Capítulo 40. Gemidos

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Luego de un rato estaban todos en la mesa almorzando, incluyendo Magda y Matamoros, quienes estaban listos para salir de la mesa si Saúl provocaba a José Luis.

Lo cuál no pasó por que Mónica estaba presente, se podría decir que luego pasaron una tarde agradable, hasta que Mónica fue a nadar con Lucho dejándolos sólos. 

Altagracia acuesta a Dashia por si debía meterse en la pelea, son varios los minutos en los que hay silencio, dónde José Luis aprovechó para abrazarla y darle besos.



- Es muy linda está hacienda -- besa su cuello

- Y tu que te quejabas -- sonríe

- La otra era más espaciosa -- dice Saúl -- Con tu campo de tiro y los caballos

- Lo llevaste ahí -- la ve

- Aquí también hay caballos -- cambia el tema -- A unos tres kilómetros hay una laguna

- No te lo contó? -- se acomoda -- Fuimos varias veces la verdad

- Varias -- asiente

- Pensé que sabías todo de ella -- sonríe -- No te preocupes tiende a ocultar las cosas

- No se van a meter? -- dice Mónica nadando a la orilla

- Yo no -- se levanta entrando a la casa

- Que le pasa? -- ve a su mamá

- Nada, debe estar cansado por el viaje -- carga a Dash -- Puedes cuidar de Lucho un rato?

- Ya sabes que si -- le sonríe y regresa con el

- No vas a arruinar nada si es lo que piensas -- le dice a Saúl -- Se maduro por una vez en tu vida y cierrate la boca -- va tras José Luis -- Mi amor, esperame

- No Altagracia -- entra al cuarto

- Déjame explicartelo -- acuesta a Dash en su cuna -- Mi amor -- lo toma del brazo -- Escuchame, lo está haciendo apropósito

- Lo hicimos en la misma cama que con el? -- la ve

- No -- niega -- Remodele toda la hacienda recuerdas, todo lo que está en esa hacienda es nuevo -- lo toma de las mejillas

- Por que no me dijiste que lo llevaste ahí -- toma sus muñecas

- Por que no le vi importancia, el es pasado, estoy contigo ahora -- lo mira a los ojos

- Extrañas que el te haga el amor? -- la carga

- Claro que no -- enreda las piernas a su cadera -- Pero si extraño que tu me lo hagas

- Eso se puede resolver -- la acuesta en la cama

...

- Sabes por que se puso así Luis? -- sale de la alberca

- La verdad no -- toma de su copa -- Tal vez Altagracia te dijo la verdad

- Es que se veía enojado -- se cubre con la toalla

- Se le pasará -- da de hombros

- Moni!! Ya no entrarás? -- se apoya en la pelota inflable

- Ahorita voy -- sonríe -- Me dio un poco de frío, tu no vas a entrar amor? -- se sienta en sus piernas

- Si, deja subo a cambiarme -- le da un corto beso

- Está bien -- sonríe levantándose -- Lucho prepárate que ahí te voy -- deja la toalla por ahí




Saúl sonríe viéndola jugar con el niño y entra a la casa, escucha risas leves en la cocina, se asoma un poco encontrando a Magda y Matamoros lavando los trastes.

Niega regresando su camino a las escaleras, llegando al segundo piso va hasta el cuarto que comparte con Mónica, antes de abrir la puerta se detiene viendo para la última puerta.

Será que estaban discutiendo? Sonríe imaginando a Luis bajando con sus propias maletas yéndose de la casa, pero algo llamó su atención, recordó lo explosiva que fue esa pelea la primera vez que fue por Mónica.

Por que ahora no escuchaba gritos y maldiciones? La duda comenzó a carcomerlo, ya se habrá ido? Decidido a descubrirlo se acerca a pasos lentos, la puerta estaba algo abierta por lo que sólo tuvo que empujarla un poco más para ver.

Al abrir la puerta podías ver la cama y el resto del cuarto, lo que vio no le agradó nada obviamente, sin embargo se quedó allí pues ambos estaban muy ocupados para ver a la puerta.




- Creés que abajo nos escuchen -- murmura agitada

- No me importa -- besa su cuello aumentando el ritmo de las penetraciones

- Luis -- jadea clavando las uñas en el

- Shhh -- la calla con un beso




Cierra la puerta escuchandolos gemir, se aleja de allí entrando a su cuarto, azota la puerta con fuerza intentando así interrumpirlos, lo cuál no funcionó, se cambió y bajó junto a Mónica.

Cuándo decidieron salir de la alberca olía muy rico la casa, al entrar en la cocina Altagracia hacía la masa de los croissant, había aprendido en la temporada que pasó en París.





- Estás cocinando? -- ríe Mónica

- Si ya hay algunos en el horno -- sonríe cuándo Luis la abraza

- Son de chocolate por cierto -- besa su mejilla

- Les falta mucho? Ya se me antojaron -- ríe cubriendose mejor con la toalla

- Ve a darte una ducha y cuándo bajes ya estarán -- sugiere -- Tu ayuda a Lucho -- lo empuja

- Ya voy -- le da una nalgada -- Vamos campeón -- lo carga -- Antes de que te enfermes 

- Yo voy con ustedes -- los alcanza Mónica

Perfume de mujer [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora