Capítulo 10

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-No entiendo a qué te refieres- respondí cruzándome de brazos.

-Increíble- murmuró haciendo que mi ceño se frunciera.

-Justin Bieber es nuestro vecino, vive a tres casas de la nuestra- respondió Dulce y yo abrí mi boca demostrando mi sorpresa.

¿Justin siempre fue vecino de mi padre y yo nunca me di cuenta?

-¿Y tú cómo sabes que salí con él?- pregunté hacia Nathan.

-Lo escuché mientras hablaba con sus amigos- respondió con su semblante serio.

-No entiendo porqué te molesta- dije y negué con la cabeza.

Llegué hace menos de diez minutos a la casa de mi padre y lo primero que tengo es a un Nathan molesto porque salí con su vecino.

Increíble.

-Es que no lo entiendes y no creo que lo entiendas- bufó saliendo de casa dejándome con la palabra en la boca.

-¿Dulce?- la miré con suplica y ella suspiró.

-Él y Justin no se hablan, y al parecer a Nathan no le cae bien, pero nunca me ha contado el porqué- se encogió de hombros.

-¿Entonces por eso le molestó que saliera por una vez con Justin?- bufé- Tiene que ser una broma-

-¿Todo bien?- bajó mi padre junto con Nelly- ¿Y Nathan?-

-Salió- respondió Dulce de forma simple, sin explicar nada más.

-¿Otro ataque de enojo?- preguntó mi padre y ella asintió.

-¿Se ha comportado así más veces?- pregunté hacia ellos. Nelly se mantenía callada, prestando atención a la conversación que teníamos.

-Esta semana estuvo comportándose así, primero sacó una mala nota, por lo que Nancy- la esposa de mi padre- lo regañó. Después el miércoles se enteró de algo y ha estado así-

-¿Se enojó contigo?- preguntó Nelly y yo asentí- Deberías hablar con él cuando regrese-

Tal vez esa era una buena opción. Esperaré a que regrese.

Al otro día...

Y me quedé esperando. Nathan llegó hasta las doce de la noche, y obviamente se metió corriendo a su cuarto y se encerró ahí.

Esta mañana llegó Nancy y Brenda, la primera se emocionó de vernos a mí y mi hermana, en cambio Brenda no nos dirigió la palabra. Nathan solo recibió a su madre y a su hermana, para después salirse. Por lo que Dulce me dijo, estaría en las canchas de fútbol/básquetbol que están a una cuadra de su casa, así que iría hacia ahí, dejando a Nelly ir de compras con Dulce para que no se quede sola con Brenda.

Una vez llegando al parque, busqué a Nathan con la mirada hasta que lo encontré, estaba sentado con sus audífonos puestos, mirando jugar a un grupo de chicos jugar basquetbol.

Vaya, ese grupo de chicos eran Justin y sus amigos Power Rangers.

Sin querer distraerme de mi objetivo, caminé con seguridad hacia Nathan poniéndome frente a él.

-¿Qué quieres?- su semblante seguía serio y podía notar unas pequeñas lágrimas en sus mejillas.

-Hablar contigo- respondí y él suspiró.

-¿De qué?- tuve que ahórrame las ganas de rodar mis ojos.

-Tú bien sabes de qué, Nathan.- nuevamente suspiró- ¿Qué pasa?-

-Siéntate.- se hizo a un lado en la banca que estaba sentado mientras se quitaba sus audífonos, para que yo pudiera ponerme a su lado- Ha sido una semana bastante difícil, primero reprobé una de las materias más importantes y mi madre en vez de apoyarme, solo me regañó- negó con la cabeza y miró al suelo.

-¿Por qué reprobaste?- pregunté con curiosidad.

-Solo por no responder una pregunta en clase.- bufó- Él profesor tiene algo contra mí, así que me hizo esa estúpida pregunta diciéndome que si no la contestaba bien me reprobaría, y así fue-

-Tu profesor es un idiota y puede que esté jugando contigo, ¿ya subió la calificación?-

-No- volteó a verme con el ceño fruncido.

-Probablemente solo le gusta hacerte sentir mal, y como su cometido causó esa reacción en ti y todo lo demás que hace, por eso lo sigue haciendo. No creo que sea tu calificación definitiva. Confía en mí- sonreí y él rió.

-Está bien- sonrió un poco- y supongo que quieres saber porque me molesta que salieras con Justin, ¿no?-

-Me leíste la mente- reí un poco.

-Justin nunca me ha caído bien- se encogió de hombros- vive con su madre a tres casas de la de nosotros, pero tiende a irse algunos días con su padre y sus hermanos pequeños, justo como lo haces tú con tu padre y yo con el mío.- miró hacia enfrente, viendo como Justin y sus amigos reían mientras se pasaban el balón el uno a otro.

Justin me había contado algo de ello en nuestra cita, lo que a ambos nos sorprendió por el hecho de que nuestras vidas eran similares en ese aspecto.

-¿Entonces...?- dije para que prosiguiera.

-Siempre ha sido un chico bastante... cool, es bastante aplicado, un poco más que yo. Solo he hablado con él una vez y he de decir que es bastante agradable, pero algo en mi hace que me caiga mal-

-¿Tú qué crees que puede ser?- pregunté mirando al frente, encontrándome con los ojos curiosos de Justin mirando hacia dónde estábamos Nathan y yo.

-Supongo que puede ser algo de envidia- se encogió de hombros- no me he dado el gusto de conocerlo mejor, y tal vez debería- ahora no sólo Justin miraba hacia nosotros, sino que también sus amigos Power Ranger.

-Entiendo eso, tal vez deberías de conocerlo, hablar un día con él, pero sigo sin entender el porqué de tu enojo conmigo al enterarte que salí con él- volteé a verlo y este rió, pero era de forma sarcástica.

-¿En serio no te das una idea, Margaret?- preguntó mirando hacia el cielo.

¿Idea de qué?

Nathan se me ha hecho un chico bastante misterioso, desde el tiempo que llevo conociéndolo, aunque he de decir que es bastante amigable y le he agarrado cariño con el paso del tiempo, al igual que Dulce.

-¿Recuerdas de lo que hablábamos en el partido de fútbol americano hace una semana?- preguntó y yo fruncí el ceño.

-Recuerdo que hablábamos algo referente nuestra vida amorosa o algo así...- entrecerré mis ojos- ¿Por qué?-

I Don't Care-Justin Bieber Donde viven las historias. Descúbrelo ahora