HATED FAME | YOONMIN

Treinta

- Y -

La tensión puede cortarse con un chuchillo y pediría que abrieran las puertas para que ventilara un poco el ambiente, pero es imposible debido al montón de reporteros que hay rondando por el juzgado.

Me giro un momento completamente incómodo intercambiando miradas con mi hermano. Papá y mamá están aquí. Ambos han viajado solamente para estar presentes en el juicio contra Namjoon principalmente porque se han enterado por la televisión extranjera.

Ninguno de los dos sabía que tenía una relación con Jimin y que éste había sufrido amenazas por parte de mi mejor amigo que de paso me robaba millones a escondidas.

Es un muy difícil todavía analizar la situación. Es como si dentro de mi cabeza todavía hubiera cierta parte que no lo creyera.

Me levanto por respeto al juez que acaba de entrar e inmediatamente nacen en mí unas desesperadas ganas por fumarme un cigarrillo. Quiero fumar, pero mi abogado ya me dijo que acá no tengo ese privilegio.

- Damos por iniciada la sesión.

Es gracioso que esté en un tribunal de justicia exigiendo la misma pero él sea injusto. Veo como desde su sillón lee algunas hojas, bebe café y se piensa en encenderse o no un cigarrillo. Al final no lo hace, pero es igual.

El chico al que consideré mi mejor amigo se levanta en compañía de un policía. Le miro y le veo sonreír. Sus ojos brillan con picardía, la línea de su mandíbula está incluso más definida que antes, y sus ojos son más profundos, aunque no tan cautelosos como solían serlo.

Aparto mi vista como si mirarlo me quemara los ojos.

- Adelante al caso. Señor Kim, puede comenzar su declaración.

(...)

De seguro parezco una chimenea ambulante fumando como un loco en la parte de atrás del sitio donde estoy. Aquí no hay cámaras, no hay reporteros ni personas que puedan molestarme.

- Oye – dice Hoseok apareciendo por mi espalda para darme unas suaves palmadas – Lo hiciste bien.

- ¿Viste su cara? – pregunto dando otra calada – Parecía muy seguro de su falsa declaración ¿y si todo esto no resulta? Quizá sea una pérdida de tiempo estar aquí.

No podré traer a Jimin conmigo nunca.

- No digas eso. Tenemos las pruebas suficientes para culparlo y May en el juicio de ayer ya confesó que él estaba involucrado. Relájate y deja de fumar – me quita el cigarrillo de las manos para tirarlo al piso y aplastarlo con su zapato – ¿Sabes que esto mata?

Saco otro de la cajetilla que guardo en el bolsillo de mi pantalón – Estoy nervioso.

- Tienes las cámaras y la confesión de la señora Choi. Es imposible que Namjoon salga libre de esta.

- Sí, tienes razón... – tiro el humo mirando las nubes sobre mi cabeza. Hace dos días que el sol se ha escondido y no quiere salir – Pero el hecho que se trate de él hace que me sienta ansioso.

Si pudiera pedir algo respecto a Namjoon, no pediría que me devolviera el dinero, sino que trajera de vuelta a mi mejor amigo.

- Tranquilízate y respira – me aconseja. De repente Hoseok se posiciona frente a mí y comienza a estirar los brazos como si quisiera alcanzar el cielo.

- ¿Qué haces?

- Hazlo conmigo, ayuda a relajar el cuerpo.

- No me jodas – río negando con la cabeza – No haré esa estupidez.