Capítulo 14

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Ambar:

No quiero arrepentirme cuando tenemos la oportunidad, cuando no está Kellan para arruinarme esto en este instante.

Así que solo me dejo llevar igual que él,

Me llego un mensaje de Cathy mandándome ánimos y que me sonrojo después de asegurarme que había reservado la habitación para nosotros y que no regresaría hasta el día siguiente.

Pero incluso pasar después de ese vergonzoso momento, terminamos yendo para allá.

—¿Estas segura?.—Pregunta deteniéndose sobre mis labios.

—Lo estoy. —Le aseguro.

—Quiero hacerlo, pero debo preguntar.

Alzo una ceja.

—¿No es esta una despedida, no?

¿Ah?

—¿No voy a despertar mañana y no te encontrare?

Sonrio.

—No.. no es esa clase de novela.

—¿Y qué clase de novela es?

Aprieto los labios el insiste.

—Una donde si estoy cuando despiertes.

Sus ojos se abren y mi corazón se acelera, nos volvemos a besar y esta vez no hay nada que detenga a Logan.

Nos detenemos frente a la cama y mis manos comienzan a tocar tu cuerpo, entre besos le decimos adiós a su camiseta, luego a la mía y así sucesivamente hasta quedar completamente entre piel y piel.

Logan me coge de la cintura, me rodea con los brazos y me hace retroceder hasta que caemos sobre la cama.

Besa mi cuello y se aparta para mirarme, dibujo una línea con sus dedos en su rostro y aprieto los labios.

—No sabes hace cuanto he deseado esto.

—¿Desde la preparatoria?

Vaya manera de arruinar un momento.

El ríe.

Yo también lo hago.

Me vuelve a besar, sus labios moviéndose sobre los míos a un ritmo mientras sus manos comienzan a tocarme sin dejar espacio, tan expertas que jamás imagine que fueran así.

Dibuja cada línea y aprieta cada bulto, me acaricia los pechos y hunde el rostro en ellos, baja y me besa el ombligo, llega hasta mis piernas y me las separa.

No imagine que Logan fuera así en el sexo, pero me encanta y me encanta más cuando hunde la cabeza entre mis piernas, las separo para darle más acceso y hundo los dedos en su cabellera, su lengua arremete y el primer contacto arquea mi espalda, cierro los ojos y me muerdo el labio, su lengua golpea mi centro, prueba de mí y siento que el placer que sentía al inicio crece.

Estoy mojada y es por él.

Logan me coge el muslo y lo levanta, hunde más su lengua y echo la cabeza hacia atrás, arrugo las sabanas y me deja con las piernas abiertas al acabar, se sube encima de mí y comienza a besar mi cuello mientras sus manos ocupan mis pechos, llevo los dedos a su espalda y recorro su fornido cuerpo, me levanta la pierna y siento su erección rosarme.

Mirandome a los ojos ingresa en mi interior, con un movimientos suave al inicio, solo al inicio.

Y cuando empieza a empujar ya no hay control.

Sus caderas arremeten contra las mías, se apoya con las rodillas sobre el colchón y me levanta las piernas, su polla entrando y saliendo sin detenerse, me excita y provoca que todo el placer viaje por mi cuerpo, gimo encantada por el tan perfecto sexo y cierro los ojos, mi cuerpo no deja de moverse de arriba hacia abajo, cada golpee me hace vibrar y me causa un ligero dolor, uno que puedo tolerar.

Mis sensaciones se concentran más en lo duro que es, en lo caliente que se siente mi cuerpo más que el dolor.

Gimo disfrutándolo, lo miro a los ojos, tiene un rostro excitado seguramente como se ve el mío, sus ojos llenos de deseo, sus gestos atractivos, calientes y maravillosos.

Logan es muy guapo y se ve mejor cuando coge.

Cambia de postura y me cubre con su cuerpo, lo abrazo y con una posición, con esos mismos movimientos desesperados y gimiendo sin parar, recibimos el orgasmo.

Cae agitado sobre mi cuerpo y mis brazos siguen rodeando su espalda.

Él se separa y me da un último beso antes de caer a mi lado.

Tengo una sonrisa igual que el al terminar, nos miramos.

—Estuvo..

—Increíble.—Termina por mí.

Y sí que lo estuvo. 

Residuos de AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora