Sorpresas

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   Sabrina preguntó.

-¿Y qué haremos cuando hablemos con ellos? – Helen la miró – por qué lo que sea que sepan, ellos no lo dirán.

-Tiene razón – dijo Alice – tal vez esto sea una pérdida de tiem..

   De pronto un ruido se escucho, y todas estaban mirando hacia las estanterías, Helen había supuesto que ya no había nadie más.

-Que habrá sido eso – Sabrina se levanto y las demás con ella – tal vez alguien nos esta escuchando.

  Alice miró en cada pasillo, pasando varias estanterías, hasta llegar al penúltimo.

-De aquí vino el ruido – el tercer pasillo a la derecha, en la zona de novelas de misterio había un libro en el piso, se acercaron.

-Alguien debió tirarlo accidentalmente – Helen se aproximó a levantarlo, el libro se veía viejo, observó la portada, el título de la novela “ BAJO LAS SOMBRAS ”, se veía algo rasgada, lo abrió, había una página especial señalada, en la página habían palabras pintadas en azul, verde y rojo, y después una nota al final de la contra portada.

-Chicas, miren esto – todas observaron lo que la nota decía – el pasado puede llegar a ser oscuro, pero siempre hay una forma de iluminarlo, busca las respuestas en los lugares menos pensados, el comienzo de un misterio puede llegar a mostrarte el camino hacia la verdad – todas se veían confusas.

-¿Que creen que signifique? – preguntó Alice – es muy extraño.

-Si, y da miedo, quien lo habrá escrito – Sabrina observó los demás pasillo pero no había nadie, Helen empezó a examinar el libro, no tenía nada más – tal vez están intentando asustarnos, con todo eso que hablamos, tal vez alguien nos escucho, y nos está jugando una broma.

-No lo creo – hablo Helen, leyó nuevamente la nota – tal vez sea para nosotras como una pista de algo.

-¡Que! – Alice se dió cuenta que había hablado muy fuerte – lo siento, estas hablando encerio, digo eso sería muy extraño.

   El celular de Helen sonó. Sacó y vio que era un mensaje de Samantha, “ Nos vemos en la cafetería, reunión con los chicos”.

-Debemos irnos – cerró el libro y se encaminaron hacia la cafetería. Había muchos estudiantes en los pasillos, rápidamente escondio el libro debajo de su sudadera.

   Samantha había encontrado muy fácilmente a los chicos, estaban todos sentados en las banquetas del balcón que estaba en el piso de arriba de la cafetería, los chicos al verla se habían sorprendido, Samantha les contó sobre lo que las chicas querían y para sorpresa, los chicos querían hablar también de lo mismo con ellas, habló con Ryan y lo puso al tanto de algunas cosas que se había enterado, el chico era bastante lindo y calmado, notó Samantha, no como el orangután de su amigo que no paraba de mirarla.

Después de un rato las chicas habían llegado. Lo cual llevó a bastantes sorpresas, Helen reconoció al chico acosador de su clase, Josh, la chica no podía creerlo, definitivamente de todos los chicos que habían en el instituto, no esperaba que él estuviera aquí también. Pero ahora no tenía tiempo para el acosador. Y al parecer las demás chicas se veían bastante sorprendidas también, especialmente Sabrina quien parecía estar nerviosa.

- Eres tú – dijo Sabrina mirando al chico que estaba al lado de Samantha – eres el chico de la otra vez.

-Hola, Samantha – habló Ryan y ahi estaba esa sonrisa, la misma, pero aun más cautivadora –¿como has estado? – todos se miraron.

-Espera, ¿lo conocías? – preguntó Alice – pero cómo, y cuando.

-Él es el que estuvo quemando hojas, les conté sobre... eso– Alice y Helen con rostro de sorpresa, se miraron una a la otra – y por cierto por qué lo hacías – él sólo le sonrió.

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