El Poder De La Sangre Oculta

5•Apolo•

Entré a la cabaña de mi padre con bolsas de comida y él me miró, siguió leyendo su diario y me senté a su lado, comencé a cortar frutas para hacer una ensalada y luego hablé.

Yo: ¿No te aburres de estar siempre en Mitshatst?

El Lobo: A veces si...pero recuerdo que todo tiene un propósito y simplemente me quedo ahí.

Yo: ¿Sabías que tengo una tienda? Deberías visitarla algún día.

El Lobo: ¿Tienda de brujería?

Yo: Vendo pociones mágicas para las personas con problemas amorosos o emocionales y a algunos les hago magia directamente...gano bien con eso.

El Lobo: Si eso te hace feliz...

Yo: ¿Qué pasará cuando te retires de ECLH y de La Junta?

El Lobo: Ese lugar te pertenecerá a ti, Fraser.

Yo: Emm...no, gracias.

El Lobo: Eres mi primogénita...y por eso debes ocupar mi lugar.

Yo: Tienes un hijo hombre, haz que él lo ocupe.

El Lobo: Él es descuidado, maleducado y gastaría todo el dinero en mujeres...en cambio tú...tú te cuidas, eres educada y gastarías dinero en cosas necesarias para Mitshatst...tú eres la indicada, Fraiser.

Yo: Sigo opinando que no.

El Lobo: Está bien...¿qué estás preparando?

Yo: Ensalada de frutas.

El Lobo: ¿No usas magia para cortar las frutas?

Yo: Me gusta hacerlo yo misma...así sé cuáles están buenas y cuáles no.

El Lobo: Bien...mañana tendremos que levantarnos muy temprano...así que, mejor iré a dormir.

Yo: De acuerdo. Terminaré esto y luego iré a dormir.

El Lobo: Hasta mañana, Fraiser.

Yo: Hasta mañana, Lobo.

Mi padre agarró una fruta que tenía sedante y se la comió, se fue a la habitación y cayó dormido en su cama, caminé hacia mi bolso y agarré mi traje negro de pelea, me lo puse y agarré mi bolso con mi espada y mis pociones, me puse mi capa y me puse la capucha, salí de la cabaña y comencé a caminar por el bosque hacia donde estaba la cabaña gigantesca de Apolo.

~20 minutos después~

Llegué y logré ver que había una fiesta adentro y afuera de la cabaña, rodé los ojos y caminé hacia la puerta, unos guardias me miraron y les mostré una invitación falsa.

Guardia: Adelante, Fiona.

Asentí y entré, logré ver que todos bailaban borrachos y comencé a caminar hacia donde estaba sentado Apolo mientras estaba rodeado de mujeres, 6 guardias me detuvieron y me miraron.

Guardia: No tienes permitido entrar ahí, enana.

Yo: ¿¡Enana!? ¡MIDO 1,65!

Guardia: No aceptamos raras en esa zona.

Rodé los ojos y me di vuelta, hice como que me alejaba y agarré rápidamente mi espada, le corté la cabeza al hombre y todos comenzaron a gritar del miedo alejándose de mi.

Apolo: Florents Fraser...reconocería esa espada desde la distancia.

Yo: Apolo.

Apolo: GUARDIAS, LLÉVENSE EL CADÁVER DEL HOMBRE.

Los guardias se llevaron el cadáver y Apolo caminó hacia mi, quiso abrazarme pero le puse la punta de mi espada en su pecho, él levantó sus manos y se alejó un poco.

Yo: El Sabueso y La Sombra te buscan.

Apolo: No es algo que me preocupe mucho.

Yo: Te necesitan, Apolo.

Apolo: Y yo no necesito estar encerrado toda mi vida en ese lugar. YO NECESITO FIESTA Y DROGAS.

Yo: RETÍRENSE.

Todas las personas salieron de ahí y quedé sola con Apolo, él rodó sus ojos y sirvió whisky en dos vasos, me dio uno y lo tomé enseguida.

Apolo: Vi tu tienda en Londres...es...pintoresca.

Yo: Tus padres me enviaron a buscarte, Apolo.

Apolo: Mándales mis saludos...pero no pienso volver ahí.

Yo: ¿Por qué querías comunicarte conmigo entonces?

Apolo: Porque no te vi desde lo de tus amigas...y quería saber cómo estabas.

Yo: Estoy bien.

Apolo: ¿Vas a unirte a tus padres en Mitshatst?

Yo: No. Prefiero seguir trabajando en mi tienda.

Apolo: Te gusta la vida tranquila por lo que veo...

Yo: Si, no me gusta tu clase de...vida.

Apolo: ¿Por qué estás realmente aquí, Fraiser?

Yo: Quería ver cómo estabas...y como sé que estás bien, nos vemos.

Apolo: ¿Cómo está Lilith?

Yo: Alejada de todos...pero bien.

Apolo: ¿Con sus padres adoptivos hechiceros?

Yo: Si...

Apolo: Sabes que esa no es vida para nuestra hija...

Yo: No es NUESTRA hija, es mía y sólo mía. Tú lo único que hiciste fue irte y abandonarme.

Apolo: Tenía que volver a Mitshatst...

Yo: NISIQUIERA TE PREOCUPÓ CUÁNDO ERA SU CUMPLEAÑOS O CUÁNDO NECESITABA A SU PADRE. NO TE PREOCUPÓ NADA, APOLO.

Apolo: Volví a Mitshatst para ocultarla y protegerla, Florents. Volví ahí hasta saber que ella estuviera bien...y cuando estaba bien...volví aquí.

Yo: Tu madre está enferma, Apolo...sólo te diré eso por si te interesa.

Me puse mi capucha de nuevo y comencé a caminar hacia el puerta, sentí la presencia de magia negra y frené, agarré mi espada y miré a Apolo.

Apolo: ¿Lo sientes?

Yo: Magia negra...

Apolo: ¿Qué harás?

Salí de la cabaña y un monstruo de 3 cabezas quiso saltar encima mío, una daga le atravesó el corazón y murió, me levanté del suelo y miré a mi padre, corrí hacia él y lo abracé.

Yo: Lobo...

El Lobo: Vete con Apolo y protégelo, yo me encargo de esto.

Yo: No, no te dejaré aquí.

El Lobo: Fraser...

Yo: Eres mi padre y pelearé siempre contigo.

El Lobo: Esta vez debes dejarme, hija. Vete con Apolo.

Yo: Encuéntrame.

El Lobo: Siempre.

Apolo corrió hacia mi y El Lobo asintió, abrí un portal y abracé por última vez a mi padre, él correspondió el abrazo y luego me soltó, Apolo agarró mi mano y vi a mi padre activando su magia, suspiré y entramos al portal, cerré el portal y aparecimos en mi departamento.

Apolo: Al menos nos salvamos...

Yo: Ahí tienes el sillón y en el cajón de abajo tienes mantas y almohadas. Hasta mañana.

Caminé hacia el baño y entré, trabé la puerta y me saqué toda mi ropa, entré a la ducha y me duché.
Puse mi ropa para lavar y me vestí con mis piyamas, me acosté a la cama y me dormí profundamente.