CAPITULO 21

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RHEA'S POV

Llegué cuando la luna estaba tomando su lugar en el firmamento, cerca de la fuente había alguien, esa presencia la conocía muy bien

FLASHBACK

- parece un mono – dijo en burla

- ¡es mi hijo! ¡no digas esas cosas! – dije molesta

- pero necesito ser franca contigo, sino nadie más lo va a ser –

- no eres franca, eres cruel –

- da igual querida Rhea, el pequeño Mon El será mi sobrino... -

- ¿así parezca un mono? –

- umm no se puede tener todo en esta vida –

FIN FLASHBACK


- no pensé encontrarte aquí – hablé, la vi sobresaltarse, se levantó de inmediato y miró hacia mi posición, no había cambiado nada....

- reina Rhea... - mencionó

- me reconoces... esta noche está llena de sorpresas – caminé para acercarme, quitando la capucha de mi cabeza, ella me miraba fijamente – es un gusto volver a verte – dije sincera

- ¿nos hemos visto antes? – al parecer estaba confundida, esos malditos seguían teniendo cautivas sus memorias

- hace tanto tiempo... no pensé que vivirías para esto – caminé hasta quedar a pocos centímetros de su rostro

- entonces... -

- qué haces aquí... ¿vienes por respuestas? – retrocedí un par de pasos

- en efecto... ¿por qué estás aquí? – me respondió, tenía la esperanza de que viniera a preguntar por sus memorias...

- por un deseo – dije – pero los dioses no nos concederán a ambas lo que queremos – desenvainé mi espada, no pensaba tener que utilizarla – no te preocupes, será rápido – ella esquivó mi ataque, cayendo torpemente al suelo, arqueé una ceja estupefacta

En cuanto se levantó lejos de mí, hizo aparecer su espada, arremetí de inmediato en su contra, ella solo luchaba por defenderse ¿Por qué no me atacaba?, conocía muy bien sus movimientos, todas sus aberturas, era muy rápida para defenderse...

- detente – dijo jadeante, no pude detener la trayectoria de mi espada, impactando directamente en su pierna, ella jadeó de dolor

- no voy a matarte, te necesito – mencioné, no podía matarla, ella era lo único que me quedaba, dio un disparo de éter enviándome lejos, impacté contra una de las rocas, de inmediato me regeneré, levantándome del suelo volví a acercarme, ella cayó al suelo, podía sentir el Dhar invadiendo su cuerpo

- tu... eres usuaria de éter – mencionó jadeante, sonreí por su acierto y acercándome con la espada en alto, solo necesitaba noquearla, esperar a la lluvia de estrellas, pedir mi deseo y llevármela al palacio... todo estaba saliendo muy bien

- así es... soy usuaria del éter – bajé mi espada, pero me detuve a mitad del trayecto, las estrellas empezaron a caer del cielo alumbrando la noche – el ritual – me alejé de ella para encaminarme al estanque, cuando estuve frente a el corté la palma de mi mano con la misma espada, dejé caer unas cuantas gotas de sangre y recité el hechizo para invocar a las deidades... era mi única oportunidad de pedir mi deseo

El sitio empezó a llenarse de una espesa niebla, cerré mis ojos concentrando el éter que tenía en mi cuerpo... distintas presencias se hicieron presentes, un total de siete, todas con un poder abrumador

LA OPORTUNIDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora