Capitulo VII

3K 419 332
                                    

.
.
.

En la oscuridad era difícil moverse sin una antorcha, sin embargo, Wei WuXian se movió por la montaña con mucha tranquilidad. Lo mas importante era dejar atrás a Lan WangJi y a Jiang Cheng y no toparse con ningún otro cultivador conocido.

Al parecer una vida no era suficiente para pagar sus deudas con el mundo.

Encontrarse con Lan WangJi, poco después de regresar a la vida, era algo inesperado pero no sorprendente, pero encontrarse con Jiang Cheng era mucho más que mala suerte.

Lan WangJi y Jiang Cheng, aún no estaba seguro de si entre ellos y él, había una zona de guerra o un hogar seguro y caliente en donde resguardarse de la lluvia.

Sus emociones estaban en crisis, no sabia si estaba ansioso, feliz o triste, pero se obligó a mantenerse en calma y mostrar un semblante impasible.

Lan WangJi no iba a tardar nada en encontrarlo. Lan WangJi era un sabueso vestido de hombre risueño y descarado.

Se alzó las mangas de la túnica y observo los grilletes malditos.

Hasta ahora solo sabia que Mo XuanYu era un ex-cultivador de la secta LanlingJin y que era un manga-cortada. Nada que pudiera decirle sobre lo que quería a cambio de darle su cuerpo.

Mientras más se adentraba a la montaña, el aire a su alrededor se volvía más opresor. Podía ver que había una gran cantidad de energia resentida brotar continuamente del suelo, la sorpresa era que no podía sentir rastro algo de energía espiritual.

Estaba bastante sorprendido.

Como conocedor de imnumerables conocimientos sobre la cultivación demoníaca y la cultivación espiritual, nunca había visto algo igual; era un hecho comprobado que estas dos energías se atraían como imanes.

De repente una voz provino desde la dirección a la que avanzaba.

—Tío, es cierto que soy un inútil la mayor parte del tiempo, pero no soy un inútil que merezca morir.

La voz se volvío a escuchar varias veces《Yo solo quería ser un bueno para nada por el resto de mi vida》《No merezco morir de esta forma, tal vez, que la muerte venga a mi, no yo ir por ella 》《No, no debo caer en la desesperacion, debo reservar todas mis fuerzas para cuando tenga que gritar por piedad》. Era una voz joven, se escuchaba algo agitada y cansada, por lo que era poco probable que fuera obra de alguna criatura maligna en órdenes de su amo para atraer a otros cultivadores a trampas caza bobos.

Siguiendo la voz, Wei WuXian se encontró frente a una cueva. No vio nada extraño, por lo que, al final, decidió entrar.

El interior de la cueva era espacioso y estaba iluminada por varias linternas de oraciones. En un primer vistazo, Wei WuXian, observó una estatua de gran tamaño en forma de mujer, ubicada en el centro, pero no pudo encontrar el origen de la voz.

Se adentro más y se detuvo frente a la estatua; los rasgos humanos de la estatua eran increíbles y se podía vislumbran en ella, lagrimas corriendo por sus mejillas, mientras, una sonrisa se plasmaba en sus labios.

Pero lo que llamo la atención de Wei WuXian no fueron sus rasgos, sino que a los pies de la estatua, había una espada tirada.

Al mirar hacia arriba, se encontro con un niño de túnicas doradas, dentro de una gran red oscura.

—¡Tú! —Al parecer, el niño conocía a Mo XuanYu.

Jin Ling se consideraba una persona cautelosa, de hecho tenía un exceso de cautela en su cuerpo, muchos dirían que no era más que cobardía, sin embargo, Jin Ling prefería no discutir con ninguna de esas personas, era mucho trabajo además, de que tenían espadas.

Una Canción de BatallaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora