Faded Song. {FINALIZADO}

Capítulo 27: ¿Por qué no puedes quererme de esta manera?

Aylin.

Mi teléfono sonaba, dejándome ver el nombre de Marshall en la pantalla. "Maldito seas" cubría en letras grandes mis pensamientos.

Suspiré, respondiendo la llamada con enojo. El cabello recogido evitaba que el sudor se me acumulara hasta agotarme más. Al escuchar su voz ronca no pude evitar sentir opresión en el pecho; Marshall era capaz de encogerme con solo su voz.

—Carajo, te he dicho repetidas veces que no me llames en horario laboral —vi de reojo a Aike, le hice señas para que permaneciera afuera—. ¿Qué quieres ahora? No estoy disponible. Si solo quieres hincharte un rato, por favor, no me llames ahora que pasó más de un mes desde la ultima vez.

—No te esponjes, amor —su risa hizo eco al otro lado de la línea, logrando que mi expresión fuera más miserable a pesar del maquillaje—. Solo te llamaba para decirte que necesito mi equipo de pintura que dejé en tu apartamento. ¿Puedes tenerlo en Faded Song? Pasaré algún día por él.

Quería un "te necesito". Aunque para él nunca fui alguien a quién necesitar.

Yo necesitaba a Marshall, necesitaba a esa persona en quien invertí años de mi juventud. El chico que me involucró, me corrigió, y después de un tiempo me intoxicó. Quería que me necesitara tanto como yo dependía de él. Aunque supiera que el amor no funcionaba así; me negaba a llamarlo obsesión y dependencia. Me causaba temor llamar a las cosas por su verdadero nombre, catalogar mis sentimientos como incorrectos.

—Haz lo que quieras. Los voy a dejar en el camerino así que no importa cuando pases. —Aparté el teléfono de mi oído sin colgar, anhelando una última respuesta que me obligara a mantener la llamada.

—Perfecto. Gracias, cielo. —Colgó de forma instantánea.

El estómago se me revolvió al ver su imagen de contacto. No me había escrito en ese tiempo porque era su rutina; salir con alguien más de un mes, no contactarme en ese tiempo, y volverme a buscar cuando acaba de romper con alguien. Yo soy quien "no fue nadie para él".

En la imagen podía ver la mitad del rostro de Marshall, su característico cabello rebelde oscuro. Su mano sostenía la nariz de una chica morena de cabello lacio que mostraba los dientes y desviaba la mirada de forma sexy a través del cristal de sus anteojos.

Quería ser ella. Quería que me amara al punto de ponerme de fondo de perfil. Quería siquiera ser recordado. Quería que se muriera.

~•~•~•~

Las pruebas para las siguientes presentaciones eran por la mañana regularmente. Aike tocaba la guitarra acústica mientras llevaba el ritmo de la música con su voz. Yo tocaba el teclado, con aburrimiento, oyendo la interpretación de mis arreglos. Quería huir de allí y volver a casa.

El mensaje de Dante en mi buzón decía "¿nos veremos hoy?". Ese buzón me hacía sentir inseguro.

—I still remember, third of December. Me in your sweeter you said it look better on me than it did you. Only if I knew how much I liked you. —La voz tan similar de Aike a la de Conan Gray me tranquilizaba, era un tono alto con el que podrías dormir de forma tranquila.

Deseaba que el suéter que le regalé a Marshall en invierno por su cumpleaños no se lo diera a nadie más. Era extraño, quería a Dante también. Esos últimos meses lo único que había hecho con el rubio de ojos verdes era comer en casa, ver musicales y jugar videojuegos. Íbamos bastante lento, aunque no estaba seguro de a donde queríamos llegar con esa lentitud.