KNIGHT: TRAVESÍA HACIA UN NUEVO DESTINO

Capítulo 7

Byul sintió que había cometido un error. Realmente se había equivocado. No solo bajó la guardia y puso a Yong Sun en peligro, sino que también fue apuñalada. Además de todo eso, la princesa no aceptaba un no por respuesta para tratar la herida de Byul. Así que ahora estaba sentada frente a ella sin camisa; todo expuesto. Byul se alegró de que, por primera vez, se puso una banda sobre sus senos antes de atarlos con el paño. Por lo que, cuando se vio obligada a desenredar la tela alrededor de su pecho, Yong Sun no estaba obteniendo más de lo que necesitaba ver. Los ojos de Yong Sun tenían tanta emoción, conmoción, ira, confusión y un poco de tristeza. "¿Eres una mujer?" Parecía más enojada que nada y Byul no podía culparla.

Byul miró hacia los árboles, no queriendo encontrarse con la mirada decepcionada de la princesa. "¿Vas a examinar la herida o no?" Dijo un poco grosera, sintiendo la vergüenza en su rostro.

Yong Sun no dijo nada. Ella comenzó a hurgar en su bolso, sacando el pequeño botiquín médico que tenía. Sacó una botella de güisqui, el único desinfectante que tenía, vertiendo un poco en un paño. "Prepárate." Le advirtió a Byul.

Byul sabía que esto iba a doler de una manera inimaginable. Arrebató la botella de alcohol y tomó un gran trago. El líquido oscuro le quemó la garganta mientras bajaba. "Bueno, creo que ya no tengo otra opción". Dijo tomando un trago más. Levantó la mano hacia su peluca, contenta de poder finalmente quitársela, y la tiró al suelo. Su cabello rubio cayendo hasta sus hombros. Byul se sintió liberada. "Ahora estoy lista". Dijo haciendo contacto visual con una princesa muy sorprendida.

Yong Sun la miró con los ojos y la boca abierta, Byul no pudo leer la expresión de su rostro. Cuando se percató de que la estaba mirando, cerró la boca rápidamente y dirigió su mirada hacia la herida de Byul. "Esto va a doler." Dijo sonando más enojada que antes. Presionó, sin mucho cuidado, el paño empapado en alcohol sobre la herida de Byul, quien intentó contener un siseo de dolor. Yong Sun limpió toda la sangre, solo para que supurara más. "Voy a necesitar coser la herida". Byul no estaba segura de que Yong Sun le hablaba a ella o hablaba consigo misma, por lo que no respondió. En lugar de eso, tomó otro trago, lo cual estaba aliviando el dolor. Yong Sun sacó una aguja e hilo con una mano, mientras la otra descansaba momentáneamente sobre el estómago de Byul, quien no pudo evitar memorizar la sensación. Los puntos no eran tan dolorosos, ella estaba acostumbrada a dolores peor que ese. Cuando terminó, Yong Sun limpió la herida nuevamente y comenzó a vendarla. "Todo listo." Dijo mirando hacia arriba, haciendo contacto visual con Byul, quien no había dejado de mirarla todo ese tiempo. Yong Sun parpadeó un par de veces antes de mirar hacia otro lado mientras un destello rosa comenzaba a resaltar por sus mejillas.

Byul tomó su camisa y se la volvió a poner. Se deslizó de la roca mientras Yong Sun limpiaba los suministros médicos. Agarró su peluca y la metió en su bolso junto con la tela que solía atar su pecho. Ella rápidamente cargó con su bolso y se volvió hacia la princesa. "Deberíamos ponernos en marcha. Tae Oh nos estará esperando". Byul solo pensaba en la furia que desataría Tae Oh una vez la viera. Solo esperaba que él no se desquitara con Yong Sun quien estaba parada al lado de Byul, con su bolso al hombro. "Por cierto, mi nombre es Byul". Sin esperar una respuesta comenzó a caminar, sintiendo mucho más dolor que solo en su costado.

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Yul era una chica. La cabeza de Yong Sun había estado girando en un ciclo de emociones durante la última hora mientras caminaban. Desde la ira cuando se enteró por primera vez, hasta la tristeza al darse cuenta y ahora confusión, que es donde su sentimiento se encontraba actualmente mientras intentaba darle sentido a esta situación. Se llama Byul y Yong Sun todavía sentía algo por ella. Esa fue la parte más confusa. Cuando Byul se quitó la peluca, el único pensamiento de Yong Sun fue cuán hermosa era y cuán rápido se aceleró su corazón. Incluso ahora mientras caminaban, ella seguía mirándola. Sus músculos parecían aún más impresionantes, el largo cabello rubio le quedaba bien y en cuanto a su pecho -- Yong Sun tragó fuertemente. Esperaba que con el tiempo estos sentimientos se evaporaran, cuando su cerebro finalmente comprendiera lo que estaba pasando. Yul, Byul, era mucho más impresionante como mujer, tenía mejor aspecto. Yong Sun sacudió su cabeza; no debería estar pensando en estas cosas y, sin embargo, sus ojos seguían mirando a la guerrera. "Casi llegamos." Las primeras palabras que Byul había dicho desde que salieron del pueblo. Apenas había hecho contacto visual con Yong Sun desde que comenzaron a caminar. Estaba caminando con una sensación de vergüenza y derrota, por lo que Yong Sun no pudo evitar sentir que tenía la culpa.