IMPERIO (EDITANDO*)

1.

     Los invitados de la boda desfilan por todo lo alto sobre la alfombra del jardín de la casa de fin de semana de los Mason, uno a uno se van a acomodando, entre ellos los socios de Tobías Mason que los saluda a medida que toman sus respectivos lugares. Tobías luce como todo un padre orgulloso ante lo que va a acontecer, ansioso porque esta unión asegura su futuro.

      Remi se acomoda la corbata de su traje, odia llevarlos y se puede evitar usar uno, lo hace, salvo cuando no le queda más remedio, al menos que tenga reuniones en las oficina de la constructora.

-Mira eso-dice en tono despreocupado al lado de su hermano mayor en el altar-.Quien diria que la oveja negra de la familia terminaría cediendo ante el pedido de nuestro padre.

Dalton lo mira de reojo, esta serio e inmutable.

-No, si se que puedo tener ventaja.

Remi levanta una ceja, no comprende lo que su hermano quiso decir con eso.

-Como sea, ¿dónde esta Darren?.

-No lose, creí que vendría contigo.

-Pues ya ves que no, espero que ese idiota no este haciendo de las suyas-saca su teléfono y marca su número. 

      Hablando de Roma, Darren hace su entrada triunfal por la alfombra blanca dispuesta en el jardín para la ceremonia.

-¿Dónde te habías metido?-espeta Remi.

-Tranquilo tenía algo que hacer.

       A Dalton le llama la atención la expresión de Darren, lo sujeta y se lo lleva a un costado del altar lejos de miradas indiscretas.

-Oye, ¿Qué traes?.

-¿Qué pasa?-Remi los sigue.

-Mírame Darren-gesticula con dos dedos.

-¿Qué?.

-Mírame-exige sujetando su rostro para verlo directamente a los ojos, lo revisa-¿te drogaste?-espeta.

-Oh por dios.

Remi pone los ojos en blanco.

-¿Qué?, por supuesto que no-exclama desviando la mirada al suelo.

-Mentira, tus ojos están dilatados-lo suelta de golpe.

-Idiota-espeta Remi.

-¿Ya quieren dejarme en paz?, es solo una mínima cantidad, es todo.

-Competirás en unas semanas, por no mencionar que están todos los allegados de papá en esta fiesta-lo regaña su hermano.

Dalton mira su reloj.

-Faltan diez minutos, llévatelo a que se moje la cara, arréglalo- le dice con una voz que sonó más a una orden que a un pedido.

-Vamos.

Remi empuja a su hermano por un costado. Johan lo nota y se acerca a Dalton.

-¿Qué sucede con Darren?.

-Esta drogado eso es lo que sucede-espeta molesto.

-Dios mío-Johan se alarma-¿como puede hacer algo así justo en este día?.

-Deberías controlar más a tu hijo-contesta entre dientes.

-Si tu padre se entera se molestará.

-No es mi problema, es el tuyo, debías controlarlo Johan-la fulmina con la mirada.

-Darren ya no es un niño.

-Me estoy dando cuenta de que no sabes como manejar a tu hijo.

Dalton vuelve a su lugar y Johan desaparece echando humo, rumbo al baño  para revisar a Darren.