Jeremy llegó a las doce con cinco exactamente. Estaba que echaba humo. Carmen aun no llegaba así que, era yo la que tenía que ir a ofrecerle algo.
Me dirigí a su oficina y entre, no sin antes tocar.
Él estaba sentado frente al computador con los ojos fuera de sus orbitas.
-pero que-susurró consternado.
Yo quise sonreír, pro en lugar de eso me mostré preocupada y le pregunte que sucedía.
-Esto no se queda así, me han robado, me han robado, todo mi dinero, no tengo nada –se tomó de los cabellos, algo de familia creo. -Llama a Damon, necesito averiguar lo que está pasando, él puede conseguir la información que necesito. ¡AHORA!
-Enseguida.
-El número está en la agenda de Carmen, ve –gritó.
Quería reír pero no lo hice antes de salir, no quería que Jeremy sospechara que algo sucedía.
Llamé a Damon y le dije que viniera lo más pronto posible, porque Jeremy estaba hecho una furia, creo que hubiera sonado bien si no me estuviera riendo.
Damon llegó al cabo de unos minutos y se encerró en la oficina de Jeremy.
No podía escuchar que era lo que decían y eso me ponía nerviosa.
-Crees que podrías ir a almorzar conmigo para hablar – Jackson apareció de la nada frente a mi escritorio.
Su tono de voz y su mirada me dolieron en lo más hondo.
-Claro –dije con voz débil.
Tome mi bolso y salí con él.
Después averiguaría como fue con Jeremy.
Entro al ascensor en silencio y siguió así hasta que llegamos a la planta baja.
Frente a mis ojos estaba una moto negra.
Jamás me había subido en una y Kira no aprobada eso. El decía que eran peligrosas, aunque él era el peligroso y no la moto.
Me acerqué a ella y Jackson me pasó un casco negro.
Con manos temblorosas me coloqué el casco.
Maldito Kira.
Jackson levantó una ceja en mi dirección.
-Tienes miedo –exclamó con diversión.
-Nunca me había subido a una –respondi con sinceridad.
Y Kira me había hecho tener miedo de querer hacerlo.
-Tranquila, estás conmigo no te va a pasar nada –me sonrió mientras se subía a la moto.
Me tendió la mano para ayudarme a subir. No tenía idea de dónde colocar los pies o las manos.
Jackson con paciencia me explicó dónde poner los pies para no lastimarme y he hizo que lo rodeara con mis brazos.
Cuando encendió la moto me agarré con fuerza de él y cerré los ojos.
-Vamos puedes abrirlos- gritó por encima del ruido del motor.
Negué con la cabeza a pesar de que sabía que no podía verme.
Pero el insistió tanto hasta que me decidí hacerlo.
Estábamos pasando un puente y la vista era hermosa.
-Wau, es hermoso –Susurré cerca de su oído.
El asintió y lo sentí reír.
De la nada empezó a gritar y yo lo seguí.
Esto era de locos, pero yo estaba loca, así que era normal.
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¿Amor o venganza?
RomansaLucy tuvo que presenciar la muerte de su madre a muy corta edad por culpa de su padrastro Jeremy quien aparte de asesinarla, envió a Lucy a un manicomio. Al ser una adolescente ya, Lucy sale de ese lugar jurando vengarse de su padrastro por todo lo...