Nunca se había involucrado en una pelea, pero eso no evito que lo golpeará con fuerza contra el estante. Jimin luchaba contra él y ambos parecían un par de perros rabiosos, sus feromonas estaba por todo el lugar y era una mezcla muy ácida que hacía que respirara con dificultad. Él era fuerte, pero Jimin también y en un rápido movimiento su espalda se estrelló contra la pared, siguió luchando con todas sus fuerzas motivado por la adrenalina y consiguió que se tropezará y terminará en el suelo, su lobo estaba orgulloso.
Poco tiempo después Jimin logro que él también cayera y ambos se sujetaron con fuerza mientras rodaban por el suelo, sus lobos tercos y dominantes tratando de tomar el control, de someter al otro. En algún movimiento logro sujetar las manos de Jimin con fuerza sobre su cabeza y aplastarlo con todo su peso, los ojos de Jimin brillaron grises y algo lo hizo detenerse, tal vez era su respiración dificultosa o la ardiente necesidad que provocaba su celo.
Pero lo próximo que supo es que estaba besando a Jimin con agresividad, eso no podía llamarse un beso, era más bien una necesidad ardiente, su piel hormigueaba y su cerebro no estaba pensando se estaba dejando llevar.
Sus labios maltrataron los contrarios y su lengua abusó de la cavidad bucal. Se distrajo, cuando fue muy consciente de las manos de Jimin en su nuca jalando sus cabellos y tratando de acercarlo todavía más si es que fuera posible.
Sus manos picaban por tocar y jamás en su vida se había sentido tan excitado, ¿Qué era esto?. Jimin hizo un movimiento y cambio las posiciones quedando encima de él.
—Park... —trato de pronunciar, porque, ¿Qué demonios estaban haciendo?, pero antes de que pudiera formular las palabras sintió la erección de Jimin presionar contra la suya y eso le hizo dejar de pensar y jadear. Mierda, eso se había sentido bien.
Sus caderas se movieron como si tuvieran voluntad propia y pronto estaba correspondiendo los empujes de Jimin con la misma agresividad. Su cabeza estaba girando en una espiral de lujuria y quería más, la fricción no era suficiente y su celo lo tenía cerca de delirar. Volvió a moverse y a dejar a Jimin debajo de él, tratando de encontrar su mirada, sus mejillas sonrojadas y los leves jadeos que salían de su boca le mostraron que él tampoco estaba pensando demasiado. Así que empezó a besar su cuello y con manos temblorosas trato de desabrochar la cremallera de Jimin y él intentó lo mismo con la suya, eran un desastre de necesidad y deseo.
Cuando lo logro sacó la erección de Jimin de sus boxers y echó un vistazo hacia abajo, la punta estaba rojiza con fugas y tenía un buen tamaño. Quiso probarla, así que lo hizo.
Se deslizó por su cuerpo y sin detenerse a pensarlo mucho le dio una lamida, deleitándose con el gemido que soltó Jimin, con algo de duda empezó a chupar la cabeza y miró hacia arriba. Jimin era un desastre tembloroso, sus ojos estaban fuertemente cerrados y sus manos en puño, su espalda se arqueaba y pequeños quejidos salían de sus labios. Yoongi gruño ante la vista y Jimin lo miró, sus ojos como la plata líquida.
—Yoongi —dijo y su voz sonó más como un gemido. Yoongi aumentó la presión con su boca. —N-no, no, espera —dijo y Yoongi se detuvo.
—Ven aquí —le indicó y su voz sonaba rasposa. Yoongi se acomodo hasta que estuvo encima de él otra vez y Jimin lo abrazo. El roce de su erección todavía cubierta con la de Jimin lo hizo soltar un jadeo. Jimin lo atrapó en un agarre fuerte y coloco su rostro en su cuello, el olor a café era increíble. Empezó a pasar su mano por su espalda de arriba hacia abajo.
—Quiero que nos corramos juntos —le dijo en un breve susurro mientras mordía su oreja y eso le robo un gemido. Jimin bajo sus boxers y agarro sus dos erecciones juntas moviendo su mano con rapidez, su cadera correspondía a los empujes y él se dejó sostener intoxicado con el embriagante olor.
—Jimin... —suspiró contra su piel estaba cerca. Jimin no aflojo su agarre, más bien lo sujeto con mayor fuerza, Yoongi lo sujetó por las caderas y enterrando la cabeza en la unión de su cuello y hombro se corrió con fuerza, sintió a Jimin tensarse contra sí y poco después también se dejó ir.
ESTÁS LEYENDO
Te odio (Yoonmin/Jimsu)
FanfictionLa habitación apestaba, era un olor tan sofocante que era un poco difícil respirar. Las feromonas de alfa volaban por toda la habitación y era un cuarto tan pequeño, un espacio tan reducido. Sentía su fuerte respiración, el sudor en su piel y la rab...