Me puse mis lentes y abrí un libro conocido como Robin Hood, agarré mi taza de té y al instante la solté al ver a Florents en la oscuridad, rodé los ojos y cerré el libro, me saqué los anteojos, ella caminó hacia mi escritorio y se sentó en una silla.
Yo: ¿Las brujas siempre aparecen haciéndose las misteriosas? Debería mandar una carta de queja por eso...
Florents: Sabes que sólo puedo escaparme de la academia por la noche.
Yo: Si...es horrible porque quería leer en paz y tu apareciste.
Florents: Conocí al hombre que escribió Robin Hood y créeme, era un ladrón como el del libro.
Yo: Asumo que no viniste aquí a hablar de libros, ¿qué necesitas?
Florents: Ayuda.
Yo: ¿Una bruja como tú necesita ayuda de un mortal como yo? Esto es insólito.
Florents: Eres profesor de historia, tú sabes de esto.
Yo: Viviste toda la historia por tu cuenta, Florents, no sé qué necesitas pero no voy a ayudarte a solucionar las cosas. No como la última vez.
Florents: Por favor, Cipriano. Te necesito.
Yo: Lo mismo dijiste cuando me dejaste y te casaste con el hijo del diablo.
Florents: Tenía que hacerlo por mi familia. No quería que murieran más personas.
Yo: ¿Voy a tener que volver a la academia para ayudarte?
Florents: Lamentablemente si.
Yo: Está bien.
Florents abrió un portal y entré, ella entró detrás mío y lo cerró, logré ver que estábamos en la sala de La Junta, miré los cuadros y de la nada entraron 3 hombres, Florents los miró y sonrió (reconozco que reconocí quiénes eran por lo que me había explicado Florents)
El Lobo: Ah, el mortal que fue maldecido a la eternidad por el beso de una bruja.
Eric: Asumo que eso está re cool.
Apolo: ¿Qué hace un mortal aquí, Florents?
Florents: Cipriano es historiador y puede ayudarnos con lo que estamos buscando...además, lo necesitamos con nosotros.
Eric: ¿Por qué lo necesitamos?
Yo: Los Oscuros me están buscando.
El Lobo: ¡De ninguna manera vamos a pro-...!
Florents: Yo dirijo todo esto y decido a quién proteger y a quién no. Vamos a proteger al mortal.
Apolo: ¡No me digas, Florents!
Yo: Cierto, ustedes dos están conectados.
El Lobo: No me interesa qué demonios hablan en sus cabezas, sólo me interesa saber quién embrujó y castigó a este historiador.
Florents: Fui yo.
Los 3 se quedaron paralizados mientras miraban a Florents y me miraban a mi, reí y miré hacia la puerta, logré que ahí estaba el esposo de Florents cubierto de sangre y me escondí detrás de ella.
Yo: ¡ESTÁ LLENO DE SANGRE!
Florents: Tranquilo, no muerde.
Yo: ¡LOS DEMONIOS MUERDEN, FLORENTS!
Florents: ¿A quién asesinaste, amor?
Seth: Un par de mortales que tenían que ir al infierno.
Comencé a gritar del miedo y a correr mientras Seth se acercaba, él me miró confundido y seguí corriendo hasta que Florents me frenó con su magia.
Florents: TE RELAJAS O TE ROMPO EL CUELLO HASTA QUE REVIVAS.
Yo: Si, lo siento.
Seth: ¿Otro mortal? Ya van 10 que entran sin permiso aquí.
El Lobo: Este es El hombre maldito, Seth.
Seth: Ah, ya es normal tener otro ex de mi mujer en la academía. Puedes calmarte, chico. No voy a hacerte daño.
Yo: ¡ERES EL MALDITO DIABLO! LE TENGO MIEDO A LOS DEMONIOS.
Eric: ¿Puedo amordazarlo?
Apolo y Florents: ¡NO!
Yo: Prefiero ir al infierno antes que estar amordazado en un lugar lleno de brujas, brujos y cosas raras.
El Lobo: ¿El maldito puede ayudarnos a encontrar ESO?
Yo: Si me dijeran qué es y si pudiera moverme sería muchísimo mejor
Florents dejó de hacer su magia y caminé hacia la mesa, su hermano abrió un mapa en una tablet e hizo magia, el mapa apareció proyectado en el aire y me quedé sorprendido.
Apolo: Buscamos el famoso cáliz de Jesucristo.
Yo: ¿Puedo saber por qué?
Eric: Lo necesitamos para descubrir el destino del mundo.
Yo: Los brujos pueden hacerlo sin ese cáliz y créanme, sé muchísimo de ustedes.
Seth: Sin el cáliz no podemos derrotar lo que se viene, mortal.
El Lobo: Todas las leyendas sobre monstruos de la oscuridad que te contaban son reales, niño. Van a aparecer el 22 a las 3:33 y nisiquiera el diablo o su hijo podrán vencer a esas criaturas.
Yo: Entonces...me están diciendo que el cáliz puede.
Apolo: El cáliz y la sangre de un hombre o mujer malditos.
Yo: ¿Por eso es que me protegen?
Seth: Por eso y porque tus conocimientos son infinitos.
Florents: Sé que tienes miedo, Ci...
Yo: ¿¡Y TÚ QUE MIERDA CREES!? ¡Por tu culpa me buscan Los Oscuros y ahora tengo que poner mi sangre maldita en un cáliz de Jesucristo!
Seth: Tu sólo no tienes que poner sangre ahí dentro.
Yo: ¿De qué hablas?
Florents: Tengo la marca del diablo, estoy maldita por él.
Yo: Que bueno es saberlo, sin embargo no vas a convencerme.
Eric: ¿Ahora es buen momento?
Apolo: ¡No, Eric!
Eric: El maldito no nos va a ayudar, ya lo dijo.
El Lobo: Por favor, niño. Sin ti no podemos.
Yo: Busquen a otro maldito, no a mi.
Seth: Eres el único maldito que queda en la Tierra...los otros...
Yo: ¿Están en el infierno?
Seth: Si...Los Oscuros los aniquilaron completamente.
Yo: Maldición...
Apolo: Debes decidir rápido, maldito.
Yo: Está bien, los ayudaré.
El Lobo: Gracias, niño.
Yo: Llámame así de nuevo y tu cabeza aparece colgada en ese mástil.
Florents: Aww, aprendió de la mejor.
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El Poder De La Sangre Oculta
FantasiaMuchos desearían tener poder y ser inmortales. Otros ven al poder como una maldición...y están también los que creen que los poderes sirven para crear Caos. Mi vida tuvo a muchas personas que quisieron asesinarme para obtener mis poderes y desperta...