Capítulo 14

1K 100 17
                                    

F: Cristina lo que pasa es que...

C: Habla por el amor de Dios -estaba poniéndose nerviosa al ver el rostro Federico.

F:Cristina tu papá acaba de tener un pre infarto y doña Consuelo te está esperando en el hospital de Villa Hermosa.

C: Federico mi papá.. - dijo llevándose las manos a la boca mientras empezaba a llorar - ocupo ir al hospital, por favor llévame - lloraba desconsoladamente.

F: Sí Cristina yo te llevo pero necesito que te calmes porque muchas emociones fuertes en un mismo día no le pueden hacer bien al bebé, además debes de arreglarte, no puedes llegar así donde tus papás porque se pueden preocupar // Cristina estaba despeinada y algo arañada por la pelea que tuvo con Raquela//.

C: Tienes razón - se secó las lágrimas que caían por sus mejillas mientras se levantaba de la cama para así poderse arreglar y por fin partir hacia el hospital.

15 minutos después estaban en camino hacia el hospital de Villa Hermosa una Cristina bañada en lágrimas y un Federico preocupado, la verdad no le gustaba nada verla en ese estado y menos sabiendo que eso le podía afectar a su hij@.

Luego de un largo camino llegaron al hospital de Villa Hermosa. Federico literalmente tuvo que correr a alcanzar a Cristina ya que se bajó de la camioneta como alma que lleva el diablo para entrar lo más rápido posible al hospital.

F: Cristina esperame - le dijo alcanzandola y sujetandola del brazo.

C: Federico necesito entrar ya a ver a mi papá, ocupo saber que esta bien - le dijo llorando mientras se acurrucaba en su pecho.

F: Yo entiendo tu desesperación pero recuerda que llevas a nuestro bebé adentro y si te caes le puedes hacer daño - le dijo mientras la abrazaba para consolarla.

Luego de unos minutos Cristina se logró tranquilizar y entraron al hospital, preguntaron en la recepción y les dijeron que don Severiano se encontraba en la habitación 34 del segundo piso y en seguida se encaminaron hacia ahí.

C: Mamá como esta mi papá - le dijo Cristina a doña Consuelo apenas la vio.

DC: Esta bien mi niña, tranquilizante que no les hace bien -le decía mientras le daba un fuerte abrazo.

F: Buenas doña Consuelo - saludó Federico a su suegra luego de unos minutos de estar en segundo plano.

DC: Federico gracias por traer a mi hija - le dijo dándole un abrazo. La relación con su yerno era buena desde el momento en que se casó con su hija.

F: No me tiene que agradecer doña Consuelo - le dijo con separándose del abrazo - y ¿cómo está don Severiano?

C: Sí mamá, ¿cómo está mi papá, qué han dicho los médicos?

DC: Pues dicen que se encuentra bien pero lo van a dejar internado al rededor de 4 o 5 días.

C: Tanto, dudo que mi papá soporte tanto tiempo en un hospital — decía preocupada.

DC: Pues sí Cristina pero si no se cuida y se queda en este hospital el tiempo necesario es provable que le dé un infarto.

C: Mamá quiero ver a mi papá, ¿ya podemos pasar?

DC: Creo que hasta que salga el médico que lo está atendiendo.

Luego de eso pasaron al rededor de treinta minutos hasta que el doctor salió haciendo que Cristina se llevara una enorme sorpresa.
.
.
.
Al otro lado del país //Sinaloa

X1: Si gano te doy mi hacienda y una bueno suma de dinero.

X:Sí yo gano te doy mi hacienda, mi empresa y la mitad de lo que produzca este mes la otra empresa — dijo con arrogancia confiado de que ganaría.

Del odio al amor hay solo un paso F&C.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora