capítulo 24.

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Una noche. Eso fue todo lo que el gobierno había necesitado para levantar entre la Torre y el resto de la Ciudadela una doble valla más alta incluso que los edificios de alrededor.

Desde el amanecer, los rebeldes habían ido llegando al Batterie para informar de las novedades que habían logrado recopilar, tanto de las fuentes oficiales como de los obreros implicados en su construcción. Medía cerca de treinta metros y estaba vigilada por centinelas que patrullaban tanto el interior como el exterior. No obstante, la peor noticia de todas la trajo Diésel: estaba electrificada. Según los rumores, el gobierno lo hacía por la Rifa, y no por el inminente ataque rebelde. A diferencia de otros años, los disturbios entre la población por culpa de los boletos se habían convertido en un problema sin precedentes; así pues, en teoría, para proteger al ganador y a la élite de la Ciudadela, habían tenido que tomar medidas extremas.

______ apenas había descansado. Junto con Billie, había sido la encargada de explicar lo que habían visto y movilizar a todas sus fuerzas para investigar. Después, rendidas de todo el día paseándose la Ciudadela, habían acabado durmiendo en su habitación. Shawn las había despertado a media mañana para informarles, con pesar, de todo lo que habían descubierto.

-Estamos arriba reunidos. Las necesitamos.

Al pasar por delante de la habitación donde dormía Scarlett, Billie se detuvo y llamó con los nudillos.

-Déjala que descanse.--le dijo ______.

-También debería estar ahí arriba.--contestó Billie.

______ torció el gesto.

-¿Crees que hace falta?

Billie se asomó al cuarto y, al ver a su clon tirada en la cama, decidió no molestarla y subir con los demás.

El despacho de Madame Battery estaba atestado. Zayn se había sentado en el diván, junto con Finneas, mientras la mujer se paseaba de un lado a otro dando caladas a su largo cigarro. Danielle parecía una sombra, con la mirada perdida, el pelo lacio y apoyada contra la pared sin hablar con nadie. Por su parte, Diésel estudiaba con interés los libros que cubrían uno de los muebles cercanos al escritorio.

-Necesitamos encontrar una solución inmediatamente.--decía la mujer en ese instante.--El plan lo requiere y los rebeldes me la exigen. Habrá que decidir si merece la pena seguir adelante con todo o por el contrario...

-¿Por el contrario, qué?.--la interrumpió Danielle, fulminándola con la mirada.--¿Dejamos que Bloodworth acabe con Diego? ¿Eso es lo que propones?

-¿Tú has visto esa monstruosidad que han construido, niña? Si intentamos acercarnos, nos volarán la cabeza. Esta misión ha pasado de ser arriesgada a ser un maldito suicidio, y yo me niego a mandar a mi gente allí.

-¿Tu gente?.--le espetó la rebelde.--Si de verdad te importara tu gente, no tomarías las decisiones sola.

Shawn se acercó a la chica.

-Danielle, Battery tiene razón, ¿cómo vamos a llegar a la Torre con esa valla? Aunque lográramos acercarnos lo suficiente, escalarla sería imposible.

-En realidad la gente está esperando lo contrario.--intervino Diésel, con su voz grave.--Nadie se cree que la Rifa sea la razón por la que han levantado esa protección. Esta mañana de lo único que se oía hablar en el mercado era de los rebeldes y de ti.--añadió, señalando a Billie.

-¿De mí? ¿Tan rápido se ha corrido la voz?

-En realidad nadie conoce tu nombre, solo hablan de la chica con el brazalete solar, pero saben que la razón por la que se protegen tanto es para que nadie pueda entrar a robarles el invento.

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