capítulo 18.

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Cuando Billie y Scarlett subieron a desayunar a la mañana siguiente, se encontraron con un bullicio poco habitual en la cocina. Más de una decena de desconocidos intentaba hacerse escuchar a voces mientras Berta iba de un lado a otro sirviendo tazas de café humeante.

-Es una trampa.--exclamó una mujer vestida con pantalones de cuero y cara de pocos amigos.

-Desde luego, ¡quieren castigarnos!.--le contestó un tipo barbudo, sentado en uno de los taburetes.--Deberíamos ignorarlo.

-A lo mejor tú puedes ignorar esta maldita luz.--intervino otro tipo bajito y con el pelo recogido en una coleta señalando la luz parpadeante de su brazalete.--Pero los centinelas no lo harán.

Las dos clones se miraron entre sí y fueron a acercarse para ver a qué se referían cuando ______ apareció a su lado.

-No pueden estar aquí.--les dijo, antes de quedárseles mirando igual que la noche anterior al verlas con el mismo corte de pelo. Pero enseguida salió del trance y las arrastró fuera de la cocina, escaleras abajo.

-¿Qué está pasando?.--preguntó Billie.--¿Quién es toda esa gente?

-Rebeldes. ¿Creías que solo estábamos nosotras?

-Hasta el momento, tampoco habías dado muchas razones para pensar lo contrario...

______ las metió de nuevo en la habitación que compartían y cerró la puerta.

-El gobierno ha anunciado una nueva Rifa.

-¿Y nos ha tocado algo?.--preguntó Billie.

______ puso los ojos en blanco y se sentó en la litera inferior.

-Cada año suele haber al menos dos Rifas, aunque hubo una ocasión en que tuvimos hasta cinco. Nunca coinciden en fecha y nadie entiende la razón por la que el gobierno se vuelve tan amable de pronto. No siguen ningún patrón, aparentemente.

-Ya, Danielle nos lo estuvo contando cuando nos enseñó la Ciudadela... ¿Qué le daban al ganador? Vivir en zona leal o algo así, ¿no?.--preguntó Scarlett.

-Vivir en la Torre. Y eso implica no volver a preocuparse jamás por trabajar ni tampoco por recargar el corazón. Se reparten cupones a todos los habitantes de la Ciudadela, tanto moradores como leales, pero nunca hemos vuelto a saber de ninguno de los que han ganado en años anteriores. Tan solo proyectan un saludo de los ganadores de la vez anterior, y eso es todo.

-Como para volver aquí...--masculló Billie.--¿Y dónde está el truco?

-Ese es el problema: que no lo sabemos. Después de años intentando averiguar las razones por las que el gobierno organiza estos sorteos, aún no hemos logrado averiguarlas. Ni siquiera el atrevido de Diésel ha logrado aclararnos nada.

-A lo mejor es lo único que el gobierno hace de manera altruista por ustedes.--sugirió Scarlett.

______ rio entre dientes.

-No seas ingenua.

-Pues si creen que es una trampa, no participen y listo.--respondió Billie.

______ levantó el brazo y se remangó para mostrar su brazalete.

-No es tan fácil: las luces de todos los dispositivos han comenzado a parpadear y no volverán a la normalidad hasta que recojan el número.

-¿Y la tuya?

-Antes de huir de la Ciudadela, Zayn alteró nuestros brazaletes para que no pudieran monitorizarnos y parece ser que también ha afectado a la función de la Rifa.

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