SOLEDAD

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A veces querida y a veces dolorosa.

Yo, solo, siempre.

Cuesta encontrar a alguien parecido,

yo soy un actor del montón,

nadie es capaz de saber cómo soy.

Eso da miedo, lo sé,

pero es lo único que pude hacer para evitar esta ansiedad que,

poco a poco,

va acabando conmigo.

Noches y noches en desvelo,

pensando en futuros inexistentes,

comiéndome la cabeza hasta caer rendido.

Esto es un aviso,

no te guardes las cosas, por que si no te acabarán consumiendo.

Memorias de un niño rotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora