Capítulo 11

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Al despertar me sentía algo extraña, quise hacer memoria sobre cuándo fue la última vez que bebí sangre y descubrí que no lo había hecho desde aquella bolsa que me ofreció mi abuelo. Por lo que me he olvidado de beber Sangre, maldición debo ser el peor vampiro sobre la tierra, aunque claro, en uno de los libros decía que los vampiros Nosferatu podían durar mucho más tiempo sin sangre que los vampiros normales, tal vez debería mantenerme en abstinencia y ver cuánto tiempo resisto sin beberla –bien eso haré-.

Me levante, tomé una ducha y comí un yogurt, esperaba poder resistir al entrenamiento con solo eso en mi estómago. Bajé al gimnasio, puse algo de música y comencé mis entrenamientos, al parecer ahora no solo soy más fuerte, también más flexible y hábil que antes.

Esto debe ser un chiste, después de una hora y media de ejercicios aun me siento como si apenas estuviera calentando, creo que debo subir mi nivel de entrenamiento o esto se hará muy aburrido, justo estaba por empezar con un poco de levantamiento de pesas cuando se escuchó el timbre de la casa, apagué la música y subí a ver quién era. Al abrir la puerta Loren estaba ahí, con uniforme y su mochila.

-Hola, ¿qué haces aquí? ¿no deberías estar en la escuela?- Loren paso junto a mí, puso su mochila en el sofá y se sentó

-Me expulsaron ¿recuerdas?- dijo mientras me sentaba junto a ella

-Oh, creí que solo de una clase

-Yo también, pero al parecer los padres de Stephanie se quejaron y el director me dio vacaciones por una semana- Loren se veía de lo más relajada, no parecía que esto le afectara de ninguna manera

-Y ¿por qué traes uniforme?

-Bueno pues porque no se lo conté a mis padres, así que fingiré que voy a la escuela y me ocultaré aquí, ¿eso no te molesta verdad?

-No, claro que no, esta es tu casa, pero no crees que de la escuela notificaran a tus padres

-No, ellos siempre se arreglan con Carolina, y ya le avisaron sobre esto, ella quedo de hablar con mis padres pero obvio no lo hará

-Tal vez deberías decirles, digo no creo que se molesten, nunca antes habías tenido problemas

-Exacto, nunca, por lo que no sé cómo reaccionaran y de momento no tengo tiempo para ser castigada, así que solo lo dejaremos así, yo presentaré mi servicio a la escuela como castigo al volver a clases y ellos no tienen que enterarse

-Aun no me has contado que fue lo que hizo esa chica– Loren se puso algo nerviosa, y comenzó a jugar con su cabello, era una manía que tenía cuando algo la incomodaba, de pronto mi mirada se dirigió a su cuello y no pude evitar lamer mis labios

-Sam, ¿Qué pasa?

-¿Qué?, oh nada, es solo que no he bebido sangre y me siento algo extraña

-¿Por qué?

-Porqué- pregunté confundida, comenzaba a sentir ese calor interno de nuevo, mi garganta quemaba y sentía una enorme necesidad por su sangre

-Sam, ¿porque no has bebido?

-No lo sé, es solo que quería ver cuánto tiempo puedo vivir sin ella– mis palabras se perdían, de pronto me olvidé de lo que estaba diciendo, me encontraba sentada a medio metro de ella y debo decir que olía delicioso –hueles tan bien

-Okay, Sam creo que es hora de que bebas un poco- Loren actuaba natural, pero mi percepción de vampiro notaba que se estaba poniendo algo tensa y eso solo incrementaba mi deseo

-Sí, creo que debería– dije mirándola directamente a los ojos, ya no era yo quien hablaba, mi vampira interna había decidido salir a jugar

-Sam, creo que esto se está poniendo extraño, quieres que te traiga una bolsa de sangre para que bebas

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