Nunca lo noto pues nadie se había acercado a el con intenciones de amabilidad, fue un compañero ya saliendo de la escuela, solo quería una amistad y agradecerle al chino que le prestara sus notas de matemáticas. Yuta enfureció cuando se le acerco, estuvo a punto de golpear al menor, pero Sicheng lo detuvo a tiempo. Eso fue antes de casarse, nunca se dio cuenta de la celotipia que sufría su amado, porque el para ese tiempo no se apreciaba en lo mas mínimo, no le encontraba sentido que alguien se acercara a el.
Cuando ingreso a la universidad de Tokio con sus notas y una buena recomendación de su padre, se inscribió en el taller de informática y programación del profesor chino Qian Kun, un joven egresado de la universidad de Beijing que estaba dando esas clases como un favor a su padre que cayo enfermo ese primavera. El profesor Kun era muy cercano a sus padres, así que visitaba constantemente su casa en forma de amistad y en busca de la pronta recuperación de su padre. Cuando Sicheng iba a visitar a sus padres, no era extraño encontrarse algunas veces a su profesor a quien atendía con amabilidad por su preocupación y por el respeto que tenia. Incluso una noche el mayor se ofreció acompañarlo al tren para que no estuviera solo tan de noche.
Yuta quien había ingresado a estudiar para ser policía, casi entro en cólera viendo a su esposo hablar entre risas y el abrazo final que dio su esposo a su profesor cuando era momento de despedirse. Los encontró en la estación.
— Me estas engañando — le dijo cuando llegaron a la casa juntos y el agarraba fuertemente al omega del brazo
— Por supuesto que no, era el profesor Qian Kun del que siempre te hablo, el amigo de mi padre. Se le hizo tarde hablando con mis padres y se ofreció acompañarme a la estación — explico Sicheng sin entender a su esposo, como podría pensar eso de el.
— Incluso es amigo de tus padres — murmuro el alfa.
Dejaron la discusión ahí hasta esa noche. Pero siguieron otras, que si alguien lo miraba demás, que si el tipo del supermercado le sonrió. Eran celos llenados por la inseguridad de Yuta, que veía a su esposo como lo más precioso del mundo y que cualquiera se lo podría robar.
Otro defecto es algo que nunca se dio cuenta. Debido a que Yuta nunca lo trato como inferior o le dijo algo sobre eso, Según el estaba sobre entendido cuando conocido a sus padres y vio que su madre era ama de casa a tiempo completo. Yuta pensaba igual que los viejos, los omegas en la casa y los alfas y betas a trabajar. Pensó que dejaría de estudiar cuando se casaron y el mayor consiguió trabajo en la policía. Hubo más discusiones, más tormentas de verano entre ellos, no faltaba mucho para los rayos y truenos típicos de esas tormentas. Sicheng no dejo la universidad, incluso se hizo amigo de un omega joven transferido de Alemania, Liu Yangyang, mestizo, su madre una alfa alemana y su padre un omega taiwanes. Sicheng empezó a pasar más tiempo con su profesor y su amigo que con su esposo que se enfocaba en su trabajo de policía.
El tercer golpe a su matrimonio llego 5 años después de casarse. Vino de su parte y su tercer aborto espontáneo una noche de verano donde las sabanas se llenaron de sangre y solo lloro desconsolado en la cama del hospital cuando el doctor le dijo que seria imposible para el tener hijos. Un golpe tan duro como para el, como para Yuta que soñaba con un hijo, anhelaba un hijo.
— Siempre pueden adoptar — menciono Yangyang al día siguiente con flores para el al lado de Kun.
— Yuta dice que no es igual un niño que no es de tu sangre — menciono con dolor mientras pasaba su mano por su vientre vacío — Ya ni reconozco a la persona con quien me case. Se fue después que el doctor dijo eso y no ha regresado.
— Creo que lo mejor es un divorcio, ¿Cuántas peleas más tienes que soportar? — menciono su profesor ya cansado de ver a su alumno así, el omega tenia tanto potencial que se desgastaba en salvar un matrimonio sin arreglo.
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Maestros de la estafa (Omegaverse)》》》NCT
FanfictionEs la regla de la vida pensar que los omegas son débiles y nunca podrían hacer algo malo. Lindos, tiernos, cálidos, bondadosos, entre muchos otros adjetivos se le han dado a lo que llaman el genero débil por parte los betas y alfas. Dong Sicheng no...