Suciamente Irónico.

Cap. 22 Mentiroso.

3 días habían pasado el pelinegro no había salido de su habitación, y no es que le molestara el ser descubierto de aquella forma por lo amigos de Hanji, sin embargo si sentía culpa ante el hecho de ser la causa directa de romper la estabilidad del grupo de la castaña, seguramente ella debió de haberlo pasado pésimamente una vez que él se fue.

- Levi... ¿Estas bien? Me tienes muy preocupada, estando ahí encerrado...- Se escuchó decir a su madre tras unos suaves golpes en la madera.

Kuchel no obtuvo respuesta alguna, solo mirando como la bandeja que había dejado junto a la puerta estaba apenas consumida en el agua y la fruta. Ella levanto el fino recipiente y hablo de nuevo. – Hijo... si necesitas hablar de algo... lo que sea, sabes que siempre te escuchare...- Finalizo y cuando estaba por irse la puerta cedió mostrando al pelinegro con expresión cansada.

- Madre... me gusta otra mujer y esta situación me está superando...- Dijo sin más.

Kuchel sonrió amorosamente a su unigénito. - ¿Es la violinista, cierto?-

Para Levi fue inevitable el gesto de sorpresa en su rostro - ¿Madre... como lo sabes?-

Kuchel sonrió de forma más notoria – Una madre se da cuenta de esas cosas cariño... además le cantaste durante la fiesta. Si quieres un consejo solo te puedo decir que tienes dos opciones; huir con ella o encarar a Kenny.-

--o-O-o--

Hanji permanecía en silencio frente a su mesa de trabajo, atornillando lenta y monótonamente un pequeño tornillo sobre un aparato sin forma o función definida para el espectador.

La vivienda acompañaba aquel molesto silencio que permanecía aun con la presencia de los moradores del lugar.

- Hanji... ¿No piensas salir? Has pasado casi todo el tiempo aun lado de esa mesa.- Pregunto Nifa de la nada. Sin recibir respuesta alguna.

- Sabes... nadie te culpa por lo de Ackerman... tampoco es tu culpa que Moblit desapareciera... digo ya volverá. Debe estar bastante dolido no lo culpo; pero es un adulto centrado; solo necesita tiempo.- Hablo esta vez Abel.

- Moblit desapareció sin dejar rastro...- Arrastro las palabras la castaña. A su vez pensando en la cuestión que más le intrigaba "Los Ackerman asesinaron a tu familia" ¿Cómo lo sabía?... y después las amenazas que le dijo a Levi, "cuando regrese te destrozare a ti, a tu familia y a tu apellido." Moblit ocultaba algo, ahora estaba segura.

Inesperadamente unas manos sobre sus hombros la sacaron de aquellos pensamientos. – Hanji tal vez debería salir al menos un par de horas, no creemos que sea bueno que pases tanto tiempo solo junto a esa mesa bajo la luz artificial.- Señalo esta vez Keiji sosteniéndole los hombros.

---O---

Más tarde

Tras la repetida insistencia Hanji termino cediendo y ahora sus pasos la llevaban por el área del parque, aun que tenía demasiadas cosas en mente como para concentrarse en algo como tocar su violín que aun que no fuera su idea salir a tocar lo llevaba con ella, igual aquello podría servirle de distracción y más tarde visitaría a Mike, tal vez él le pueda decir alguna otra cosa, después de todo Erwin dijo que también sabia sobre su situación.

Sin más tomo su blanca mascara y salto sobre el borde de la fuente, ya teniendo en rededor a algunas persona a un antes de comenzar a tocar, completamente ajena a la afilada mirada que recaía en ella, parcialmente oculta tras los arboles circundantes.

- Apareció, dispérsense y ciérrenle las salidas.- Ordeno en voz baja Traute a los hombres que la acompañaban.

Hanji comenzó su interpretación mientras sus pensamientos continuaban divagando. – Levi tenía razón en las cuestiones que me hizo antes... Moblit sabía tantas cosas... una educación demasiado fina, lo que nos enseñó... violín, baile, dibujo, tiro... un momento.-