¿Podrías escucharme? •Brightwin•

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Bright busco otro plato para servirme un poco de cereal y después de servirlo saludo con amabilidad a mi madre y a mi tía.

—usted debe ser la mamá de Win —se acercó a mi madre para saludarla de mano—. ¡Que joven se ve señora! Win se parece mucho a usted.

—Sí, soy la mamá de Win —correspondio al saludo de Bright y rió con delicadeza al escuchar las palabras de éste—. Que joven tan amable.

Verlo ser tan amable con mi mamá me parecía tan extraño. Tal vez ganarse la confianza de mi madre era parte del plan, sí, si esto era así debía de admitir que Brigth era bueno actuando.

—¡y usted debe ser la tía de Win! —el chico miró a mi tía para saludarla igualmente de mano—. Mi mamá me a hablado mucho de usted, ¡es un placer conocerlas! —el chico no dejaba de mostrar su sonrisa amable, erá un poco exagerado, pero estaba bien.

Despues de los saludos la mamá de Bright invitó a mi madre y a mí tía al comedor y a nosotros nos enviaron al cuarto de el chico. Bright me pidió que lo siguiera, no sin antes tomar los platos con cereal y juntos nos dirigimos a su habitación.

—¡tu casa es muy bonita! —decidí romper el hielo. Esto empezaba a ser incomodo.

—Lo sé, gracias —llegamos a la entrada de su habitación —¿podrias abrir la puerta? Mis manos están ocupadas.

Abrí su puerta y miré dentro, tenía una habitación realmente bonita, tenía muchas cosas relacionadas al fútbol y la música, no estaba nada mal.

—wow, tu cuarto es muy bonito. El mío siempre es un desastre —dije mirando al chico con una sonrisa.

—¿tú lo crees? —rió suave intentando comer más de su cereal, obvio sin tener éxito—. No lo hubiera ordenado si mi mamá no me hubiera obligado, me dijo "oh! Cariño, ¡tu cuarto es un desorden! Tendremos visitas, ¡más te vale que lo arregles ahora mismo!" —imito la voz de su madre de una forma graciosa. Bright empezaba a agradarme.

—lo entiendo, las mamás siempre suelen regañar a sus hijos por eso —no pude evitar reír un poco.

Entramos a su habitación y el chico de labios lindos dejó los platos de cereal sobre una pequeña mesa.

—No tengo mucha hambre, no debiste traer el otro plato, pero igualmente gracias —me acerqué para tomar el plato pero Bright me alejó poniendo su mano sobre mi pecho antes de que yo pudiera acercarme lo suficientemente para tomarlo. Parecía que Bright protegería ese plato de cereales con su vida.

—no era para ti realmente, tal vez menti un poco, lo traje para mí —Bright no parecía sentirse para nada culpable por su engaño y eso hizo que me sintiera ofendido.

—pues... —le sonreí mirándolo a los ojos. Yo también podían jugar el mismo juego—. Yo también mentí un poco —Bright evito mi mirada y aproveche para tomar el plato rápidamente—. En realidad sí tengo hambre, ¡gracias por el cereal!

—¡Pero eso no era...—se interrumpió a él mismo y se quedó callado por unos segundos—. Agh, bien quedatelo, tampoco lo quería tanto —hizo un pequeño berrinche.

Me eché a reír. Este chico era muy gracioso y su pequeño berrinche me pareció bastante lindo.

—¿por qué te ríes? —pregunto el chico volviendo a comer lo que quedaba de su cereal.

—sólo creo que eres lindo, es todo —admití sin pensarlo mucho.

—¿Crees que soy lindo?, Oh, gracias, también eres lindo —note su leve sonrojó. Brigth no se atrevía a mirarme, eso me pareció realmente tierno.