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－¡MERIDA, ESCÚCHATE!－EXCLAMÓ Ashton.－¡Estás sonando como una niña pequeña!
－¡Porque lo que estás diciendo no tiene sentido, Ashton!－gritó Merida de vuelta.
La primera vez que rompieron Ashton y Merida fue la cosa más inesperada del mundo. Ellos rara vez discutían. Sí, tenían sus peleas sobre quién se quedaba con el último trozo de la pizza o sobre cuál sería la próxima serie que verían juntos.
Pero esta vez fue diferente.
Estaban gritándose, y no precisamente con alegría. Posiblemente, ninguno de los dos recordara cuál era el motivo de su pelea, pero tampoco estaban dispuestos a parar sus gritos para pensar en ello.
－Merida, estás siendo muy infantil.－el rizado pasó la mano por su pelo.
－Y tú te estás comportando como un idiota.－bufó la pelirroja, mientras veía como su novio se alejaba poco a poco.－Ni se te ocurra, Ashton Irwin. No vas a irte.
－¿Adivina qué? Sí que voy a hacerlo.
Y se fue, dejando a la actriz sola en su casa.
Merida suspiró, se sentó en el sofá y esperó a que el baterista volviera, se disculpara al igual que ella, le diera un beso y la abrazara hasta quedarse dormidos en el sofá.
Pero eso no sucedió.
Durante una semana, Merida no salió de casa, ni contestó al teléfono, ni miró sus redes sociales. Ella solo quería a Ashton de vuelta, pero su orgullo le podía y era incapaz de mandarle un mensaje o llamarlo para pedirle que volviera a casa y así arreglar las cosas.
Un día cualquiera, mientras la actriz estaba envuelta en sus sábanas como si fuera un burrito, la pantalla del móvil se encendió, indicándole que tenía un mensaje nuevo. Alcanzó el teléfono y leyó el nombre de la persona que le había enviado el mensaje.
Ash.
Desbloqueó el móvil y pulsó el mensaje. Al abrirlo, vio que era muy largo. Uno de esos que el baterista escribía cuando estaba muy emocionado por algo. Evidentemente, ese no era el caso ahora.
Se apartó los rizos rojos de la cara y se puso a leer.
Mer.
Primero que todo, llámame cobarde por enviarte este mensaje en vez de haberte llamado o haber vuelto a casa. Lo siento de verdad, pero supongo que después de todo, no tendrás muchas ganas de verme.
Ahora, la razón por la que te escribo. Le hice hacer esto a Luke una vez al enfadarse con Freya, y de verdad espero que funcione.
Ojalá pudiera volver a la semana pasada, para demostrarte lo que vales la pena. Ojalá te hubiera puesto antes a ti que a nuestra estúpida pelea. Me equivoqué, lo admito. Y no me di cuenta de que te iba perdiendo poco a poco.
Ojalá me hubiera quedado, Mer. Ojalá te hubiera abrazado como tú haces siempre. Sé que es un poco tarde, pero esto es todo lo que no te he dicho.
Desearía despertar ahora y verte a ti, calmándome y diciéndome que todo esto era una pesadilla, que me volviera a dormir. Desearía haberte escrito, por lo menos, una canción, darte más besos, comprarte más flores, compartir más pizzas.
Y ahora aquí estoy, con el corazón roto y echándote de menos. Ojalá pudiera volver a empezar las últimas dos semanas, pero esta vez, a tu lado y sin ninguna pelea de por medio.
Espero que sepas que haré todo lo que esté en mis manos para que podamos arreglar esto. Porque creo firmemente en que lo arreglaremos.
No te dije todo esto el último día, pero supongo que ahora ya lo sabes.
Te quiero, Mer. Ahora y siempre.
Tuyo,
Ash.
La actriz apagó el móvil, dejando en leído el mensaje y se dejó caer en su cama, para después suspirar y taparse la cara con sus manos.
Ella se sentía exactamente igual que Ashton, y esperaba con todo su corazón que arreglaran eso y que volvieran a ser la pareja feliz que siempre habían sido. Pero no quería responder ese mensaje porque sabía que si lo hacía, iniciaría una conversación con el baterista, y Merida no estaba preparada para eso.
Así que apagó el móvil, y se dirigió a la ducha para relajarse un poco y lavarse. Porque no iba a engañar a nadie, olía a animal.
Después de eso, se puso un pijama nuevo, se acostó en la cama y se tapó con sus sábanas hasta el cuello, intentando conciliar el sueño por cuarta vez ese día, dejando así a Ashton hecho un mar de dudas.
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Bienvenidos a la hora sad.
Sé que este final es horrible, pero tranquilas mis cielas, continuará mañana con Beside You. Y sí, Ashton le ha escrito un mensaje a Merida, igual que Luke le escribió una carta a Freya porque esto se está convirtiendo en una tradición ya.
Esta idea se me ha ocurrido hoy a las 3:30 de la madrugada mientras escuchaba Jet Black Heart, y me he levantado temprano para escribirla en mi libreta para pasarlo aquí después. ¿Qué me ha costado eso? Horas de sueño, pero da igual.
¡Espero que os haya gustado mucho! Ojalá hayáis llorado un poquitito como yo mientras lo escribía. Os adoro como nada, ¡hasta mañana!
