- Y -
- ¿Está encendida? – le doy golpes a la videocámara que tengo frente a mí. Estoy sentado en mi estudio completamente sólo observando fijamente la lucecilla roja que tengo al frente – Creo que es segunda vez que utilizo este medio para comunicarme con ustedes. La primera fue hace ya algunos años y resultó un desastre ¿alguien lo recuerda?
Echo una leída a la caja de comentarios que no deja de bajar como los créditos de las películas. Apenas puedo leerlas, sin embargo logro distinguir algunos sí y otros no por ahí.
- Daré un par de minutos para que la gente se conecte – Ya tengo cerca de un millón de personas viendo mi directo y eso que acabo de empezarlo – Esto es incómodo porque no puedo verlos, pero lo que tengo que decir es importante.
Ha pasado una semana desde que me vi con Jimin y apenas puse un pie en Seúl me sentí estresado otra vez, tanto que no creo poder soportar otra rueda de prensa. Las detesto. Odio el cuchicheo que se forma en la sala cuando termino de decir algo, las putas cámaras encandilándome mientras intento vomitar mi discurso, y los malditos reporteros bombardeándome de preguntas estúpidas.
¿Acaso ellos no notan lo molestas que son sus voces?
- Bien, supongo que ya somos muchos – resoplo mirando los números en la pantalla de mi computadora. Ni siquiera ha pasado un minuto desde que dije que esperaría a los demás y ya siento que es muchísima gente – Lo siento si hago esto muy tarde. Tuve un día ocupado... ya saben, lo normal. Le dieron el alta a un amigo que casi muere, así que fui por él – suspiro recostándome sobre el asiento – Tuve que ver cómo se llevaban a mi mejor amigo a la cárcel, terminar los papeleos de una demanda, en fin, lo normal para un chico de veintiséis años ¿no?
Los comentarios se llenan de un no rotundo y eso me llena de gracia.
- El motivo de esta inesperada charla es aclarar las cosas que han estado sucediendo. Sé que se han estado inventando rumores acerca de esto, es por eso que estoy aquí esta noche. Tienen bastante imaginación ¿eh?
Tanta que me entran ganas de golpearlos.
- Recuerdan... ¿recuerdan a mi yo de hace más de un año? En ese entonces estaba muriendo en un mar eterno de silencio, haciéndome polvo de a poco y llevando un sentimiento muerto en mi pecho. El corazón ya no era mi amigo, no me guiaba hacia ningún lado. Estaba totalmente perdido – suelto una risa grave sin ánimo – Pero luego eso cambió y volví a ser feliz otra vez. Conocí a alguien, un amigo – no puedo evitar recordar a Jimin bebiendo un jugo de manzana en las batallas de rap ¿quién diría que ese chico que volteó su jugo en mis botas ahora sería mi novio? – con el paso del tiempo ya no era una simple amistad lo que nos unía. Yo llegué hasta él sin siquiera buscarlo, no lo esperé jamás, demonios, ¿conocerlo fue casualidad o causa del destino? No lo sé, pero ahora mismo mataría por él y moriría por él sin pensármelo.
Ojalá todo el daño que sufrió me lo hubiesen traspasado a mí.
- Supongo que ya saben de quién estoy hablando – ladeo la cabeza mirando fijamente al lente de la cámara – Jimin, el chico del cual han estado haciendo su vida un infierno. Un chico que me ha estado sanando como no tienen idea y ahora mismo lo necesito más que al rap, más que a la música.
Unos ojos como los suyos no se olvidan.
- Se encarga de coger mi mano cuando mi cabeza me daña a mí mismo. Su aura me da vida. Ah... es que simplemente me faltarían palabras para explicar lo que es él para mí, pero lo que me jode es que sea yo mismo el que indirectamente le hizo sufrir. No se lo merece, él no merece siquiera tocar este cochino mundo lleno de corazones podridos.
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HATED FAME | YOONMIN
FanfictionLas pequeñas mentiras destruyen grandes amores. Segunda temporada de EMPTY FAME.