cielo color verde - juno svt

- c u a r e n t a y s i e t e

se despertó creyendo que sería de mañana ya, pero la oscuridad de la habitación y la ventana le dijo lo contrario. ni siquiera sentía ganas de estirarse y mirar la hora en el reloj de su celular, no cuando su espalda estaba demasiado pegada al pecho de jun, que lo abrazaba como un peluche. no se quejaba, sólo se le hacía algo raro, y vergonzoso. en realidad, no sabía muy bien cómo sentirse con todo lo que estaba sucediendo. su cabeza se encontraba muy calmada a como debería estar luego de haber recibido tal noticia de que taemin es un posible asesino, y eso le asustaba. no tenía que estar calmado, debería estar llorando, incluso. al menos eso le haría sentirse más normal.

también sabía que, ante noticias fuertes, cada persona reacciona de distinta manera, es un hecho. pero ya había pasado un día, casi dos. y sí, había llorado, pero no exactamente por enterarse de todo eso, sino por culpa y porque aquello era lo que necesitaba para explotar nuevamente como cuando tuvo la crisis de llanto. tal vez no debería preocuparse demasiado, al fin y al cabo, jun se estaba ocupando del caso, e independiente de todo lo que pasó, confiaba en él como policía.

el yeso le molestaba muchísimo, y eso que aún faltaban meses para que se lo quitaran. se dio vuelta, quedando frente a frente. algo que agradecía muchísimo era que junhui no roncara, porque tenía el sueño liguerísimo, así que no se imaginaba cómo sería dormir con alguien que ronca mucho. porque seungkwan ronca, pero de una manera muy tierna y leve, no le molestaba. todo en seungkwan era tierno.

hizo foco, acostumbrándose a la iluminación vaga que entraba por la puerta gracias a que la luz del baño permanecía prendida durante las noches, y observó detenidamente los párpados del chino, buscando cualquier movimiento que le indicara que lo despertó. pero lucía demasiado tranquilo, así que trató de no preocuparse tanto, y se permitió admirar sus facciones marcadas como si fuese un pecado.

se preguntó, ¿qué hubiera ocurrido de no hubiese aceptado ir con él? ¿seguiría sumido en la mentira de la muerte de taemin? ¿sabría toda la verdad? y es que temía tanto, temía de lo que pudiera pasar en un futuro si todo lo que planteaba la unidad de junhui era cierto. ¿qué pasaría con él? ¿creerían que también estuvo implicado? porque, joder, no recordaba nada. absolutamente nada. y eso también le aterraba, le aterraba haberlo sabido desde siempre y que su mente se lo haya bloqueado por el simple hecho de subsistir.

hansol, en el centro, le dijo que si la mente bloquea momentos, es porque quiere que sobrevivamos, porque recordar esos momentos haría que acabaramos muertos e inconscientemente buscamos sobrevivir de la psiquis. tenía tanto sentido, que ya no sabía qué pensar.

y es que tampoco es su culpa. no eligió que de un día para otro su madre no se haya suicidado, sino que la hayan asesinado. no lo eligió. no estaba preparado para enfrentar algo así, al menos no estando solo como lo estaba.

necesitaba tomar aire.

intentó levantarse, pero jun lo apretó contra sí soltando un quejido. se coloreó hasta las orejas, sus rostros estaban muy cerca, demasiado. tiró el cuello hacia atrás, para alejarse siquiera, unos centímetros.

— duerme. — susurró el chino, con los ojos apenas abiertos y la voz profunda.

chan se removió, buscando espacio personal, y jun se lo dio, lo soltó pero no del todo.

— sólo... iré a tomar agua. lamento despertarte, tú... tú sigue durmiendo. — asintió, dándole unos toquecitos en el pecho con su mano sana.

— mientes, irás y te quedarás despierto toda la noche. debes dormir, cariño. duerme. — ahora estaba despierto, al menos lo suficiente como para tener los ojos abiertos.

— no tengo sueño. — se quejó sin romper el contacto visual, como un imán.

la mano de jun seguía en su cintura, pero sin fuerza, sólo estaba allí posada, y eso le gustaba. era como un mimito indirectamente directo, y a él le gustan los mimitos.