LA OPORTUNIDAD

CAPÍTULO 41

SAM'S POV

Un precioso castillo se veía a lo lejos, sentía ardor en mi piel por la cantidad de Dhar en el ambiente, estaba irritada

- será mejor que acampemos – dijo mi tía

- debemos descansar – concedió la emperatriz

- debemos ir por mi madre, no podemos darnos el lujo de vagar – dije enojada

- ¿Qué te pasa? –

- es el Dhar, la está influenciando –

- Sam, debemos descansar, nos infiltraremos en el castillo al anochecer – propuso mi primo

- está bien... - dije

J'onn y Mon El se encargaron y armas las tiendas de campaña, mientras nosotras nos dábamos una ducha en una pequeña cascada

En cuanto terminamos, nos vestimos y comimos algo

- ¿Cómo te sientes? – mi tía se sentó a mi lado

- me siento muy enfadada... - respondí

- es normal, el Dhar está contaminándote, pero no puede poseerte del todo –

- tia... ¿Qué es esto? – hice aparecer el cristal que mi madre me había dado, mi tía abrió sus ojos sorprendida

- eso es... ¿de dónde lo sacaste? –

- mi madre me lo ha dado, dice que puede ayudarnos – ella lo tomó entre sus manos

- esto es una unión del alma... -

- ¿Qué? Pero... -

- esta unión del alma pertenece a Iri... -

- ¿Cómo es posible? –

- la deidad pudo sacarla, siendo su complemento no tuvo problemas –

- pero... ¿Cómo pudo? –

- no lo sé, pero si la unión del alma está aquí, eso quiere decir que Iri ha sido desterrada en cuanto Morrigan entró en contacto con su cuerpo, o la tiene completamente esclavizada... -

- entonces... tengo que devolver la unión a su sitio ¿verdad? –

- no lo sé, no sé qué pase si lo haces... si Morrigan sigue dentro del cuerpo de Iri, puede que se fusionen por completo, o puede que a ella le pase lo mismo que a mí en un principio –

- no tenemos alternativa... - dije

Me fui a la intimidad de mi tienda para poder dormir, ahora estaba más confundida que nunca

LENA'S POV

Necesitaba pensar en algo para evitar que Kara se enfrentara a más problemas, no me podía permitir perderla, la quería tanto que estaba dispuesta a todo por ella, seguí contemplándola mientras dormía, se removía y balbuceaba en sueños

- no permitiré que nada te pase – susurré y dí un beso en su frente

Me levanté de la manta donde dormíamos y salí de la tienda, no podía dormir por la inquietud

- ¿se encuentra bien? – aquella mujer estaba de pie mirando a la nada misma

- sí, estoy vigilando que nadie venga – me respondió, volteó para mirarme, era una mujer muy bella – debería ir a dormir, lo que nos espera no va a ser fácil –

- lo sé, pero no puedo dormir... - expresé

- tiene miedo... es comprensible, yo también lo tengo, Morrigan es un ser maligno, y si cumple su cometido no tendremos escapatoria... mucho va a perderse esta noche –