Capítulo 6 🔎

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El grupo se dirigió a un establecimiento cercano. Los niños celebraron por un rato.

Todos estaban sentados en una barra comiendo helados, los niños enmedio, Hattori en una esquina y la chica y Shinichi en otra.

—Por cierto, Shinichi-niichan...

—¿Qué?¿Qué pasa? —respondió más tranquilo a la cuestión del niño con pecas.

—¿Quién esa chica que viene con nosotros? —la señaló.

—¿Eh?¿Qué?¿Yo? —preguntó ella confundida.

—¡Ah! Ella... —susurró viéndola, intentando pensar "¿Quién era?"

Shinichi le sonrió a la chica, casi y muy poco faltó para que tomará su mano, pero un grito salió de algún lado. Y fugaces, casi todos se dirigieron corriendo a la dirección.

Una persona fue asesinada en el interior de los sanitarios.

Después de examinar la zona, Shinichi se dirigió a ella de pronto.

—¿Por qué no vas a dar una vuelta por la zona? Ahora es seguro. Te alcanzó en un momento, esto tomará poco tiempo. —sugirió él, aceptando ella de inmediato.

Salió y caminó un rato, encontrando pronto otro establecimiento, pero de bebidas. Trataba de no perderse.

Entró, sentándose y pidiendo algo. Al menos todavía tenía un poco de dinero propio. Los últimos días no había comido bien.

De inmediato, se percató de una presencia conocida, incluso tuvo un poco de miedo. El hombre borracho, Mouri Kogoro, estaba ahí, y de alguna forma ella se sentó a su lado.

Sin previo aviso, comenzó a hacer un berrinche, los clientes y dueños parecían ignorarlo.

—¡Ran!¡Eri! ¡¿Por qué?! ¡Maldición!

Quedándose pensativa, imaginando en que clase de situación se hallaba.

—¿Se encuentra usted bien, señor? —se animó a preguntar.

La miró, no la recordó.

Sus ojos estaban rojos de tanto llorar y olía horrible.

De pronto, la abrazo llorando. ¿Cuan borracho estaba?

—¡Mi hija! ¡Ella me odia!

—Ah... ¿Pero por qué, señor?

—¡Ella me lo dijo?

—¿Qué le dijo?

—¡Ella cree que soy un viejo borracho que no sirve para nada y me odia por eso!

Aguantó una pequeña risa, pues al parecer era así.

Enseguida, se escuchó la puerta del lugar abrirse con fuerza. Una chica de aparente misma edad que ella, entro mientras el hombre seguía abrazándola. Con semblante severo buscaba algo, los observó sin entender la situación.

—¡Tío Kogoro! —exclamó preocupada. Tenía una coleta alta con un listón como peinado. Se dirigió a ellos, con los brazos aparto desesperada a Mouri Kogoro de ella. —¡L-lo siento!¡De verdad! —habló con un tono parecido al amigo de Shinichi.

—No hay problema. —respondió comprensiva.

El gran detective balcuceaba cosas, y como si fuera aproposito, él cayó dormido en la mesa.

—¡Maldición! ¿Y ahora cómo me lo voy a llevar?

—¿Te puedo ayudar? —se ofreció amable.

Bajo la lluvia. ☘️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora