa nueva. —Me gustabas antes y me gustas ahora, siempre me has gustado y estoy seguro que nunca dejaras de gustarme.

—Son mucho me gustas en una oración.

Él se ríe.

Presiono los labios sobre su boca y murmuro. —Pero.. Tú también me gustas.