Durante los cuatro días previos a la ejecución de Zayn, los rebeldes no tuvieron apenas tiempo de descansar. Cuando no estaban repasando los detalles del plan, tenían que vigilar los caminos desde el núcleo hasta el Zoco, asegurarse de que el gobierno no hubiera cambiado de opinión o, por turnos, ayudar en el Batterie para no levantar sospechas.Desde aquella primera reunión en el despacho de la directora del cabaret, todos se pusieron manos a la obra con la eficacia de un reloj. Mientras el gobierno organizaba los preparativos para la ejecución y se corría la voz de la ejecución pública, los rebeldes terminaban de perfilar los últimos detalles del rescate. Para Billie y Scarlett fue como verse de pronto atrapadas en mitad de un huracán. Aquella sería la primera vez que participarían en algo similar y el riesgo de que cualquier error las llevaría a una muerte segura les impedía actuar con la rapidez y la confianza de los demás.
Por eso, mientras tomaban posición en la plaza del Arrabal la mañana de la ejecución, las dudas comenzaron a asediar a Billie. ¿Y si habían dejado algún fleco suelto? ¿Y si todo era una trampa del gobierno y las estaban esperando? ¿Y si...?
-¿Todo bien?
La voz de ______ la arrancó de sus pensamientos y la devolvió a la plaza, donde esperaban entre cientos de ansiosos desconocidos a que comenzara el macabro espectáculo.
-Sí, todo bien.--contestó Billie con una sonrisa forzada.
Las cosas entre ellas dos no habían variado mucho en esos cuatro días. De hecho, apenas se habían visto. Cuando Madame Battery no mandaba a ______ a trabajar en el club, ella misma desaparecía por su cuenta para volver a altas horas de la madrugada con nueva información crucial que compartía con el resto a la mañana siguiente. No cabía duda de que era la más comprometida con la causa, y fuera por eso o por el miedo a tener esa conversación, Billie la había ido dejando pasar y ahora el grano de preocupación se había terminado convirtiendo en una montaña que le pesaba como una losa y que la distraía de lo que de verdad importaba.
La plaza pública de la Ciudadela se encontraba en el Arrabal, dentro de la zona de los leales. Frente a ellas, se erigía la Torre por encima de los demás edificios, tan grande y cercana que Billie se quedó sin habla.
El escenario de las ejecuciones lo habían situado en uno de los extremos de la plaza y lo habían decorado con telas rojas y negras que ondeaban levemente con la suave brisa. Una decena de centinelas hacían guardia encima de la estructura y en los alrededores, evitando que el público se acercara más de la cuenta.
Mientras que los leales, ataviados con sus mejores galas, esperaban a que comenzara el espectáculo en las primeras filas, los moradores soportaban el calor, impacientes, detrás de ellos. Con tanta gente allí reunida, como les advirtieron esa mañana antes de partir en busca de los mejores sitios para el plan, solían ser habituales las peleas y los hurtos, y por eso debían prestar el doble de atención para no ser víctimas de ellos. Tampoco faltaban los mercaderes ambulantes que en las horas previas a la ejecución ganaban una pequeña fortuna vendiendo monóculos, abanicos o aperitivos entre los más de mil ciudadanos allí reunidos.
-¿No deberían haber empezado ya?.--preguntó Billie, nerviosa.--¿Qué pasa si al final lo cancelan o...?
-Billie, cállate antes de que alguien te oiga.--la interrumpió ______, con la mirada clavada en el mar de cabezas que tenían delante.
-Disculpa que esté un poco nerviosa. A diferencia de ustedes, no suelo boicotear los planes de asesinato de...
No pudo terminar la frase. Con una fuerza inusitada que le agarró totalmente desprevenida, ______ la agarró del cuello y la arrastró lejos de donde estaban.

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AURA
FanfictionCon el peso de la verdad sobre sus hombros, Billie, ______ y su nueva compañera de viaje, Scarlett, se dirigen a la Ciudadela en busca de ayuda. Pero el lugar no es el mismo desde que ______ lo abandonó: ahora la lucha de los rebeldes contra el gob...