Soy una mujer
Soy una mujer
Ese pensamiento retumba en mi mente, no, no, no, me niego a creerlo.
¿Qué diablos voy a hacer?
Es toda mi culpa, he sido descuidado, demasiado confiado, tal y como siempre decía el imbécil desperdicio de vendas.
Mi primer impulso es volver a hablarle al jefe, pero me detengo a tiempo, no puedo decir que falle, que por un descuido ahora soy una mujer, respiro, inhalo y exhalo profundamente tratando de calmarme.
Mente fría Chuuya, mantén el enfoque, eres el ejecutivo más poderoso no te puedes derrumbar por nimiedades, ahora bien, los hechos, soy una mujer, no, bueno tengo cuerpo de mujer, no me hirieron, asesine a los peones así que antes de otro movimiento en contra de la Port Mafia tendrán que reagruparse, por tanto, has ganado y concretado la misión con éxito. Tendrás una semana de descanso, nadie nunca te interrumpe en esa semana
-Una habilidad me afecto – comienzo a reír por la verdad obvia – él me puede ayudar, su poder no tiene excepción.
Mucho más animado, he encontrado la solución, comienzo a retirarme por fin del campo de batalla, debo prepararme para el regreso.
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Hace unas horas atrás estaba tan seguro de mi decisión, en estos últimos quince minutos he tomado mi celular unas treinta sin animarme a llamarle.
Veo su nombre en la pantalla.
Caballa.
Me rio un poco, nunca he cambiado su nombre en mis contactos; lanzo el celular en la cama y me acuesto, observando el techo como si fuese lo más interesante.
-Rogarle ayuda a quien me abandono – mi voz es baja – después de todo no será tan fácil anular esta habilidad, debo dejar mi orgullo de lado, dejar mi odio porque si lo odio, lo odio por dejarme sin decir nada, por solo usarme.
No hay opción, me levanto y busco en mi maleta algo que me pueda quedar, saco un pantalón oscuro, una playera y una chamarra con capucha, absolutamente nadie debe reconocerme por error, hasta que hable con la caballa suicida en persona.
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No llegue a mi casa, me fui directo a un hotel de lujo, pague en efectivo incluido un extra para que no hubiese registro de mi estadía; la ventaja de los hoteles de lujo es que tenían boutiques dentro, en cuanto deje mis cosas en la habitación baje para comprarme ropa, solo una mudada no necesitare más, hoy mismo iré a la Agencia.
Suelto un suspiro, esto será complicado, como se supone que sabre que cosas usar.
Me quedo de pie en la entrada de una de las tiendas, el nombre es The Kooples; es una marca francesa, vi esa marca en mis pequeñas vacaciones en Paris con Ane-san.
-Muy bien Chuuya no puedes estar tan perdido – me doy animo a mí mismo – otras veces has ido con Ane-san de compras, esto debe ser similar
Ingreso a la tienda.
La recorro a paso lento observando los escaparates, meditando sobre lo que será bueno, creo que en verdad luzco perdido o indeciso, ya que una dependienta se me acerca con una amable sonrisa.
-Disculpe señorita, ¿puedo ayudarle en algo?
-Etto – me sonrojo un momento – si por favor – no puedo hacerlo solo – vera no tengo nada de ropa – explico rápido aún con más vergüenza – y necesito un atuendo
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Vidas Paralelas
Fiksi PenggemarUna misión... Un nuevo poder... ¿Qué puede salir mal? Eso fue lo que pensó Nakahara Chuuya uno de los ejecutivos de la Port Mafia, sus misiones si bien siempre implican un gran riesgo nunca fueron problema para él, todo debido a su inmenso poder, ha...