¿Podrías escucharme? •Brightwin•

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Bright y yo esperamos cerca de la puerta del salón, ya faltaban pocos minutos para que la clase terminara.

—Win, seguiré esperando el beso de agradecimiento, seré paciente —Dijo Bright haciéndose el coqueto.

—Primero preguntemoslo a tu novio, ¿Te parece? sí me deja con gusto lo haré —bromíe.

Bright me miró mal y yo sólo reí, ¿Ahora quién era el molesto? Eh. Después de esperar esos minutos la clase terminó y nosotros porfin pudimos entrar.

Gun y Mike se nos acercaron al vernos, parecían sorprendidos.

—¿Qué estaban haciendo ustedes dos? ¿Por qué no entraron a clase? —habló Gun en forma de regaño.

—Sí, ¿dónde estaban? —Mike nos miró como si intentara decifrarnos—. Parecen sospechosos, acaso ustedes...

—Dios mío —Liz interrumpió. Ella estaba atrás de nosotros escuchando todo—. Mierda Bright, ¿engañaste a tu novio? No puedo creer que esten de calenturientos tan temprano.

Bright me miró de reojo y empezó a reírse bajo. Por alguna razón sentí mucha vergüenza, estaba rojo y sólo puede empujar despacio a Bright para que se callara.

—¡Liz! —Gun miró sorprendido a la menciona—. Eres una entrometida.

—Soló bromeaba —Liz rodeó a Mike por los hombros con su brazo—. es obvio que Win hace mejor pareja con Mike.

—¡Oye!, Claro que no —Mike se quitó el brazo de la chica de encima—. Deja de andar en lo que no te importa y ve con tus amigas.

—Ustedes también son mis amigas... —Liz asintió con suavidad haciendo un pequeño puchero con los labios.

—¿Nos estás diciendo chicas? —preguntó Gun ofendido.

—No, no, ¿Cómo crees? Por supuesto que no —respondío Liz con sarcasmo.

Ver la escena de esos 3 chicos entrometidos era divertido, cada día que pasaba sólo estaba más seguro que en esa escuela todos eran unos grandes chismosos.

—Por cierto, ¿dónde está tu chico Bright? Parece que hoy no vino a clases —Liz cambió el tema.

—oh, sí Jai tuvo algunos problemas personales y no pudo venir hoy a la escuela, pero mañana ya estará aquí —despreocupó el chico.

El rato paso, los chicos preguntaron por mi muñeca, les conté lo mismo que a Bright y después el profe de la clase llegó. No podía escribir así que los chicos me ayudaron mucho, grabaron la clase para mí y me ayudaron a contestar la actividad del día sin que el profe se diera cuenta de mi lesión, ellos insistieron en que me fuera a casa, pero no quería ver a el estúpido de Khai nunca más.

—¿Por qué no quieres irte a casa? —Preguntó Gun en voz baja para que el profesor no escuchara.

—No es nada, simplemente no quiero estar en mi casa —dije de la misma manera que él.

—puedes confiar en nosotros, somos amigos —habló Mike.

—Bueno, la última vez ustedes dos fueron unos chismosos —recalqué mirándolos seriamente—. Ya no confío en ustedes.

Bright también estaba escuchando y lo escuché reír.

Fue suficiente para que ellos se apenaran y no preguntarán nada más, merecían más que sólo mi mirada sería, algún día tendría mi venganza.

—Bien, tu ganas, ¿podrías perdonarnos? —pidió Mike.

Lo pensé por un momento, podría aprovecharme de esto.