Taeyang

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Ocurrió nada más salir del subterraneo, para acabar aquello con una despedida. Todas las cabezas subieron lentamente hacia arriba y contemplaron el terrible destino que les esperaba; unos fascinados por el espectáculo de luces surcando el cielo como la luz de un cometa, que brillaba cegadoramente cada vez que se precipitaba más y más. Otros horrorizados, sabiendo que el final se acercaba, que aquello era señal de los pasos de la muerte sobre la hierba húmeda.

Un destello corría sobre el cielo nocturno hasta desaparecer entre los árboles más altos del pequeño bosque. Nadie podía saber dónde habría acabado cayendo, de qué gran árbol habrían salido todos esos pájaros volando, asustados por el agetreo.

Tras la luna ser tapada por nuves oscuras todas las miradas se oscurecieron a su vez, la noche se apoderó de sus lados más salvajes y empezaron a huir del silencio, siendo guiados por sus propios instintos. Tanto humanos como seres venidos de ese lugar más allá de la luna estaban forzaron un espíritu guerrero cuya única ambición tenía un nombre: Taeyang. Y sus pasos acelerados, sumados a la brisa de esa noche tan especial en que la luna, que en pronto sería de nuevo visible, estaba tan roja como el color de la sangre ya derramada.

Entraron en el territorio salvaje, atravesando una barrera creada por un muro de maleza mucho más alta. Saltaron los troncos, algunos más lentos que otros y, en quedar enmedio del bosque miraron a lado y lado, dejando que la brisa les recordara el porqué de la venganza.

Yoongi no evitó volver a recordar, decidiendo que esta sería la última vez en hacerlo de esa manera, tan precisa y detallada todo lo que ocurrió aquel día, el día de la muerte de TaeMin.

Se peleaba con Jackson, con quién actualmente había hecho las paces. Jackson dió un puñetazo al suelo y todo se le vino abajo. Su rostro relajado mostraba el alivio de ese momento, al haber tenido la suerte de haber quedado colgando de una lámpara en vez de una caída directa. Pero a la vez recordó el grito de Namjoon, seguido del de Jackson, ambos desesperados también llamando a TaeMin. Y él, tras amañarselas para bajar a la planta escondida y hacer un recorrido con la mirada, encontró la imagen que todo hermano rezaría por no ver: el cuerpo de TaeMin sin vida, sobre los restos de piedra de un antiguo teatro que no deberían haber descubierto.
El dolor de la imagen causaba que la paliza dada por Jackson o los arañazos de haber quedado colgando en la lámpara de araña se perdieran en sus recuerdos.

—Chicos. He escuchado algo—Susurró T/N muy seria— Por allí, algo se movía.

—Sin embargo yo he escuchado algo por allí. —Contradijo Jin.

—No puede encontrarse en dos lugares distintos.

—No, de eso estoy seguro. ¿Pero entonces dónde...

Y mientras los dos amigos lo empezaban a discutir algunos de los demás olvidaron la rabia para empezar a sentirse muy pequeños ante la plena oscuridad del bosque y un asesino andando suelto por este. Los quejidos generados por el miedo empezaron a hacer ámbito de presencia. Y, cuando la calma volvió a reunirse gracias a los más mayores un grito ahogado fue escuchado.

—¿Quien ha sido?— Preguntó Jungkook, estremeciéndose por el frío y el miedo.

—¿Estamos todos? —Namjoon contaba a todos con la mirada, acabando con un silencio aterrador.— No encuentro a LeeDo.

—Él siempre está con Hong... —Jackson buscó al nombrado, tampoco lo encontró.—Mierda. ¿Dónde se habrán metido? No es momento para hacer de las suyas.

—Tenemos que buscarlos. —Dijo Hoseok , quién a pesar de no ser de los menores se comportaba muy inquieto— ¿Y si esta vez verdaderamente están en peligro?

Mis chicos terrestres (BTS × BTS+tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora