CAPITULO 33

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J'ONN'S POV

Mi vida era aburrida y mediocre en el reino Feuer, no tenía absolutamente nada, era parte de la guardia real el imperio y a diario tenía que soportar como mi gente maltrataba a otros...


FLASHBACK

- todo está preparado, enviaremos las tropas para reducir al reino de los Éter – dijo el rey

- pero mi señor, ellos son muy fuertes – dijo mi superior

- de eso no te preocupes, las armaduras están listas, utilicen todo su poder y traigamos la victoria a nuestro reino –

Fuimos ataviados con armaduras de un extraño color rojo, era pesada y no era del todo metálica, todos estaban curiosos del material de la indumentaria, y yo solo pensaba en el destino de esos pobres seres que no hacían daño a nadie

Avanzábamos sigilosamente por el bosque después de unos días a caballo, nos encargábamos de descansar y comer adecuadamente, pues la batalla sería dura, el rey nos acompañó durante el trayecto ¿por qué?

Mis ojos vieron el sitio más hermoso que este mundo tenía, se respiraba paz y tranquilidad

- ¡ahora! – gritaron, y de mis manos salió una poderosa flama, impactando en alguna casa, todo se iluminó y el ambiente se llenó de humo y cenizas, empezamos a escuchar los gritos de las personas

Las tropas avanzaron rápidamente, y los Éter poco se defendían, todos morían por nuestro fuego o nuestras espadas, los gritos desesperados de esas personas, sus ruegos y sus intentos de escapar me daban ganas de llorar, no pude matar a nadie... me oculté tras un árbol y me quité la armadura, yo no podía cometer tal injusticia, saqué mi espada y me encargué de matar a mi gente

- ¡MAMÁ! – escuché una voz infantil por encima del bullicio, busqué el origen de tal grito, y me quedé quieto al ver de lo que se trataba, una niña estaba a punto de ser asesinada por uno de los míos, me acerqué para atacarlo, pero fui expulsado por una brillante luz, cuando quise darme cuenta, mi compañero estaba envuelto en llamas blancas y la niña lo miraba asustada, me levanté y me acerqué a ella

- cálmate por favor – le dije

- ¿Quién eres? – sus ojitos estaban llorosos

- voy a sacarte de aquí –

- mi mamá... - dijo ella, seguramente ya está muerta, pero no podía decirle esto

- déjame llevarte a un sitio donde estarás a salvo, y volveré a buscar a tu mamá – ella en medico de hipidos aceptó, la cargué entre mis brazos protegiéndola con mi capa, corrí rápidamente, esquivando llamaradas y espadas, cuando estuve lo suficientemente lejos me detuve, bajé a la niña del suelo y pude contemplarla, sus ropas eran de la realeza

- tienes que ocultarte – dije, busqué un sitio adecuado, encontrando un árbol hueco lo suficientemente grande para poder meterla allí, una vez dentro empecé a cubrirla con ramas – volveré por ti – prometí, ella asintió

Corrí de nuevo hacia la batalla, el olor a carne quemada era nauseabundo, miraba perdido toda la destrucción, toda la muerte

- ¡LA REINA HA CAIDO! – gritó el rey, todos celebraron eufóricos... la amenaza más grande para él había sido asesinada

No quedaba nadie más del reino de los Éter y yo había sido cómplice de ello, me alejé sin ser visto y volví al sitio donde había dejado a la pequeña, con la sorpresa de que ya no estaba en aquel tronco ¿la capturaron?...

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