Mis chicos terrestres (BTS × BTS+tú)

Hiatus

Hubo un hiatus entre los dos.
"Lo que acabas de hacer con tus labios ha sido lo más venenoso que he probado en mi vida"

Había balbuceado el moreno, con su cuerpo de nuevo extendido a lo largo de la cama ajena.

Los nervios jugaban una mala pasada al mayor, a quien esas palabras le iban demasiado grandes. No lo pudo mirar a la cara, después de la espontánea respuesta tan sólo pudo pedirle descanso. No para Namjoon, sino que para él mismo, quien aún no asimilaba que su compañero de trabajo hubiera estado a punto de morir por razones misteriosas.

Le intrigaba. No hizo preguntas y no obstante el moreno se hubiera pasado todo lo que quedaba de noche intentando ofrecerle conversación. Jin se rehusó a sacar el tema con mucha rapidez, se metió en el baño y allí se encerraron su portátil y él buscando respuestas. A solas. Por suerte, debido a aún tener fiebre el parlanchín calenturiento de Namjoon, aleas "el jefe" se quedó dormido durante la incansable investigación de Jin.

Kim Seokjin:

Él había intentado darme explicaciones, pero después de haber pasado una hora en el baño metido, en el papel de un detective profesional, todos los caminos daban indicio a que sus palabras carecían de consistencia. En resumen: puras mentiras bien pensadas.

Intolerancia al azúcar, me había dicho,¿ Habría sido más fácil decir que era diabético? No.. eso era algo distinto.

"Intolerancia al azúcar"

"Los síntomas de las intolerancias del azúcar incluyen: fatiga, calambres abdominales, hinchazón dolorosa, gases, náuseas, vómitos o diarrea"

"Alergia al azúcar"

"Puede causar una reacción bastante seria conocida como anafilaxia (la presión arterial baja repentinamente y las vias respiratorias se estrechan, se impide la respiración)"

No, lo que él había sufrido no había sido nada parecido. Debía haber algo que se me escapaba.

Y sin apenas ser conciente de ello ya me había metido en otros temas más fantasiosos.

"Romper cristales con la mente"

Pero nada, no salían más que trucos de magia, escenas de videojuegos, un artículo de la fobia a los cristales que no venía a cuenta y varios videos de imbéciles quienes querían demostrar un talento imposible. ¿Imposible? Kim Namjoon, el actor de doramas puede.

Me llevé las manos a la cabeza, fregué mis ojos y alcé la mirada a algún lugar sin importancia, llegando a la conclusión de que era demasiado tarde para andarme comiendo la cabeza. Salí del baño, mi trasero se había empezado a quejar por el exceso de tiempo estando sentado en el suelo. Era normal, el tiempo se había pasado demasiado rápido.

Namjoon estaba dormido, en otras palabras desafiando al ruido de los taladros con sus ronquidos. Me hizo pensar que quizá eso de su intolerancia no había sido lo que por poco lo había matado, sino que tenía otros problemas mayores.

Me acerqué, posé la mano sobre su frente y comprobé que continuaba ardiendo, por lo que fui a por medicina e intenté despertarlo.

—Namjoon, despierta estás ardiendo

Fue lento, abrió poco a poco los ojos y se sentó mirándome de nuevo, sonriendo tierno y contento por a saber qué. Le traje la medicina, la tomó y se levantó indicándome que la cama era mía. No pude decir que sí a eso, era una propuesta increíblemente atractiva, pero yo podía dormir en el sofá, tan solo por un día.

Fu así cómo acabé medio durmiendo sobre el sofá. Cabía felicitar al enfermo, era la primera persona que lograba hacer que eso ocurriera.

Y, de hecho incluso acabé por acomodarme para estar caliente entre las miles de mantas que me había echado encima y la chimenea encendida frente a mí. Pero aquel estado de gloria no pudo ser mantenido.