Residuos de Amor

Capítulo 27

Ambar:

—Dios mío, Ambar...

Logan siempre es lo primer que veo después de despertar de algo así, ya se volvió costumbre y esta no es la excepción.

Me mira preocupado y tiene mi mano sujeta entre las suyas, por lo que puedo notar en las paredes, nos encontramos en un hospital.

—¿Qué sucedió?

—Te desmayaste.

¿Me desmaye?

Lo único en lo que puedo pensar es en el concierto.

—¿Qué sucedió con el concierto?

El no responde.

—Logan.. ¿El concierto?

—No te preocupes por eso, deje a cargo a alguien más y vine contigo.

Me siento mal que tuviera que dejar algo tan importante por mi culpa.

—Lamento obligarte a hacer eso.

—¿Obligarme Ambar? Eres mi novia y la mujer que quiero.—Pronuncia emocionando mi corazón.—Y por mucho tu salud es más importante para mí.

—Está bien, lo siento.

Sus ojos me miran.

—¿Qué te dijo el médico?

—Él quiere hablar con los dos.

(*)

Esperaba oír lo peor, estaba preparada, incluso me lo pensé, que la causa de mi desmayo y mis vómitos era debido a que Kellan ocasiono un problema con uno de los golpes que me dio, pero no fue nada de eso, ni de cerca.

—Embarazada..—Pronuncio y mi corazón se encuentra muy acelerado.—¿Usted ha dicho embarazada?

—Sí, debes tener cuatro semanas.

Dios mío.

Me vuelvo hacia Logan, está mirando al médico y su mano no ha soltado la mía.

El médico le da indicaciones a Logan y ya no escucho, mis oídos se tapan y siento un revoltijo en el estómago.

—¿Ambar?

Me pongo de pie.—¿El baño..?

El me indica donde y corro hacia él, la impresión le ha dado justo en el estómago y con una mano sobre él ,me inclino a vomitar sobre el lavado.

Embarazada, dios.

Estoy embarazada.

De Logan.. ¿Y Logan..?

¿Cómo está el?

¿Me odiara, lo tomara bien?

Termino de vomitar y permanezco al lado del inodoro, me limpio los labios con el papel dentro del baño y hago pasar la palanca, mis ojos se cierran y me llevo las manos a la cabeza.

Estoy embarazada de Logan.

Por dios..

Golpean la puerta.

—¿Todo bien, Ambar?

¡Es Logan!

Cierro los ojos.

—Mi amor..

El corazón se me acelera, tomo un par de respiraciones antes de ponerme de pie y salir, cuando lo hago no puedo mirarlo a los ojos.

Siento su respiración y él me toma del mentón obligándome a mirarlo.

—Hey...

Me muerdo el labio.

—¿Vomitaste otra vez?

—Parece que no fue el pollo al final.

—Bueno, viendo de otra forma.

Pollo, Polla.

Me sonrojo.—¡Logan!

Él se ríe.

Lo hizo solo para hacerme sentir tranquila.

Logan me coge las mejillas.

Con miedo, pregunto.—¿Qué vamos a hacer ahora?

—Pues dentro de menos de nueve meses y cálculo que son 8 tendremos una pequeña versión de nosotros corriendo por el departamento.

Aprieto los labios.—Tendría que tener un año.

—¿Qué?

—Los bebes no caminan antes del año

—¿Quién lo dice? Yo camine a los 11 meses.

Aprieto los labios.

—¿Tú quieres a este bebe?

—Por su puesto.

Logan...

—¿Eso te preocupaba? Me siento ofendido.

—Lo lamento.—Me disculpo.—Creo que es parte de cada mujer, decirle a su pareja que tendrán un bebe y no saber cómo reaccionar.

Sus ojos me observan.

—Tendremos un bebe...

El sonríe.

—Sí, seremos papás.

—¿Y estas feliz?

—Muy feliz.—Pronuncia, la felicidad desbordándose de sus ojos.—Porque es contigo.

—Logan.

—Con Ambar Morrow, la mujer que amo.

Dios mío.