44~El Diablo y su mujer~

3 1 0
                                    

Miré a Seth, él me miró a mi y ambos reímos, luego apoyé mi cabeza en su hombro y miré el bello amanecer de invierno mientras sentía una especie de calor siempre que Seth tocaba mi mano.

Seth: Lo bueno de ser El Rey es que todos te tienen miedo…aunque a veces eso es una desgracia.

Yo: Créeme, lo vivo todos los días.

Seth: Recuerdo el miedo que sentiste cuando me viste en mi forma por primera vez…fue horrible haberte visto así de asustada.

Yo: Era jóven e ingenua.

Seth: Llevo más de 50.000 años en esta Tierra y juro que nunca había visto a mujer mas asustada y hermosa como tú.

Yo: Me sonrojas, Diablito.

Seth: Me siento halagado por eso, mi reina.

Comencé a reír y sentí los labios de Seth contra los míos, me relajé y al separarme de él logré ver que estabamos en su habitación, negué y me senté en la cama.

Yo: Los amo a los dos y los dos son mis esposos…pero…

Seth: Él es tu conexión y sabes que sientes algo más por él que por mi. Lo entiendo.

Yo: Lo siento, en serio.

Seth: Tranquila, te entiendo.

Sonreí y salí de la habitación.
Comencé a caminar por el pasillo y llegué a mi habitación, abrí la puerta y vi que Apolo seguía dormido, reí, me tiré encima de él y él comenzó a quejarse.

Apolo: 5 minutos más…

Yo: No, debes levantarte.

Apolo: No quiero…me duele mucho la cabeza.

Yo: Esa es la excusa más barata que puedes darle a tu esposa, la cual, también es tu conexión.

Apolo: ¿Puedo decirte algo?

Yo: ¿Qué?

Apolo: Quiero tener otro hijo…u otra hija.

Yo: ¿En serio…?

Apolo: Si, quiero que formemos una familia gigantesca y que vivamos en una cabaña en el bosque mientras nuestros hijos corren y son felices sin preocuparse por todo lo que nos rodea.

Yo: Me gusta la idea.

Apolo: También podríamos educarlos nosotros y enseñarles de la vida…¡podrían ser pequeños magos corriendo por toda la casa!

Yo: ¿A qué viene esto, amor?

Apolo: Es que…quiero pasar toda mi vida contigo y que seamos una familia feliz.

Yo: Nunca en mis 1217 años te vi así de…¿entusiasmado?

Apolo: Vi el futuro en la bola.

Yo: Ya entiendo…

Apolo: Moriré en la pelea contra la oscuridad.

Yo: Eso es imposible.

Apolo: Me asesinará mi tío.

Yo: No. Basta.

Apolo: Y tú serás feliz con Seth.

Yo: BASTA, APOLO.

Salí corriendo de la habitación mientras que sentía cómo mis lágrimas frías corrían por mis mejillas rosadas y calientes.
Entré corriendo al despacho de mi tío y él me miró, corrí hacia él y lo abracé, comencé a llorar en sus brazos mientras que él acariciaba mi cabello hasta que él también comenzó a llorar conmigo.

El Sabueso: No quiero que muera por culpa de algo que cree yo. ¡No quiero!

Yo: No puedo perderlo, tío…es mi esposo y lo amo.

El Sabueso: Tu tía sabría qué hacer en estos momentos…

Yo: ¡Eso! ¡MI TÍA!

Me solté de mi tío y salí corriendo hacia la habitación de Seth, apenas llegué a esta entré sin importarme nada y agarré su mano, aparecimos en el infierno y él me miró preocupado.

Lucifer: El Diablo y su mujer…que…grata sorpresa.

Yo: ¿¡Dónde está mi tía!?

Seth: No lo sabemos. No está aquí.

Yo: ¡La necesito!

Lucifer: Se fue al cielo.

Yo: ¡MALDICIÓN!

Tembló todo y todos los demonios se asustaron, suspiré y miré hacia arriba, cerré mis ojos y al abrirlos estaba enfrente de mi tía.

La Sombra: Pude traerte…pero es por poco.

Yo: Dios mío, tía…estás bien.

La Sombra: Debes tener a tus hijos y dar tu vida por Apolo, niñita. No puedes dejar que él muera.

Yo: ¿Mis hijos?

La Sombra: Si, serán mellizos. Un niño y una niñita.

Yo: Eso…yo-…

La Sombra: No tenemos suficiente tiempo…pero…debes prometerme que harás lo que puedas para salvarlo.

Yo: Si, te lo prometo.

Cerré los ojos y al abrirlos de nuevo aparecí en el infierno con Seth, él me miró y sonreí.

Seth: ¿Estás bien?

Yo: Si, supongo…

Lucifer: Cambiaste el curso de la historia…lo veo.

Seth: ¿Y qué ocurre ahora?

Lucifer: Florents muere…

Seth: ¿¡Qué!? ¿¡cómo!?

Lucifer: La asesina el tío de Apolo.

Cerré mis ojos y al abrirlos aparecí en la habitación en donde estaba Cassandra. Ella me miró, sonrió y me hizo un lugar para sentarme en su cama, me senté y agarré su mano para ver su futuro (vi que ella se enamoraba de Seth (porque al final ellos eran alma gemelas) y terminaban siendo una hermosa pareja)

Yo: Serás tía.

Cassandra: ¿¡En serio!? ¡que hermosa noticia!

Yo: Si…Apolo no lo sabe…

Cassandra: ¿Qué ocurre?

Yo: Nada, solo que no dormí bien y pasaba para ver cómo estabas…

Cassandra: Estoy bien, voy mejorando.

Yo: Me alegro muchísimo por ti…

Cassandra: Va a ser mejor que vayas a descansar y que le digas la hermosa noticia a Apolo.

Yo: Si…iba a hacer eso…

Cassandra: ¿Estás bien?

Yo: Y- yo…solo…

Caí al suelo y comencé a temblar, Cassandra comenzó a gritar por ayuda hasta que llegó alguien y desde ahí quedé inconsciente.

El Poder De La Sangre OcultaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora